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Todo se estaba tornando más extraño estos últimos meses, ni para Johnny ni para Ten había quedado el tiempo entre los dos. Su vida ahora estaba a base del rotundo trabajo que tenían ambos y por más que quisieran darse un descanso.. era casi imposible que las empresas los dejaran por un tiempo libre cuando ni siquiera estaban cerca de sus vacaciones.

Ten se encontraba llorando. No soportaba el hecho de estar tan distante de su novio, aunque vivieran en la misma casa no tenían el tiempo de verse y con esto mucho menos él de poder prestarse atención o estar pendientes uno del otro. Ten, estaba en su habitación.. hundiéndose en sus propias lágrimas y pensamientos quebrantados, si, estaba en casa y solo porque le dieron el día gracias a un malestar que sintió en la mañana, también.. se había hecho una leve lesión durante un ensayo de baile.

Sus felinos y profundos ojos se encontraban algo rojos e hinchados gracias a todas esas horas de llanto, su cabello estaba algo desordenado y sus mejillas algo rojizas al igual que su fina nariz. Cualquiera que lo viera en este estado podría romperse de sensibilidad. El pelinegro poseía en sus delicadas manos una foto ya algo antigua de él y John. Aún recordaba ese momento.. el estadounidense le había estado rogando por una simple foto aquél día, hasta que por fin se la sacaron y en una cabina de fotos precisamente. Ambos se miraban radianes, se podía notar a través de la imagen como los dos mantenían en aquél entonces una conexión única y especial, todo lo contrario a lo de ahora... Su relación se había estado perdiendo a cada vez más.

El tailandés todavía se encontraba sentado en la orilla de la cama, admirando la fotografía entre sus manos y frotando sus ojos humedecidos, portaba una gran sudadera color negra y unos pantalones muy acogedores del mismo color, se sentía devastado, sabía que una vez más.. Johnny llegaría tarde cuando tal vez él ya se encontraría dormido y perdido en un profundo sueño.

De pronto, la puerta de la habitación se abrió inesperadamente, y a su vista se encontraba su extrañado novio con un aspecto agotador y estresado, Ten secó rápidamente sus lágrimas y guardó bajo la almohada aquella fotografía, no dijó ni una sola palabra y solo se dedicó a mirar al castaño quién se desprendió rápidamente de su corbata y dejó caer al suelo la parte superior de su uniforme de trabajo.

Se acercó lentamente hacia el tailandés y se arrodilló frente a él con una mirada devastadora.

-lo siento. -dijó apoyando su cabeza en las rodillas del pelinegro.

Este se quedó atónito a tal acontecimiento que estaba sucediendo frente de él, y sí, le dolía bastante ver a su querido novio en estas condiciones pero era igual para John, el sentimiento era mutuo.

-yo igual. -empezó a acariciar su cabeza entrelazando sus delgados dedos por la fina cabellera del americano.

-renuncié. -dijó inexpresivo y anticipadamente.

-¿Que hiciste que?! -exclamó el de ojos gatunos.

-No te preocupes, conseguiré un mejor empleo. -se levantó de entre sus piernas y procedió a quitar también sus zapatos.

-pero, tú... Te esforzarte mucho por trabajar ahí. -Ten bajó la mirada y abrió los ojos sorpresivamente.

-Sólo mírate, estas aún más débil, el estrés te consume al igual que el cansancio y tú rendimiento físico se está llendo. Si sigues así renunciaré por tí. -lo miró detenidamente.

Ten sabía a lo que Johnny se refería, si él había renunciado porque él no lo haría? Después de todo no era sano seguir así, pues tampoco valía la pena arriesgar su salud física y emocional.

-hey, escúchame..
Te amo si? Y me parte el corazón verte en este estado, odio lo que está pasando entre nosotros o más bien.. lo que no está pasando, no quiero perderte aún más. -John tomó asiento en la cama junto a él de baja estatura y tomó sus manos para así consolarlo.

Sin aviso alguno Ten estalló, se dejó atrapar entre los brazos del más grande y dejó escapar las lágrimas que le quedaban. Lo abrazó, se hundió entre su pecho y empezó a decir una y otra vez cuanto lo amaba y extrañaba, Johnny se quedó en silencio, sólo lo amortiguó un buen tiempo mientras se desahogaba, pero era demasiado para él, sus lágrimas también habían aparecido y es que no había cosa más dolorosa que ver a su pequeño kitten llorar de angustia y cansancio. Ya estaba decidido, ambos renunciarían y al menos que la empresa no les diera mejor trato y les tuviera más compasión... Ninguno se resignaría a volver.

Con el transcurso de las horas ambos ya se encontraban muy agotados, el llanto y la tristeza los había consumido por un buen tiempo y lo único que necesitaban en estos momentos era tenerse el uno al otro.

Ten cayó dormido entre los brazos de Johnny, esté último mencionado se sentía mejor después de todo, por fin volvería a pasar tiempo con su tennie y repararían juntos los descuidos de su duradera relación, Ten yacia en el pecho del mayor.. durmiendo tranquilo y aliviado por saber que Johnny ya no lo dejaría nunca más solo, sus labios y nariz aún tenían un tono rosado a causa de haber llorado, John acarició la espalda del tailandés con mucho cuidado buscando adormecerlo aún más y así relajarlo, en cambio él estaba entrando en sueño solo con ver el angelical rostro del pelinegro descansar sobre él, lo único que ambos deseaban es poder permanecer juntos por siempre.

-te amo. -dijó John con voz ronca y tranquila.

-yo también te amo.. -contestó Ten, ya estando de seguro en un pacífico y aliviante sueño por saber cómo todo se había solucionado...

***

Semanas habían pasado y como al parecer a la empresa no le quedaba de otra tuvieron que cambiar algunas cosas para que ambos chicos se quedarán en ella. Ahora todo parecía estar mejor, aún tenían su trabajo pero era mucho más justo que antes, por fin tenían tiempo para salir, hacer cosas que cualquier pareja hace y tenerse atención uno del otro, su estado físico también estaba bien, ya no solían matarse practicando/trabajando ni cumpliendo con sus muchas actividades, todo era más sencillo de alguna forma.

Ya un mes más tarde ambos novios se encontraban felices, Ten había preparado una cena especial, adornó la mesa con velas y sirvió los platillos cocinados dándoles un toque elegante y exquisito, Johnny estaba demasiado contento, tener una cena con su lindo y maravilloso novio era la cosa más hermosa y sencilla para hacerlo feliz. Esa noche fue una sin duda muy especial, platicaron durante horas y el ambiente fue de lo más romántico, cualquiera quisiera tener una relación como las de éstos dos... Simple y perfecta, donde solo el amor bastaba.

No había porque preocuparse si se tenían el uno al otro.

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Hola, UwU.

Antes que nada quiero agradecer a quien leé y vota, también quiero confesar que el johnten me pone muy soft unu, bueno, el punto es que trataré de seguir escribiendo este fic, también trataré de mejorar mi escritura y perdonen si hay faltas de ortografía a veces simplemente me da paja corregir lo que sé que está mal, sí, soy una persona demasiado floja por si se lo preguntan jshs. Es todo, lxs amo~ଘ(੭ु*ˊ꒳​ˋ)੭ु*.° 💗

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𝐎𝐇 𝐃𝐀𝐃𝐃𝐘 ♡ ᵎ 𝐉𝐎𝐇𝐍𝐓𝐄𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora