Podría Ser Mi Hija[Harry & Tu][Hot][Adaptada](EDITANDO)

[Capitulo 29/parte 2] [Podría ser Mi Hija][Harry & Tu]

- Sabía que esto pasaría.- dijo a la vez que entraba al auto azotando la puerta.

-Por favor no me grites.- respondí en un murmuro.

-Hoy no, pero mañana sí. Iremos a mi casa porque no quiero que Joyce te vea así.-sentí como intentaba colocarme el cinturón de seguridad pero gracias a mi posición no podía y se rindió fácilmente.

Comenzó a manejar y al tener un ojo abierto podía ver como su seño estaba fruncido. Tenía claro que mañana me gritaría hasta que quedara con dolor de garganta, o más bien hoy porque tendrían que ser cerca de las dos de la madrugada.

- ¿Qué hacías en mi casa?- pregunte de repente.

-Cosas que a ti no te tienen porque importar.- espeto.

-Mi mamá me contara igual.- respondí burlonamente.

-No, le dije que no te contara nada.- dijo con la vista al frente.

-Tengo un encanto sobre ella.- dije engreídamente.

-Eres su hija, claro que lo tienes, le mueves las pestañas y te regala el mundo.- me miro brevemente.

-Lo sé, ¿a ti que te tengo que mover para que me regales el mundo?- pregunte incorporándome en el asiento del copiloto.

-No se.- dijo secamente.

-Estaciónate.- lo obligue.

-Son las dos de la mañana no puedo estacionarme así por así.- respondió rápidamente.

-Hazlo.- alargue la palabra.

- ¿Para qué?- dijo con un rasgo de molestia.

-Ya verás.- mencione alegremente.

-Listo, ¿feliz?- elevo sus brazos.

-Si.- dicho eso le desabroche su cinturón de seguridad y me puse a horcajadas sobre él.

- ¿Qué haces?-

-Probar que tengo que hacer para que me regales el mundo.

-Salte de encima.- dijo en un susurro que capte perfectamente.

-No, comencemos. ¿Tengo que mover mis dedos?- los lleve a la parte baja de su cuello y comencé a jugar con su cabello. Vi que cerraba los ojos.- ¿tengo que mover mis manos?-ahora las lleve a todo su torso tocando cada milímetro de él. Seguía con los ojos cerrados.- ¿tengo que mover mis labios?- lleve mi boca a su cuello y comencé a dar pequeños besos.-¿o mi lengua?- inicie a pasarla por todos los lugares que podía.- ¿o mis piernas?- comencé a mover mayoritariamente mis muslos haciendo que mi feminidad hiciera rose con su pene. Hecho la cabeza para atrás y mordiéndose el labio inferior para aguar los gemidos que eran evidentes.-¿o todo junto?- le murmure en su oído y reitere todo lo anterior a la vez y con más intensidad. Sentí como sus manos estaban sobre mi culo y lo comenzó a tocar. Ya no era solo él el que gemía, también era yo. Pero de un instante a otro cinto que me eleva y me deja en el asiento del copiloto nuevamente.

-Escucha fuerte y claro. Nunca en mi puta vida lo hice ni lo volveré a hacer, pero llegando a mi casa te follare tan fuerte que te dolerá la entrepierna por dos años, y por un instante me olvidare que estas borracha y que luego no recordaras nada. ¿Entendido?- yo solo asentí