En medio de la noche la Reina élfica, su hija la princesa y su guardia personal real corrían velozmente a pesar de sus vestimentas. La raza élfica era conocida por su agilidad, pero al ser de la guardia real su resistencia era mayor al promedio de los soldados élficos, tenían equipamiento completo de arcos y espadas. Es por eso, que cuando el plan se ejecutó al encontrarse con Luxuria, escoltando a la Reina y princesa no tardaron mucho tiempo en infiltrarse en territorio demoníaco, esquivando escuadrones de vigilancia o pueblos demoníacos.
Era una misión en extremos secreto, si se filtraba que la Reina y la princesa no estaban en el palacio real para tomar las decisiones de la guerra, la moral de su pueblo podría verse afectado. Y más si descubrían que estarían en territorio enemigo, que podrían caer capturadas o muertas, eso dejaría en un caos el Reino élfico mientras pelean por el poder los nobles para tomar el derecho de gobernar el Reino élfico.
Pero todo había sido cuidadosamente planeado, el cuerpo de su hija muerta estaba siendo conservada lo mejor posible para su resurrección cerca de los límites de su Reino élfico y el Reino demoníaco. Después para crear una distracción por medio de una batalla, pudieron pasar las defensas fronterizas y seguir avanzando. Tardaron 3 días enteros con pocos descansos para llegar al pequeño castillo donde estaba Luxuria según la información que los espías lograron descubrir.
Ahora bajo la cubierta de la noche estaban examinando las defensas del castillo, aunque no era una fortaleza impenetrable, los soldados que lo protegían se veían bien entrenados y difíciles de matar en silencio para no alertar a los demás. En las murallas, los centinelas miraban y caminaban lentamente haciendo su vigilancia con sumo cuidado. La Reina élfica ordeno matar los centinelas primero para no ser descubiertos rápidamente. Normalmente un disparo sería suficiente para matarlos, pero cuando no lo hizo se sorprendieron, que aún seguía en pie el centinela, tomo 2 disparos más para matarlo. Se formaron grupos de tres, los guardias reales tomando sus arcos apuntando a un centinela cada grupo, así podían estar seguros de matarlos sin que gritaran. Poco a poco los centinelas iban cayendo donde estaban en el muro, pero el ultimo que estaba cerca del muro viendo a las afueras, había caído haciendo un estruendo por su cuerpo tocando el suelo.
El sigilo se había perdido, pronto los soldados demoníacos tardaron un poco en reaccionar y examinar de donde venia el ataque. Esto había sido aprovechado por la guardia real élfica haciendo llover flechas consecutivas para disminuir a los soldados demonios que protegían el castillo. La Reina y la princesa también comenzaron a usar su magia para disminuir los soldados enemigos.
Pronto la conmoción hizo que Luxuria se preguntara que estaba pasando, saliendo a investigar por el alboroto que se escuchaba afuera.
{En serio, no puedo dormir si hacen mucho ruido.}
[Mi señora, estamos siendo atacados, por favor no debe ir para allá.] Soldado
{Oh entonces debo esconderme como rata o escapar mientras los demás mueren. Acaso no me pase todos los malditos días reviviendo soldado tras soldado para no ir y poder usar mi poder para ayudar.}
[Bueno no me refería a eso, pero tenemos ordenes que usted no sea capturada o peor muerta.] Soldado
{Pues pelean fervientemente para que no pase eso o acaso mis ordenes son menos que las que te dijeron otro consejero o general.}
[No mi señora, pero...] Soldado
{Pero nada ahora vamos y comiencen el contrataque.}
[Si señora.] Soldado
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Dark Priestess
FantasyUn chico intimidado y maltratado por todos sus compañeros y familiares conociendo más que solo la desdicha y la miseria. Cuando los maltratos de sus compañeros dan el resultado de su muerte, un Dios Malvado le ofrece poder, dinero y mujeres para que...