The Director's son -Mateo Palacios y Karen Watson- FanFiction

-Capítulo 2-

Suena el timbre y toca volver a clase. Entre tanta gente me disperso de Gastón y Lucas. Y cuando me quiero dar cuenta, estoy perdida. Camino por los pasillos ya sin gente porque todos están en clases. ¿Dónde estaba? Cruzó la esquina y me encuentro a Mateo escondido. Por lo visto, no quiere entrar a clase

Mateo: ¿tu también estás haciendo pellas? -se rie- Cada vez me gustas más

Karen: no, me he perdido

Mateo: ya me extrañaba, tienes cara de santa

Karen: vale, gracias Mateo. ¿Me indicas dónde está la clase?

Mateo: ¿qué me das a cambio? -se pone de pie-

Karen: tengo 10 libras pero por favor, dime dónde es

Mateo: yo no quiero dinero bonita -se ríe- mi padre es el director del Instituto y cobra bastante. Yo quiero un beso -Me agarra de la cintura y se acerca a mi. Su mirada se clava en la mía, no puedo respirar- ¿me lo das? -Pero ¿que se cree?, ¿que soy una cualquiera? No, lo siento-

Karen: sueltame -lo empujó- ya me busco yo la vida para encontrar la clase

Mateo: qué seca eres -se ríe- la clase es en el piso de arriba, la tercera puerta de la derecha

Karen: muchas gracias -subo las escaleras-

Mateo: tss, tss Watson. Tu no me has visto ¿vale?

Karen: lo que tu digas

Entro a la clase y me llevo una bronca por el profesor de latín. Amenaza con que la próxima vez llamará a mis padres. No creo que a ellos le importe mucho, están muy ocupados en su trabajo como para preocuparse por mis estudios. No vuelvo a ver a Mateo hasta la salida. Salgo con Lucas y Gastón. Mateo me mira y se muerde el labio. Lo miro con asco y sigo caminando.

Lucas: me parece que al hijo del director le gustas

Karen: es algo que me da completamente igual, es un niñato inmaduro -Subimos al bus y veo desde la ventana que Mateo entra en un coche negro, supongo que del padre-

El autobús me deja una calle más abajo de mi casa y tengo que caminar. Odio caminar por estás calles. Por suerte no está tan lejos. Veo un coche negro aparcado en la casa de al lado, se parece al coche de Ma... Alguien baja del coche. Es él. Es mi vecino...

Mateo: Watson, por lo visto nos vamos a tener cerca -se rie-

Karen: por desgracia, Palacios -digo cortante-

Entro en casa y cierro la puerta de un portazo evitando alargar una conversación. En mi casa no hay nadie, o eso parece. Estarán en sus oficinas arreglando papeles o reunidos con cualquier persona. Me preparo un bocadillo y me acuesto en mi cama. No sé por qué razon no puedo sacar a Mateo de la cabeza. Tocan a la puerta de mi habitación

Papá: hija, ¿qué tal tu primer día de clase? -dice haciéndose el interesado-

Karen: bien papá -le sonrió-

Papá: me alegro. Tienes visita -sonríe-

Karen: ¿quién es?

Papá: un chico muy simpático. No lo conozco pero dice que es compañero tuyo -Oh Dios, oh dios... ¿Mateo de nuevo? ¿Qué hace aquí?-