El Libro Dorado.

"El reencuentro"

El viento despeinaba mi cabello recogido, el clima era hermoso, cálido pero parecía que una tormenta estaba por azotar, una leve canción sonaba de fondo en el Mercedes, lo mire y el tenía una expresión sería y los ojos fijos en el camino, no sé cuánto tiempo me mantuve mirándolo, llegamos a la playa y el apagó el auto, me miró y sonrió. No sé desde cuándo le estoy dando tanta confianza, se supone que debo odiarlo, pero tiene algo, que me hace no poder odiarlo, se que no lo conozco bien pero si los chicos quieren que el me cuide y que el esté cerca de mí debe de ser por algo.

Bajamos del Mercedes y me quite los tacones, los dejé en el Mercedes y comenzamos a caminar por la arena fresca, el olor a mar no tardó en inundar mis fosas nasales, y sonreí como una desquiciada.

-¿A qué se debe esa sonrisa? ¿Tanto te gusta salir conmigo?.- dijo en un tono burlón y observandome

Lo mire y lo golpee levemente en el abdomen
-Callate idiota.-
Su risa ronca inundó mis oídos y sonreí. Observe que ya estábamos frente al Lugar "donde los sueños se hacen  realidad" y empuje la puerta con una sonrisa enorme.

"¿cómo que estás sonriendo mucho hoy no crees?"
"-Callate conciencia"
"Pero hombre que humor yo solo decía"

Vaya este lugar sigue sorprendiendome cada vez más, me detuve un poco a observar los detalles y las personas, misteriosamente todo encajaba a la perfección, todo era tan hermoso.

-Hey, ¿Estás bien?.- Lo mire y asentí, el comenzó a caminar hacia el lugar de paredes oscuras y lo seguí, nos sentamos y los que estaban ahí me observaban de pies a cabeza, me observé y ví que traía mi vestido blanco, eso debió confundirlos, decidí irme al lugar de las paredes blancas pero el me detuvo.

-Quedate aquí, no pasará nada con que uses ese vestido, además estás conmigo y en esta área yo mando.- me guiñó un ojo y se dedicó a mirar hacia algún sitio a lo lejos, tomé asiento y me relajé. Observe a todos los del área oscura, y detecté una mirada conocida, era un chico, un chico también misterioso, con un porte rudo y elegante al mismo tiempo, el observaba un vaso con algo rojo, y luego cambio la vista hacia el piso, tenía el cabello negro, los ojos negros y era de piel blanca, se parecía un poco a Santiago, pero no exactamente

-El es Ethan Coen Blair.- sus palabras me sacaron del momento en el que me había perdido viendo a aquel chico y reaccioné, miré a Santiago para ver si me estaba viendo pero no, tenía la vista pérdida en algún lugar, y parecía que su gesto ahora demostraba molestia

-¿Como sabes que ese es su nombre?.- Le dije tratando de averiguar un poco más

-Lo conozco y tú también pero aún no recuerdas nada, hay cosas que es mejor que se queden así justo como están ahora.- Cambio su vista hacia mí

-¿Lo conozco pero no recuerdo?.-
Él asintió y cambio la mirada.

Volví a mirar a aquel chico y en ese instante el también me miró, y juro que sus ojos en ese momento cambiaron a un amarillo muy intenso, arrugó las cejas y se mantuvo observandome bastante tiempo
Comencé a sentir un dolor en la cabeza y miles de imágenes pasaron por mi cabeza

!!!Estaba recordando!!! ¡¡¡Lo estaba haciendo!!!

Cambié la mirada a Santiago y el me estaba viendo, con una mirada de intriga, lo miro a el y él nos estaba viendo

-Quedate aquí, iré con él.- ordenó, se paró y me miró de nuevo
-¿Recordaste algo no es así?.- Asentí levemente y el me abrazó, luego me tomó de la mano y me jalo, me pare y lo ví, Santiago me miraba molesto y a la vez feliz

-Mejor vamos te llevaré con los chicos.- Me pare y comencé a seguirlo, hasta llegar con los chicos.
¿¿¿¿Porque rayos no los había visto????

-Heeeeey, ya había pensado en ir a buscarte porque este idiota no pensaba traerte.- Dijo Colton casi gritando

Los otros cuatro sonreían y me miraban y comenzaron a abrazarme y a reírse

-Te extrañe cabeza de zanahoria.- Dijo Alan y me despeinó en un gesto de cariño, a lo que yo sonreí, pero Santiago detuvo toda alegría en todos al anunciar lo siguiente

-Ella recordó.- Todos lo vieron a el y pusieron el rostro tan frío que dió miedo