Podría Ser Mi Hija[Harry & Tu][Hot][Adaptada](EDITANDO)

[Capitulo 28][Podría Ser Mi Hija][Harry & Tu]

Al llegar a la disco Liam dejo estacionado su auto cerca de la puerta, según el ese era su lugar de siempre.

-_______ te daré unas indicaciones antes de entrar. Primero no aceptes tragos de nadie que no sea yo o el barman rubio que está en la primera barra. Segundo no te metas en problemas y tercero, piensa que mañana termina el mundo así que A DISFRUTAR.

A la entrada sentí la mirada de muchos hombres, pero en realidad no preste mucha atención. Nos acercamos a la barra para pedir algo suave, no quería emborracharme al instante porque si no, no recordaría nada. Un chico rubio que intuí que era del que Liam me había mencionado estaba jugando con dos botellas de licor.

- Jean, dame un vodka y un whisky.- el dejo su botella a un lado y saco otras en conjunto con dos pequeños vasos.

-¿Cuál para quién?- pude escuchar su voz a pesar del alto volumen de la música.

-Vodka para mí y el otro para ella.- dijo Liam mientras corría una silla de patas largas.

-Toma engendro del mal.- le dio su trago.- y tome bella chica de la cual me encantaría saber su nombre.- me dijo sonriente.

-_______, y, gracias por el trago.-

-Si quieres mas tan solo dime, que hoy todo va por cuenta de la casa.- me susurro en mi oído asiendo que sintiera algo raro por todo el cuerpo.

-Lo tomare en cuenta.- dijo Liam.

- ¿Cómo mierda escuchaste?- pregunto curioso jean.

-No preguntes, solo síguele prometiendo cosas que no cumplirá.- le dijo mientras jugaba con su pequeño vaso vacío.

-Pues si no lo cumple se merecerá un castigo.- dijo de forma sensual.

- ¿Qué tipo de castigo?.- le pregunte tomando la punta de su corbata suelta.

-El ambiente se puso caliente.- saco una botella llena de ron y se paró.- lo siento vieja, pero no quiero escuchar ni ver porno, no por hoy. Jean. Cuídala con tu vida.-amenazo con el dedo índice.

-Vete pelón.- le hizo un gesto con la mano incitándolo a dejarnos solos al que el obedeció.

-Y dime. ¿Qué tipo de castigo?- le volví a consultar.

-El que quieras, pero una cama tiene que estar en el trato.- dejo un suave beso en la comisura de los labios.

- La noche es joven, por mientras tomare todo lo que me des.- pase mi dedo índice por todo su torso.

- ¿Suave o fuerte?- me pregunto separándose de mi.

-Suave para estar lucida más tiempo.- tome ubicación en el mismo lugar de Liam.

- Buena elección, así recordaras esta noche

*** *** ***

Sentía que ya no me podían las piernas, no tenía conocimiento de la hora pero debiese ser pasadas las dos de la madrugada. Liam como siempre no cumplió su promesa y luego de que se fuera con botella en mano no lo eh vuelto a ver. Hable un rato con jean, es un tipo realmente simpático que hasta con sus comentarios en doble sentido me hacía sacar una carcajada.

Estaba metida entre toda la multitud bailando al son de una canción electrónica, a mi lado tenia a dos chicos de ensueño, altos, con un cuerpo adecuado para su edad, no tenían más de veinticinco. Al parecer eran gemelos porque a la misma vez se acercaron hacia mí con la intención de bailar más pegados. En cualquier otra circunstancia les hubiera dado un golpe, pero ahora con los efectos del alcohol solo lo disfrutaba.

Al sentir que el chico que estaba atrás mío comenzó a propasarse me di vuelta para quedar cara a cara y notar, gracias que una de las luces daba a su rostro, la estúpida sonrisa de ironía que tanto detestaba en un hombre. Cuando estaba a poco de darle una fuerte bofetada en su mejilla una vos nos interrumpió.

-Calvin déjala en paz que esta chica es capaz de cortarte las bolas y daléeselas de alimento a un perro vagabundo.

-Gracias por el aviso Jacob.- y sin decir más se fue escabulléndose entre las personas.

- ¿Gracias?- pregunte confundida.

-De nada, al fin y al cabo eres mi mami de turno.- me dijo en el oído ya que la música estaba demasiado fuerte.

-No soy tu mami de turno.- le respondí de la misma forma.

-Entonces eres mi amiga, aunque no lo creas me caes bien.- seguíamos de la misma forma.

-Tu igual, gracias a dios no eres igual de engreído que tu padre, incluso... eres más guapo.- puse mis brazos alrededor de su cuello.

-Gracias, pero al creo que tenemos los mismos gustos porque eres... eres... la sensualidad en persona.

-y ¿le cumplirías una fantasía a la sensualidad en persona.- le susurre en su oído.

-Encantado.

-Bésame.- le mordí el lóbulo de su oreja, y, tomándome la cara planto un beso que yo recibí con gusto.