No Te Enamores De Mi

XI.- "Cena"

Sábado en la noche.

Ambos jóvenes salían del auto, ella llevaba un hermoso vestido no tan ajustado pero si resaltaba su hermosa figura, un poco de maquillaje y dejo su cabello suelto, ambos caminaban tomados de la mano al interior del restaurante, ella lucia feliz y radiante.

Bulma: ¡no puedo creer que le hallas pedido permiso a mi padre!
Vegeta: ¡no fue nada! Y estuvo de acuerdo con esto.

Llegaron a su mesa y como todo un caballero le abrió la silla para que ella se sentara, enseguida se fue a su lugar, sentándose frente a ella, el mesero se acercó con la carta y los saludo con cortesía.

Ambos ordenaron, y mientras traían su cena, platicaron un poco más de una manera más intima.

Cuando terminaron de cenar, se quedaron sin palabras, ya no había nada más que decir solo miraban la pista de baile, había varias parejas bailando muy romántica y muy cerquita, la peliazul miraba con una sonrisa a esas parejas se veían realmente felices, giro su vista a su acompañante.

Bulma: ¿quieres bailar?

Vegeta.
Su propuesta me hizo sentir un poco incomodo, ¡odio bailar! aparte de que ¡no se hacerlo!

Vegeta: ¡lo siento! ¡No bailo!

Borro un poco su sonrisa.

Bulma: ¡ah!

Eso me hizo sentirme un miserable, pero espero que entienda.

Bulma: ¡yo tampoco! Bueno lo que quiero decir es que no me gusta bailar frente a la gente, pero ¡amo bailar!

La mire

Vegeta: ¡pues en verdad yo no puedo! ¡La verdad no se hacerlo!

Ella sonrió.

Bulma: ¡todos saben bailar!

La miro y sonrió.

Bulma: no puedes ser ¡tan malo!

¡Ella realmente quiere bailar! pero soy como una piedra en eso, me mira con sus ojitos suplicantes y carita tierna.

Bulma: ¡por favor! ¡Bailemos!

No puedo con ese rostro, tan angelical, pero tampoco quiero hacer el ridículo frente a todos.

Bulma: ¡hazlo x mi!

Sus, ojos, su carita suplicante y ese puchero como puedo decirle que no, a si que me levanto y la tomo de la mano, ella sonríe y me toma la mano,ambos caminamos a la pista, no voy a negar que estoy nervioso, no importa lo que la gente piense de mi, la única opinión que me importa es la de ella, por eso temo quedar mal, al llegar a la pista se puso frente a mi, no se ni siquiera como agarrarla, ella pone mi mano en su cintura y sostuvo la otra, tomo aire y lo suelto dio un paso a la izquierda y yo la seguí, a destiempo por supuesto y la pise, se quejo.

Bulma: ¡ahush!
Vegeta: ¡lo siento! ¡Te dije que no sabia hacerlo!
Bulma: para ser justos si me ¡advertiste!

Seguimos bailando un poco a destiempo pero ahora trataba de no pisarla, la mire me sentía muy nervioso pero no quería concentrarme en lo mal bailarín que soy a si que comencé con una conversación.