Era una mañana nublada, Soren se estaba preparando para ir a la escuela con una gran sonrisa, como era normal en él —que lindo día, aunque las nubes tapen el sol, aún sé que él siempre está brillando— bajo hacia la cocina donde se encontraba su madre y su primo Bob, el cual vivía con ellos, ya que su padre había fallecido hace un par de años.
—Mamá ya me voy, se está haciendo tarde— dijo mientras mostraba una gran sonrisa —creo que saldré con los chicos después de la escuela, no te preocupes, estaremos bien, ya somos jóvenes maduros— Bob comenzó a reír al escuchar que su primo se llamó a él y a sus amigos “jóvenes maduros” —oye que es tan gracioso Boberto, si somos muy maduros— al parecer su comentario no hizo que su primo dejara de reír —a ver Bob no le veo la gracia a mi comentario— exclamó mientras lo tomaba del cuello de su camisa —es que como se pueden considerar maduros jajajajaja ni siquiera lo demuestran, bueno solo Nick que él sí llegó a otro nivel consiguiendo novia— al escuchar ese comentario lo único que pudo hacer fue soltar a Bob —mira talvez nosotros no seamos tan maduros como te gustaría que fuéramos, pero al menos nos protegemos los unos a los otros, es la confianza que nos tenemos que nos vuelve algo más maduros que cualquier adolescente, solo por eso yo nos llame así— la madre de Soren se quedó sorprendida al escuchar la madurez del comentario de su hijo —bueno ahora si me disculpan procederé a retirarse para ir a la escuela, te veo allá bob— al cerrar la puerta principal de su casa, respiro profundo y comenzó a caminar en rumbo a su escuela.
Pasó por la casa de Nick de camino a la escuela, se le hizo una buena idea ir por él para que lo acompañara en su recorrido a la escuela, Soren no era una de esas personas que le gustara estar solo, al tocar la puerta lo recibió la madre de Nick —pasa Soren, Nick aún sigue dormido lo despertaré— ella era una mujer muy amable y muy hermosa, en cierta forma soltera, ya que el padre de Nick solía viajar mucho, ella lo conoció en una noche donde él se quedó en la ciudad y ambos tuvieron un pequeño romance, pero aun así el padre de Nick era un buen hombre tanto que al enterarse de que iba a tener un hijo, comenzó a ayudarla financieramente, aunque no estuviera presente quería que ella y su hijo estuvieran bien, aunque él nunca lo conociera.
Soren se sentó en un sillón de la sala, mientras esperaba mira la hora en su celular, se estaba haciendo tarde —vamos cariño un pie frente al otro, eso es, sabes que si te duermes hasta tarde tienes que dormir abajo— decía la madre de Nick mientras lo ayudaba a bajar las escaleras —lo se mamá, pero no me gusta estar aquí abajo, es muy solitario, al menos arriba sé que estas tú y eso me calma un poco, ho…hola Soren que tal tu mañana— su comentario fue interrumpido por un bostezo largo —bien, tal parece que sigues cansado, ven acércate te llevaré en mi espalda— Nick apenas pudo llegar a donde estaba Soren —bueno señora mamá de Nick tal parece que no podremos quedarnos al desayuno— bromeo Soren cuando se subió a su amigo a su espalda —no te preocupes cariño, luego se presentara la oportunidad de hacerlo, pero ahora váyanse con cuidado— Soren salió y empezó a caminar con su amigo aun dormido en la espalda —los quiero— escucho a la madre de Nick decirlo al momento de pasar unas casas.
—vamos Nick en serio pasa mucho tiempo dormido eso no es para nada saludable— solo pudo escuchar una pequeña risa de su amigo aun dormido —Soren yo trabajo demasiado en el proyecto con el profesor Toribius, es algo normal para mí aunque no lo parezca permanezco mucho tiempo despierto— Soren se quedó callado por un momento —si, pero ¿tu novia está feliz con que te pases la mayor parte del tiempo dormido?, o sea no pueden ni salir al cine— Nick lo golpeó en la cabeza —para tu información ella y yo solemos estar mucho en mi casa y hacemos varias cosas ahí, estamos muy contentos con esa relación— el teléfono de Soren comenzó a vibrar se estaba haciendo tarde —bueno dejaré de molestarte con esto, sujétate que sentirás un poco de turbulencia— sin dudarlo se aferró a su amigo como un koala bebe a su madre, Soren era rápido para alguien de su edad.
Después de correr un par de calles encontraron a Louis caminando por la calle mientras tenía la cara metida en un libro —cuidado Louis— estaba acostumbrado a que Soren pasara corriendo con Nick en la espalda, así que para facilitarle el trabajo a su amigo solo levanto los brazos y se puso blando —en serio Louis tú también, tienen suerte de que pueda con ustedes dos por estar tan delgados—.
—Era eso o que te tropezaras conmigo, ¿verdad Nick?— Nick asintió con la cabeza.
—Louis sabes que no deberías leer mientras caminas, aunque cargarlos es un buen ejercicio para mi espalda— Louis abrió su libro para seguir con su lectura —bueno, si bajan la voz estaría bien, estoy tratando de leer— pero no era normal que Soren corriera con Louis en su espalda —espera un momento, vamos a llegar tarde ¿verdad?— Nick asintió —no sé cuanto tiempo nos queda, pero no creo que sea mucho— Soren aceleró su paso —tranquilos chicos si no llegamos a tiempo asumiré toda la culpa, espero y no sea así ya casi llegamos— el camino se hizo corto después de que dijera eso, de un momento a otro habían llegado a la escuela —chicos ayuda no puedo detenerme— Louis cerró su libro y miró a Nick —¿esto va a doler verdad?— Nick ni siquiera quiso responder, Soren se tropezó y los tres se estamparon contra el piso de la entrada —eso sí que fue un aterrizaje perfecto— dijo Soren mientras levantaba su pulgar estando en el piso —¿están bien?— al levantarse vio si sus amigos se encontraban bien —oye Nick ¿dónde está tu novia, normalmente está aquí esperándote?— preguntó mientras se sacudía la ropa, a los pocos segundos Nya la novia de Nick se abalanzó sobre él —holi Nerón, mi luz tan brillante— Louis se acercó a Soren al ver esa escena —bueno eso responde tu pregunta—.
ESTÁS LEYENDO
The Thunters: Origenes
Açãotodos los heroes tienen un origen y esta es la historia en la que un trio de amigos obtienen su poderes, y no se preocupen por que sea corta esto tan solo es el principio de una gran aventura