Gemelos.

capitulo 5

Diciembre 23, 1981.

La época navideña, la mas esperadas por los niños y padres y siendo la época mas desesperante para Severus Snape, el cual se encontraba, actualmente, comprando cosas de ultimo momento. El mundo mágico no difiere mucho en cuanto a celebrar la navidad, hay comida, bebidas, la familia reunida, regalos y alegres ambientes; como también el estrés de las compras y organizar las fiestas y preparar todo.

Severus bufó por el comportamiento absurdo del viejo delante de el; el cual tenia en sus manos unos peluches adornados con lazos como collares y que cambiaban de color según el humor de la persona, el anciano se emociono ante esto, pero solo lo detuvo un momento, enseguida su atención fue captada por otra cosa mas brillante.

Gruñendo, Severus lo siguió con cuatro bolsas arrastras; esta era la tercera vez que entraban en esa tienda de juguetes, Severus no exageraría en decir que ya se habían andado todo el callejón Diagon comprando cosas, que si para la cena o que si los regalos, mas la marea de personas que aumentaban con el paso de las horas solo lo ponían de peor humor.

¿y los niños? Pues, cómodamente vigilados por minerva y la elfina de la familia Prince. Aun no se arriesgaría a salir con ellos, además, seria como tener a tres Dumbledore mirando y tocando todo lo llamativo y alegre, Severus tenia suficiente con uno.

-Severus, mira!-señalo el hombre mayor; era un par de capas a juego de color rojo y dorado, colores de Griffindor, no. eso no.

-prefiero las azules- se negó indirectamente.

-he? Pero el dorado y el rojo son colores de la navidad-argumento Albus con insistencia.

- el verde y el blanco también- ataco, mientras se dirigía a la salía de la tienda; topándose con la elegante figura de una mujer que cargaba a un pequeño niño de cabellos rubios platinados y unos grandes ojos grises.

-oh! Severus?-llamo con duda la mujer.

-Narcissa-correspondió.

-que bueno verte por aquí!-exclamo alegre la mujer- Lucius me a contado de tus circunstancias, pero e optado por no irte a molestar, pues se lo cansado que es cuidad de un bebe- señalo mientras levantaba al pequeño Draco; que estaba envuelto en un suave y cálido abrigo de color blanco, el cual era tan voluminoso que apenas dejaba ver la cara del niño.

-no te preocupes por eso, eres bienvenida a visitarme-tranquilizo Snape mirando de reojo como el joven Malfoy lo miraba mientras babeaba un poco-parece un pastel de crema-pensó en vos alta, consiente de su error solo pudo escuchar la risa de la mujer frente a el.

-jaja! Es lo mismo que le dije a Lucius, pero ya sabes como es con Draco-comento, mientas limpiaba la baba con un pañuelo. En ese momento Albus apareció con varios tipos de capas en cada brazo, de un hilarante color rojo o dorado.

-oh! Narcissa que bueno es verte- saludo el mayor.

-un gusto también verlo sano y alegre profesor Dumbledore- correspondió el saludo.

-oh, mi querida disculpa si te molesto, pero me ayudarías a buscas algunas cosas para los niños?-pregunto en un todo agradable, como el que usaría tu abuelo para convencerte que lo acompañes a alimentar palomas, este hombre, pensó Severus negando con la cabeza.

-por supuesto, yo vengo a lo mismo después de todo-cedió la bruja- Severus, puedes acerté cargo de Draco por un momento?-ahora ella uso ese tono que usan las madres para que vayas a la tienda-y dado que eres su padrino debes tener mas lazos con el pequeño Draco- Severus leyó entre líneas;¨tiene tiempo sin verte, cárgalo y te quitare a Dumbledore de encima¨ Severus se coloco las cuatro bolsas en el ante brazo izquierdo y estiro sus manos para tomar al pequeño pastel de crema que lo seguía mirando sin cesar. Niño me vas a desgastar, pensó con sarcasmo.