~ Divorcio ~ YUWIN [MPreg]

Familia Nakamoto

Era un Sábado soleado en el que toda la familia Nakamoto estaba reunida en la sala de estar viendo televisión, comiendo dulces y charlando acerca de cualquier tema trivial.
Los padres se encontraban en el sofá más grande abrasados mirando a sus hijos, los cuales estaban muy concentrados en la película que se estrenaba en ese mismo momento.

Yuqí la mayor,contaba con 10 años de edad, una niña hermosa, carismática, que siempre tenía una contagiosa sonrisa adornando su delicado rostro.

Renjun de 8 años, el cual es muy inteligente y siempre busca la forma de ayudar a los demás sean o no sus amigos.

Y el más pequeño de la familia, Chenle, un talentoso niño de 5 que a su corta edad ya demostraba gran interés por el arte del canto.

Los tres jóvenes tienen a dos padres realmente cariñosos, los cuales siempre les dieron todo lo que pedían, sin llegar a malcriarlos.

Su madre SiCheng o Winwin como solían llamarlo sus amigos y esposo. Un chico de 27 años, que quedó en espera de su princesa a la edad de 17 años, ahora, un adulto a pesar de que su juvenil, delicada y tierna apariencia acompañada de su cálida personalidad lo hacían ver mucho más joven. Se encarga de la limpieza de la casa y el cuidado de su familia.

Y su papá Yuta. El hombre de 35 años es el ejemplo a seguir de sus hijos, también es la razón de la buena posición económica con la que contaban, ya que constantemente trabaja en la famosa empresa que heredó al graduarse de la facultad de leyes en Japón. Pocas veces tenía tiempo para convivir con su familia, pero a pesar de todo su trabajo, lograba darse un tiempo para mimar a sus pequeños y a su bello esposo.

Justo en la parte más emocionante de la película, el celular de Yuta empezó a sonar interrumpiendo el momento, a lo que el padre silenciosamente sacó el aparato, miró la pantalla, se levantó y salió de la sala para poder contestar.

A SiCheng esa situación de resultó demasiado extraña, ya que cada vez que compartian momentos en familia, se tenía prohibido el uso del teléfono, una regla que ambos habían establecido hace ya un tiempo y ahora el mayor rompía.

Desde semanas anteriores SiCheng había comenzado a notar ciertas actitudes inquietantes en el Japonés, a pesar de eso no dijo nada por miedo a que su marido se molestara. El joven no quería poner en peligro la familia que con tanto trabajo y amor logró construir solo por un malentendido.

Por esa razón se preocupaba tanto en ser un buen esposo. Pero no tenía de que preocuparse si el le dio tres razones por la cual sonreír día a día, además el de nacionalidad china ocultaba un pequeño secreto que solo su única hija sabía pero aún no encontraba el momento ideal para poder decírselo a toda la familia.

Cuando el padre regresó a su lugar en el sofá, se podía notar una pequeña sonrisa en sus labios, eso hizo que SiCheng pensara muchas posibilidades de quien pudo haber interrumpido el momento y además causar tanta alegría en su esposo.

No le dio mucha importancia y continuó prestando atención a la pantalla, luego tendría oportunidad de hablar con Yuta puesto que esa misma noche tenía planeado darle la gran noticia.