Second chance! ── ℳ𝘪𝘳𝘢𝘤𝘶𝘭𝘰𝘶𝘴 ℒ𝘢𝘥𝘺𝘣𝘶𝘨.

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ADRIEN MENTIRÍA si decía que lograba entender todos los mensajes del group-chat que había creado Chloé. Todos ellos eran de las dos féminas, escritos en un español! Resignado, contestó en francés.

[07:45 am] Adrien Agreste🤺: No les entiendo nada, pero me despido porque ya debo entrar a clase. Luego hablamos, boludas.

[07:46 am] Molestia 2: No hablo taka taka, y no uses puntitos conmigo🤬

[07:46 am] Molestia 1: con nosotras* 

[07:46 am] Molestia 1: y sí entendés francés, yo te enseñé forra

[07:47 am] Molestia 2: ñiñiñi

[07:47 am] Adrien Agreste🤺: ¿No son las tres de la mañana allá? ¿Qué hacen despiertas?

[07:47 am] Adrien Agreste🤺: Además de molestarme, digo

[07:48 am] Molestia 1: Era lo que intentábamos decirte. Pero por no esforzarte por traducirlo, adivina.

[07:48 am] Molestia 2: Te queríamos contar que nOS VAMOS A FRANCIA !!

[07:48 am] Molestia 1: Ya la cagaste pELOTUDA

[07:48 am] Molestia 2: Adrien, la rubia hueca me maltrata, ayuda😭😭

[07:49 am] Molestia 1: Ah claro para eso sí hablas francés 

Adrien rió. Hace un año, apenas soportaba estar en el mismo lugar que Chloé por su terrible personalidad; y ahora es una de las personas que más alegra su día solo con mensajes. Si el mensaje de molestia 2 era cierta, entonces se alegraba inmensamente de poder verlas. Al ver a su mejor amigo, Nino, ingresando al salón de clase, se apresuró por responder antes de que la misma comience. 

[07:50 am] Adrien Agreste🤺: Las adoro pero me tengo que ir. Váyanse a dormir y luego me cuentan todo. Nos re vimo'

Él fue de las pocas personas que aún mantenía contacto con la blonda, junto a Sabrina. Las primeras semanas en las que se fue la chica le dejaba cinco mensajes por minuto, sin exagerar; y él la entendía, seguramente se sentía sola. Pasando los meses los mensajes se volvieron menos usuales, quizá hacían llamadas o videollamadas; y en una de ellas conoció a la que él bautizó como molestia dos: una argentina llamada Agostina que ayudó a Chloé a redimirse por sus malas acciones (o eso decía ella, le encantaba dramatizar las cosas). Al ser tan extrovertida, no tardaron mucho en volverse amigos a distancia, además Adrien podía permitirse ser él mismo con ella y Chloé; por eso estaba tan emocionado por su supuesto regreso.

─ ¿Qué onda, bro? ─ le preguntó su mejor amigo mientras se sentaba junto a él.

─ Emocionado, pensé que mi padre no iba a renovar la matrícula.

─ Si eso pasaba toda la clase hubiera hecho una protesta frente a tu mansión, tenlo por seguro. ─ El rubio rió al imaginarlo. ─ ¿Tendremos compañeros nuevos?

─ Lo estamos por descubrir. ─ Adrien le dijo, a la vez que veía a la profesora Bustier entrar al salón.

A diferencia de cuando Chloé estaba en clase, muchos se habían cambiado de lugar. Su mesa estaba vacía, como esperando su regreso; y en el de detrás estaba Sabrina con Nathaniel (los cuales se habían hecho muy amigos el año pasado). La clase quedó en silencio cuando vieron a la profesora pararse frente a ellos; a excepción de la peliazul que intentó entrar tarde siendo sigilosa pero cayó en el intento.

─ Buen día, chicos. Hola, Marinette Es agradable verlos de nuevo. ─ Sonrió, haciéndole un ademán a la nombrada para que se siente. ─ Antes de empezar la clase, les quería informar que la semana entrante Chloé volverá de su intercambio. -Pausó, a la vez que una ola de susurros disconformes llenaba el aula. ─ Además, también recibiremos a una alumna de intercambio, viene de Argentina.

En ese momento Adrien no pudo contener la gran sonrisa emocionada que se le escapó, ¡Entonces era verdad, y no una joda como las que siempre le hacían! Bueno, debía ordenar sus horarios urgentemente para priorizar las clases de español intensivas. A su padre se las pidió con la excusa de "mantener posibles relaciones con modelos y diseñadores hispanohablantes", pero la verdad es que quería aprender el idioma que tanto había fascinado a su mejor amiga de la infancia. Ya se imaginaba hablando con las dos chicas frente a los demás, siendo él mismo (no aquel que siempre fingía ser) sin preocupaciones por el qué dirán. Estaba tan centrado imaginando posibles escenarios, que no se dio cuenta que su emoción era demasiado notable para todos.

─ ¿Pasa algo, Adrien? ─ El rubio sacudió la cabeza, avergonzado.

─ Nada, señorita Bustier. Solo que creo conocer a la chica que viene de intercambio.

─ ¡Eso es genial! ¿Sabes qué le gusta? Quizá podríamos hacerle un regalo de bienvenida.

─ Comida, definitivamente. ─ Afirmé. ─ Pero sin tener derivados de animal, es vegana.

─ ¡Entonces una fiesta de bienvenida con comida! ¿Qué dicen, chicos? 

La emoción de la profesora y Adrien era contagiosa, porque en menos de diez segundos todos estaban afirmando igual de emocionados, pensando en cómo sería la extranjera.

─ ¡Genial! ─ Exclamó la pelirroja. ─ Podemos tomarnos esta hora para comenzar a planear las cosas...

... Ahora el único problema de Adrien era cómo mantener el secreto. Las molestias eran muy persuasivas, y él definitivamente no quería arruinarles la sorpresa. Sacudiendo la cabeza comenzó a comentar posibles ideas, ya luego pensaría en lo otro.

HOLA, NO PUEDO CREER QUE ESTÉ EDITANDO ESTO AJKSDSASK PENSÉ QUE NUNCA MÁS LO IBA A TOCAR Y ACÁ ME TIENEN. Si les gusta, porfi voten y comenten. Las kiero<3

Primera publicación: Por allá en 2019.

Editado: 15/01/22.