Opté por colocarme un pantalón corte alto color blanco, mis converse blancas y una franelilla ceñida al torso de color negro. Dejé mi cabello liso, apliqué un poco de compacto en mi cara, rubor, mascara para pestañas y hice un delineado de gato.
Salí del cuarto y fui al cuarto de mi madre - Mamá - la llamé desde la puerta.
- Pasé - escuché - abrí la puerta y me adentré al cuarto.
- Mami, ya me voy - avisé acercándome a la cama.
- Ok mi niña - me agache para que me diera un beso en la frente.
- No llegues tarde - Pidió.
Asentí - le di un beso en la frente.
Salí del cuarto y escuché a mi madre gritar - ¡Te cuidas!
Negué con la cabeza. Mi teléfono sonó y era un mensaje de Manuel.
Manuel♥: Ya estoy afuera amor.
Sonreí.
Bajé las escaleras, tomé las llaves que estaban en el llavero y salí de la casa. Miré a Manuel, él iba de pantalón negro, chemise blanca y sus gomas negras.
- Estamos casi iguales - reí.
- ¿Me estabas espiando mientras me vestía? - alzó las cejas.
- Claro que no tonto - me acerqué y me dio un beso en mis labios.
- Estas hermosa - dijo entre el beso.
Sonreí - Tu igual amor - Le di otro beso y me separé de él.
Abrió la puerta del auto y me adentré en el. Él dio la vuelta y se monto en su asiento.
Encendí la radio y estaban pasando tutu de Camilo
- Ay yo no se de poesías, ni de filosofía, sólo sé que tú vida yo la quiero en la mía - Canté
- Yo no sé, como hacer pa' no tenerte las ganas que te tengo, como hacer pa' no querete - cantó.
- Tutu, nadie como tutu, no hay un sustitutu pa' ese cuerpo tuyo que a mí ya me tiene cucú. En un rato te buscu y voy y te acurrucu yehh, no hay nadie como tutu - cantamos al unísono.
- Te quiero Dove - tomó mi mano y la besó.
- Yo también te quiero. - Sonreí.
Después de quince minutos más llegamos a la casa de Jack.
Habían varios carros ya estacionados y se escuchaba la musica desde afuera.
Bajamos del carro y miré a Manuel - Ya le envíe un mensaje a Alejandra preguntándole que si ya esta aquí, y me respondió que están en el área de la piscina. - comenté.
- Ok - entrelazo nuestros dedos y caminamos.
La casa es de dos pisos y muy linda, habían personas hablando y otras simplemente haciendo cosas que deberían hacer en un cuarto.
Entramos a la casa y habían muchas mas personas bailando, la música se escuchaba aún más fuerte, las luces estaban apagadas y lo único que iluminaba eran las luces de colores. Pasamos el mar de gente y nos dirigimos al área de la piscina.
- Hay demasiada gente - dijo Manuel en mi oído.
- Sí lo se - Grité para que me lograra escuchar.
ESTÁS LEYENDO
Mi sugar NO daddy
Teen FictionDove, una chica extremadamente divertida, extrovertida y carismática de 16 años. Le encanta leer y ayudar a las personas que más la necesitan. Ama a sus mejores amigas y amigo con locura y su mamá es latina y su papá es Americano. Por otro lado Aaró...