Lujuria Oculta || Emiliaco

Capitulo 13

Llego el lunes y mi primera clase era inglés. Estaba de muy mal humor y creo que mi ropa lo reflejaba. Llevaba una sudadera con capucha holgada, pantalones holgados y unos converse. Este era normalmente mi traje depresivo.

Entré al salón de clases, corrí a mi silla y recosté la cabeza, solo quería componerme un poco. Laura sabía que algo estaba mal y ella en realidad estaba siendo dulce, movió su silla para sentarse junto a mi lado y me tomó de la mano. Todavía era refrescante verla actuar como una persona real y no sólo como un juguete sexual que podía usar cuando quiera.

Pronto sentí como alguien entraba al salón, pero no hice caso y seguí con mi cabeza hacia abajo. Oí como cerraban la puerta y ahí estaba él.

-Buenos días -dijo Emilio. En cuanto escuché su voz apreté la mano de Laura mucho más fuerte, ella respondió frotando círculos en su pulgar. Su voz sonaba terrible, como si tuviera un resfriado. Mi culpa supongo... -Hoy voy a dejar que vean una película ¿Alguien tiene netflix?

La mayoría de la clase alzó las manos.

-Está bien, discutan entre ustedes que película ver, deben tener en cuenta que no se permite la pornografía, cuando la elijan hagan una copia en mi ordenador y por supuesto que sea en Inglés -dijo mientras se sentaba en su escritorio y suspiraba.

Sentía unos ojos sobre mí y no me quedaba duda que eran los de él. Me moví en mi asiento y luego descanse mi cabeza de lado sobre la silla para quedar de frente a Laura. Ella me sonrió y toco mi cabello con mucha delicadeza. Fruncí el ceño y ella se reía con ternura.

De repente salté cuando la película empezó y mi corazón latía de manera irregular, un estudiante había puesto el volumen tan alto que asustó a toda la clase. Giré al frente y lo vi con la barbilla apoyada en sus manos. Me dedicó una pequeña sonrisa pero yo no se la devolví, solo recosté mi cabeza de nuevo. No quería verlo.

...

-Joaquín ¿amor? Bebé despierta.

-Déjame manejar esto Laura, vaya a su próxima clase por favor.

Mierda, tengo que salir con ella, no me quiero quedar con Emilio. Salté de mi asiento y comencé a empacar mis cosas, mintiendo agresivamente mis libros a mi mochila.

-Joaquín detente. -dijo con una suave y quebrada voz.-Joaquín, por favor. ¿Podemos hablar?

Giré y por un segundo vi lagrimas que desaparecieron en unos cuantos párpadeos. Mire fijamente en esos profundos y oscuros ojos y una vez mas me perdí en ellos. Puso sus manos en mis hombros y me empujo suavemente para que me sentara. Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo gracias a su toque.

-Yo... he traído tus cosas. Deje el paraguas en la puerta y tengo tu abrigo en mi mochila.

-Gracias, pero lo que quiero ahora es averiguar que te ha sucedido ¿de acuerdo?

-Te-tengo una clase

Perfecto, mi voz se quebró.

-¡Maldita sea! ¿Podemos hablar en mi salón de clases a la hora del almuerzo entonces? -sus ojos suplicaban-¿Por favor?

Suspiré y asentí. Sonrió un poco y las ganas de devolverle la sonrisa eran casi insoportables, pero me resistía. Así que me levanté y saque el abrigo de mi mochila para doblarlo y dejarlo encima de su escritorio -Lo lavé -le dije y me fui.

...

Fiel a mi palabra me dirigí al salón de clases para encontrarme con él. No quería estar ahí pero verlo así de mal no era algo que dejaría pasar como si nada. Me senté en mi escritorio y Emilio movió una silla para sentarse delante de mí.

-Gracias por venir. Tengo algunos aperitivos por si tienes hambre ya que es el almuerzo -se levantó y de su escritorio cogió unos sandwiches, sin embargo no tenía hambre.

-Estoy bien.

Suspiró -¿Puedo preguntarte algo? -Asentí a su pregunta.-¿Ocurrió algo en tu hogar para que actúes de esa manera?-negué.

-¿Ocurrió algo en la escuela para que actúes de esa manera?

Dudé un poco antes de negar de nuevo.

-Ohm. Así que eso fue un sí. -vi una sonrisa de simpatía en su rostro.

-No quiero hablar de ello.

-¿Puedo preguntarte una cosa más? ¿por favor? -hice una mueca-Por favor... es importante.

Suspiré y asentí.

-¿Sabes por qué el pavo cruzó la calle? -Vi su sonrisa. Negué con la cabeza ¿Él estaba haciendo bromas?-Porque el pollo no estaba disponible.

Bueno, no he visto reír a alguien tan fuerte con sus propias bromas. Y recuerdo haber dicho que su risa era contsgiosa, bueno... aún lo seguía siendo y no podía dejar de reirme de verlo muriendo delante de mí.

-Te hice reír, punto para mí -él sonrió tontamente. Sentí como mi estado de animo mejoró un poco. -¿Puedo decirte otra broma? Solo entre tu y yo -preguntó en un susurro y agarró mi mano.

¡Oh Dios mío! Tomó mi mano, voy a morir

Asentí y se inclinó un poco

-¿Conoces a la maestra de biología? -Joder yo no esperaba eso. Mi estado de ánimo tuvo un cambio de sentido y cayó aún más cuesta abajo. Suspiré y asentí, traté de retirar mi mano pero no me dejó -Me invitó a salir-río como un chico emocionado.

-¿Enserio? -traté de sonreírle pero era difícil

-Sí, ella ha estado coqueteando conmigo todo el día del viernes.

¿Está tratando de joderme más?

-Me sentí mal, pero la forma en que ella estaba tratando de pegar su cuerpo al mío, si te soy honesto, fue demasiado divertido. -¡Espera qué! Levanté la cabeza para mirarlo a los ojos -La dejé cuidadosamente y ella jura que saldremos en algún momento. Va a estar esperando un tiempo largo.

¿Estoy oyendo bien?

-Pero... Niko dijo que usted estaba coqueteando con ella y que estaban saliendo.

Mierda Joaquín ¿por qué eres tan obvio?

-Wow ¿Es Nikolas un acosador? si es así, debo decirte que es muy malo. -se rió entre dientes -Yo no estaba coqueteando, sólo estaba siendo amable y si lo dice por el beso en la mejilla, fue uno de despedida, por educación. Sin embargo ella sigue tratando con todo lo que tiene. Ya sabes, mujeres -rodó los ojos y no puede evitar estallar en una carcajada.

Él estaba soltero, disponible y ella no le gustaba.

-Quería disculparme -le dije. Ahora que sabía que era un mal entendido recordé que el viernes había sido un completo idiota con él.

-¿Por qué? -preguntó

-Por la forma en la que actúe el viernes. Estabas tratando de ser agradable pero yo no estaba de humor para nada y sé que no debí desquitarme contigo. Lo siento...

-Oh cállate, todo está bien pero ¿puedo preguntar por qué estabas así?

-Es personal en realidad...

-Oh, está bien no te preocupes. Me alegro de que te sientas mejor ahora.

-Gracias, Laura ha estado cuidando de mí. -sonreí y estudié su rostro para encontrar cualquier cosa que fuera alusión y creo que finalmente lo conseguí... Él soltó mi mano.

-Eso es bueno -dijo apretando los dientes ¿No era una indicación clara? -De todos modos tenemos una clase de tutoría mañana y me preguntaba si deseas hacerlo en otro lugar, siento que tengas permanecer en la escuela por más tiempo, claro, si así lo deseas.

-Sí -dije con mucho entusiasmo, pero no me importaba. Esto es lo más cercano a una cita -Me encantaría.

Su sonrisa iluminó el salón, mi estado de ánimo llegó al cielo y mi corazón estaba totalmente acelerado

-¿Dónde sugieres que vayamos?

-Bueno, no creo que un lugar público sea prudente pero pode...

-Ven a mi casa.