-Capítulo 31-

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Pedro: ¡señorita Watson! -Grita- no voy a permitir que habla de esa forma de un compañero

Karen: pero si ha empezado el... -Me interrumpe-

Pedro: ¿se quiere quedar en ese sitio? -Asiento- pues tendrá que hacer una tarde de convivencia con Mateo. Y como se niegue será expulsada del centro

Ocupo mi sitio con la cabeza baja... Y así me mantengo las dos siguientes horas, callada y sin hacer nada. Toca el recreo y salgo en busca de Lucas

Lucas: ¡italiana! -Me grita desde la puerta de su clase- ¿cómo estás?

Karen: muy bien, Italia es increible. -Digo sonriendo. Mateo pasa al lado de nosotros y Lucas impide que me mire poniéndose delante-

Gastón: tenemos que ponerte al día, ven. -Dice yendo hacia las gradas. Mateo estaba sentado al fondo (como de costumbre) y María sola, sentada en la parte de abajo de las gradas. Se le veía triste pero ni me importó, incluso pensé en tirarle una piedra y esconder la mano-

Lucas: el ex novio de ella, peleó con Mateo

Karen: ya, me lo conto Manu

Lucas: pero eso no es todo. -Me interrumpe- quien era su novio era el capitán del equipo de fútbol, ella formaba parte de un grupo de chicas que salían con ellos y la han reemplazado, lleva días en los que solo nosotros nos ponemos con ella. Pero como has vuelto no se quiere acercar

La miro amenazadora, ella se buscó estar sola. Mateo camina hacia ella y le dirige una mirada de asco, ella baja la cara y se tapa con una mano los ojos. Mateo sigue caminando hacia mí, miro hacía los chicos quien ignoran que se está acercando

Mateo: nos vemos esta tarde... -Susurra en mí oído. Sigue caminando sin dejar de mirarme, mi pulso empieza a temblar y los chicos se dan cuenta de ello-

Volvemos a clase, atendía pero de vez en cuando la cabeza se me iba a Mateo, una tarde a solas con el... Una amenaza... Tenía que mantenerme firme, yo amo a Julen y él me ama a mí, no debo cometer el error más grande de mi vida dejándome llevar por Mateo. Toca el timbre para volver a casa, Julen me espera a la salida y más bien corro para no tener que encontrarme con Mateo. Entro al coche

Julen: ¿que tal amor? -Dice cuando entro, sonríe demasiado, más que de costumbre-

Karen: bien... si no fuera porque tengo convivencia con Mateo está tarde

Julen: ¿qué has hecho? -La sonrisa desaparece-

Karen: no he sido yo, él me ha dejado en ridículo y como el niño es hijo del director lo que él dice va a misa

Suspira y mantiene silencio. Recibe una llamada justo cuando llegamos a la puerta de mi casa. Vuelve a sonreir

Julen: ya voy para allá. -Dice nada más descolgar- iba a dejar a Karen en su casa -.....- no, no tardaré. Despreocupa... Gracias. -Cuelga. Me deja extrañada la emoción con la que hablaba por telefono-

Karen: ¿quién era? -Digo poniendo cara de extraño-

Julen: alguien... -Se ríe y da un beso suave en mis labios- me tengo que ir, después te vengo a buscar para llevarte a esa convivencia

Karen: ok... -Salgo cabizbaja de el coche, odio que me oculten algo. Cuando voy llegando a la puerta de mi casa escucho el claxon y me giro-

Julen: te quiero... -Dice asomado en la ventana. Le sonrió y entro en casa-

Mis padres han salido, mamá tenía médico y papá la acompañó. Hago la tarea y me tumbó boca arriba en la cama. Julen me ocultaba algo y no sabía que era. Esa llamada...

Por otro lado me atormentaba la idea de tener que compartir una tarde entera con Mateo... A solas... No quería pero no tenía solución. Esperé hasta las 5... Mateo ya había salido al instituto pero Julen no había llegado. Me preparé y salí caminando. Me habia dejado plantada. Camino hasta la calle donde el vive y lo encuentro en su coche, para de un frenazo

Julen: ¿a dónde vas? -Dice asomando la cabeza por la ventana- te iba a ir a buscar

Karen: hace media hora que debería de haber estado allí. -Entro en el coche- ¿dónde estabas?

Julen:... Haciendo cosas, amor. -Dice sin mirarme a los ojos. Niego con la cabeza y miro por la ventana durante todo el trayecto. Estaba muy extraño. Llegamos al instituto y me despido con él con un beso- después estaré aquí. Te prometo que no te volveré a fallar

Asiento y salgo del coche. En el instituto solo estaban las limpiadoras, el director en su despacho... Y en el aula Mateo, mirando por la ventana como desaparece Julen

Mateo: fuerte estúpido. -Se empieza a reír- se cree que lo quieres y todo

Lo ignoro y me siento sobre una mesa con mi móvil. Tenia un mensaje de Manu así que empecé una conversación con él hasta que Mateo se levanta de su sitio. Me quita el móvil

Mateo: ohhh... Que bonito el fondo de pantalla. -Una foto de Julen y mia- ¿qué pasa si la borro?

Karen: Mateo, dame el móvil. -Exijo poniéndome de pie- que me lo des

Mateo: ¿y si no quiero? -Se mofa de mí, miré a sus ojos, miraba desafiante y me hacía temblar. NO MIRES DIRECTAMENTE A SUS OJOS- bueno, si me das lo que me debes... Te devuelvo el móvil

Karen: ¿me estas chantajeando? -Asintió sonriente- oh no... No te voy a dar nada por algo que es mío. -Intento cogerlo pero quita la mano-

Mateo: ¿lo quieres?, cogelo. -Dice metiendoselo dentro de los boxers. La idea de cogerlo hizo que me mordiera el labio y cuando subí la mirada él se reia-

Karen: quedatelo, ya no lo quiero. -Me doy la vuelta y vuelco a ocupar la mesa. Joder... estaba jugando demasiado sucio. Por un momento pareció que habia parado. Pero no era así-

Mateo: me deseas... -Dice levantándose-

Karen: lejos. -Dije por lo bajo. Miraba mis uñas y cuando levanté la cabeza, Mateo estaba ahí, mirándome de cerca con mi móvil en su mano. No podía reaccionar, apoyó sus manos a ambos lados de mis muslos y soltó un susurro ahogado en mi oído-

Mateo: estamos solos... Y no voy a esperar mucho más a que me lo pagues...


The Director's son -Mateo Palacios y Karen Watson- FanFictionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora