Cuatro

12.5K 2.3K 419
                                    

— Aún no entiendo este capricho, pero está bien, es un lugar nuevo por conocer. — Jimin terminó de ingresar el rumbo en el gps y emprendió la marcha.

Jungkook aún jugaba con la carta en su mano — ¿Nunca sentiste que tu vida no tiene sentido alguno? ¿Que sólo vives porque se supone que debes hacerlo, pero no sabes en realidad hacia dónde vas?

— Tus respuestas sean respondidas, hermanito, vamos rumbo a Daegu.

— Jimin, hablo en serio.

— Lo he sentido, sí. Pero es algo que va y viene, siempre encuentro algo nuevo que hacer y en qué enfocarme. Chale, ¿este viaje será de reflexión? Porque todavía tengo series que ver en Netflix.

— No será un viaje de reflexión. — golpeó su brazo — Tengo un propósito y voy hacía él.

— Genial, ¿cuál es?

— No lo sé — Jimin lo miró consternado — Aún — agregó, tratando de tranquilizarlo.

— ¿Eso debería bastarme? ¿O sea que vamos a una ciudad que no conocemos por algo que no sabemos?

— Sé por qué voy, no sé a qué — aclaro.

— A ver, ¿por qué vamos?

— Tengo que encontrar a Kim Taehyung — alzó la carta. — pero no sé qué debo hacer cuando lo encuentre.

— ¿El de las cartas? — asintió — creí que habíamos quedado en que era un bromista.

— Cuando lo encontremos, lo sabremos.

— Pero, ¿cómo vas a saber que es él?

— Preguntando, dah.

— Ajá, y a ver, ¿sabes de que distrito es? ¿O vas a ir preguntando de lugar en lugar? Es una locura, aún no hemos hecho mucho viaje, podemos volver~ —canturreó.

— ¿Por qué crees que traigo esta carta? — Jimin lo observó dudoso — La carta llegó a nuestras manos porque la dirección que nuestra familia tenía en Daegu fue actualizada y las cartas fueron derivadas a la nueva dirección, nuestra empresa.

— Y como tenían tu nombre, la oficina te la dio a ti, ¿qué hay con eso? Es claro que se debe poner la dirección del destinatario o no sabrían dónde mandarla, bobo.

— Bobo tú, así mismo también se debe escribir la información del remitente. — volteó la carta y leyó en voz alta — Daegu, Seogu, Geochan-gun, calle-

— Ya, ya, entendí. — interrumpió. — ¿entonces vamos a ir directo a su casa? Como dos locos.

— Esto me emociona mucho — sonrió ampliamente.

— Bueno, tú sí que estás loco.

Who Are You? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora