Orígenes. Parte 1

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Se que puse esto en el prólogo de la historia, pero aún así quería esta asegurado:
Advertencia: Este Fanfic, aunque esté relacionado a la serie de "Miraculous Ladybug" decidi cambiar algunas cosas para que se adapten mejor.
Espero lo disfruten

Todo el multiverso esta habitado por criaturas llamadas Kwamis, pequeñas criaturas que poseen habilidades y permiten a los usuarios que los posean. Estas criaturas solian ser creadas en el Universo Quantico por los dioses Kwa y Mi, de ahí el nombre.
Pero con el tiempo, Mi comenzó a sentirse inconforme con sólo pasárselo creando Kwamis junto a su hermano para luego enviarlo a alguna parte del multiverso a cumplir un trabajo.

Un día Mi le Sugirió a Kwa que comenzarán a utilizar los Kwamis que crearon para "conseguir más territorio" y lograr ser adorados por los habitantes de los distintos universos. Su hermano que no era tonto sabía a lo que refería, Mi comenzaba a volverse codicioso y quería más de todo lo que tenía, Kwa se negó rotundamente a usar sus creaciones para conquistar otros universos o hacer mal a otros, sus "semidioses" como ellos los llamaban, habian sido creados para ayudar en el lugar al que vayan.

Mi en un ataque de codicia huyó de ese universo, pero no son antes llevarse Cuatro de los Kwamis más fuertes, que estos retenian junto a ellos y que sólo utilizarían en un caso de extrema emergencia. Desde ese momento Mi se volvió el Dios del mal y la oscuridad. Luego de buscarlo por varios universos Kwa logró dar con el, en un lugar llamado tierra. Pero este ya no podía hacer nada, las fuerzas oscuras le habían dado un poder incalculable a Mi. Kwa ya no tenía opcion, sabía exactamente lo que tenía que hacer en una situacion como esa, la única opción que le quedaba era usar los Kwamis que aún le quedaban para evitar que el mal que Mi había desatado salga de la tierra.

Miles de años pasaron, los kwamis tuvieron muchas batallas y muchos portadores, la misión de los kwamis de Kwa era fácil, evitar que los Kwamis de Mi conquisten la tierra y seguido el universo.

~2020~

Era una mañana normal de Lunes en la ciudad de Silver Crystal, los pájaros cantaban, la gente se reunía a hacer uno que otro picnic al aire libre y reinaba la paz, sólo uno que otro malechor que dé vez en cuando se hacía de las suyas robando algún local. Pero la Policía era bastante eficaz y podía atraparlos siempre.

A esas horas de la mañana recién estaba despertando Nikko, un joven chico de 17 años. No había nada en especial en el tenía el cabello negro y rizado, si piel morena y sus ojos de color miel, era un poco gordito también, nada lo hacía destacar. Aunque el tenía un positivismo como nadie, eso lo ayudaba a enfrentar cada día de mala suerte que tenía este, y casi todos los días tenía mala suerte.

Después de apagar el despertador que sonaba en su mesita de luz este se sentó al borde de la cama y después de dar un largo suspiro saco una sonrisa.

《Vamos, este día podría ser menos desafortunado que ayer, o ante ayer, o el día anterior...》 pensó este dándose animos.

Se levantó de la cama y camino hacia el armario para buscar algo que se vea bien, era el primer día, aunque conocía a la mayoría de sus compañeros era el primer día de un nuevo año y quería dar una buena impresión. Después de rebuscar entre toda la ropa se decidió por unos pantalones color negro de mezclilla, una camiseta color gris y una sudadera morada, además de la gargantilla color negro que siempre usaba.

Después de verificar que aún quedaba tiempo en el reloj de su mesa de luz abrió las cortinas de la ventana de su habitación que daba a la ventana de una habitación en la casa de al lado.

-¡Lara! ¿ya estas lista?- gritó esperando alguna respuesta proveniente de la ventana frente a el.

Al abrirse las cortinas pudo apreciarse a una hermosa chica de más o menos la edad de Nikko, de rasgos asiáticos ya que provenía de familia China, de piel pálida y cabello negro como la noche hasta un poco más arriba de los hombros un poco revuelto y dos coletas por debajo que iban hasta sus caderas. Pero lo que realmente hacía destacar era el color de sus ojos, debido a que está sufría de heterocomia, uno de sus ojos era de un color café oscuro mientras que el otro era más celeste claro, casi yendo a blanco.

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