presa: persiguiendo cazando

capitulo 31: borrando el error

Capítulo 31: Borrando el error

Cuatro ninjas estaban parados en una colina. Abajo había una pequeña ciudad, que era familiar para dos de ellos.

Mitsuki suspiró. "Ahí está", dijo, sin sonar feliz en absoluto. "No ha cambiado mucho desde la última vez que fui", dijo Ryudo. "Sí, bueno, la gente ya no quiere verme más, así que será peligroso. Además, tenemos que lidiar con una gran cantidad de animales que solían ser humanos". Algunos escalofríos recorrieron la columna vertebral de la niña al pensar en eso.

"Primero tenemos que localizarlos", dijo Shino cuando aparecieron algunos insectos que aparentemente volaron para buscar. Mitsuki se alejó de Shino cuando parecía que iba a gritar. Ryudo se rió entre dientes y Kiba miró a su amigo con confusión. "No es gracioso", dijo Mitsuki. "Lo siento, es mi culpa, ¿no es así?", Sonrió Ryudo mientras se rascaba la parte posterior de la cabeza, "que tienes miedo de los insectos". Mitsuki murmuró un "sí" apartándose de él con una expresión gruñona cubriendo su rostro. "¿Cómo es eso?" Kiba quería saberlo.

"Jeje, coloqué un escarabajo muy grande que encontré en su cabeza cuando tenía cinco años", Ryudo todavía sonrió. Kiba comenzó a reírse mientras que Mitsuki lo encontró un poco divertido.

Rakuna, hora del viejo truco para darle una lección.

Oh! Con placer.

Sin que Kiba o Ryudo se dieran cuenta, Mitsuki agitó algunas señales con las manos que había aprendido de su madre hace mucho tiempo y luego colocó un dedo en la frente del lobo. Se transformó en otro animal, uno que Ryudo encontró en lo más mínimo divertido.

"No quiero estropear toda la diversión de ustedes dos pero ... bueno, solo miren sus pies". La niña señaló con una sonrisa al suelo y los dos niños miraron.

"Oh, una serpiente ... ¡UNA SERPIENTE!" Kiba gritó, pero no estaba tan asustado como Ryudo quien había trepado a un árbol tan pronto como vio al animal. Mitsuki se echó a reír mientras miraba a su amiga. Entonces la serpiente se volvió hacia Rakuna y Ryudo pareció perplejo. "¡OW! ¡No es ese maldito truco otra vez!" se enfurruñó mientras saltaba del árbol. "Está bien, ¿qué está pasando?" Preguntó Kiba desconcertado. "Bueno, cuando colocó ese escarabajo en mi cabeza, se lo conté a mamá y ella me enseñó este truco para recuperarlo, aunque le prometí que no lo usaría con tanta frecuencia". "Pero involucra señales con las manos, así que pasó un tiempo antes de que ella me engañara esa vez", murmuró Ryudo. "¿Señales con las manos? ¿Es un ninjutsu?" Kiba preguntó perplejo. Mitsuki se encogió de hombros, "sí, creo que sí". "¿Tu madre era una ninja?" Kiba ahora quería saber. Sin embargo, la respuesta nunca llegó.

"Si ya terminaste con las bromas, vámonos, mis insectos encontraron algunos animales que de hecho son humanos", Shino interrumpió a los tres que saltaron al aire por la sorpresa.

"H-hai ... vámonos", dijo Mitsuki algo incómodo, "guía el camino Shino". El usuario del insecto asintió mientras guiaba a los demás hacia los animales. Bueno, eso fue hasta que escucharon algo en los arbustos y Ryudo entró en acción. Sorprendidos, los demás miraron a la chica que fue empujada al suelo mientras Ryudo sostenía su brazo sobre su espalda y lo empujaba hacia arriba. "Ow ow ow, eso duele", sollozó la niña. "Ryudo, deja que se levante", ordenó Mitsuki. Ryudo dejó que la chica se pusiera de pie pero sostuvo un kunai detrás de ella y siguió sosteniendo sus manos.