The Thunters: Origenes

capitulo 2

—ya lo noté Louis— dijo Soren mientras miraba a su amigo con una mirada sarcástica —creo Que deberíamos ir a clase— dijo Nick mientras su Nya lo abrazaba y lo besaba —chicos creo que se les olvidó, hoy entramos una hora más tarde— dijo Nya, Soren se encogió en hombros mientras sus amigos lo veían de una manera muy amenazante —así que si me disculpan me llevaré a mi pequeño Nerón un rato— y en un abrir y cerrar de ojos los dos tortolos ya se habían desvanecido. 

Soren vio a lo lejos a su querida Karen —Louis ahora vuelvo amigo— Louis se fue a los pocos segundos de que Soren mencionara eso, Soren se había acercado sigilosamente para taparle los ojos a su querida amiga —¿quién soy?— le dijo al oído con una voz muy suave, Karen intentó varias veces adivinar y también quitarse las manos de los ojos, pero no tuvo mucho éxito —te doy una pista ¿quién ha estado en tu misma clase de electricidad por varios años?— al decir eso Karen levantó sus manos e intento hacerle cosquillas en el pecho, en ese momento Soren quitó sus manos de sus ojos, lo abrazo mientras él tenía los brazos arriba —sabía que eras tú Soren, ¿quién más aparte de ti me saluda de esa manera?— no pudo evitar sonrojarse mientras Karen le decía eso, en ese momento sacó un sobre de su bolsillo y se lo dio —¿Qué es esto rayito?— preguntó mientras abría el sobre, ella se quedó sorprendida al ver lo que había en aquel sobre —Soren, conseguiste boletos para el concierto ¿Pero cómo?— dijo con lágrimas en los ojos, no podía creerlo era un concierto al que ellos dos querían ir —quise que fuéramos, ya que me volviste fan de su música, es lo mínimo que puedo hacer para agradecerte— dijo mientras le secaba las lágrimas con su mano —te espero esta noche en el auditorio o bueno en la esquina para que no se te ocurra hacer fila, luego te pierdo y eres tan capaz de entrar sin mí— Karen lo abrazo desde el cuello sin dejar de agradecerle —y eso que pensé que no te gustaría— ella lo golpeó en el pecho —bromeas siempre he querido ir a uno de sus conciertos, llévate la bufanda que te di suele hacer frío en esos lugares— aunque era su amiga parecía más su madre, ya que lo cuidaba ella sabía lo imprudente que podía llegar a ser —si no te preocupes por ello—. 

El día avanzó muy rápido tanto que cada hora parecía que duraba unos pocos segundos, sonó la campana de salida y los tres amigos se fueron a casa hablando de lo que harían está noche —bueno yo terminare mi proyecto y me quedaré en casa con Nya— dijo Nick,  Louis parecía estar perdido en sus pensamientos —Louis y tú que harás esta noche mi buen amigo— dijo Soren lleno de energía como siempre, él se sacudió la cabeza —probaré algo sobre mi investigación de la luna hoy, nada interesante que agregar muchachos, cuídense mucho ustedes y más tu Soren, te encanta meterte en problemas por ayudar a los demás— después de decir eso se fue a casa —bueno yo saldré con Karen y se lo diré, hoy es el gran día, bueno, chicos los veo mañana— al decir eso Soren corrió a casa para poder prepararse para poder llegar temprano a su gran cita. 

Al llegar a casa Soren irradiaba felicidad, estaba muy emocionado por su cita, Bob se percató de esto —¿y por qué esa actitud primo?— dijo con una gran curiosidad —al fin le dijiste a Karen que fuera tu novia?— al decir esto se abalanzó sobre él —no, aún no, pero esta noche será, será algo mágico en el concierto— dijo mientras sonreía, Bob no pudo evitar soltar una carcajada, no creía que en verdad fuera capaz de hacerlo, Soren lo miraba fijamente esperando a que parara de reír — lo creas o no la invite a salir y ella aceptó, así que se lo pediré, será algo mágico y muy especial que lo recordaremos y se lo contaremos a nuestros hijos— Bob no pudo evitar reír con más fuerza tanto así que cayó al piso, Soren se veía molesto, pero en esta ocasión le probaría de una buena vez que es alguien maduro, después de un rato de risas se levantó —ay primo, el pequeño Soren— dijo mientras se limpiaba las lágrimas de los ojos —no puedo creerlo ya te convertirás en un hombre, si mi tía no estuviera trabajando te dijera algo— y si él sabía que le diría algo sobre que todavía es un niño y que no tiene la edad para tener novia —si por eso me gusto que el concierto fuera en un día que saldría hasta tarde— dio un suspiro —bueno me iré a descansar un rato para mi cita— después de decir eso subió a su habitación para prepararse para su gran noche. 

Llegó la hora Soren estaba demasiado nervioso por lo que pasaría en esta noche, al salir de casa el tomo aire y empezó a caminar parecía que empezaría llover en cualquier momento, estaba nublado y se veían relámpagos, pero eso no detuvo a Soren tenía demasiada determinación para poder declararse a su amada, Karen le mandó un mensaje —[¿dónde estás? Ya llegué a nuestro punto de reunión, no te tardes, estoy muy emocionada]— al terminar de leer eso empezó a llover, Soren empezó a caminar más rápido, no quería ver a Karen enojada, no pensó que algo así pasara en esa noche.Soren empezó a correr hasta donde estaba Karen, a pesar de ser un lugar solitario estaba demasiado iluminado y estaba cerca del auditorio, él pudo ver a Karen a la distancia, pero se percató de que un chico se acercaba a ella de una forma muy sospechosa, Soren empezó a correr más rápido, el chico estaba quería asustarla, ella estaba a punto de rociar gas pimienta, pero en ese momento Soren llegó al rescate, saltó y le dio un golpe muy fuerte al chico, este cayó y se volvió a levantarse y sacó una navaja, pero cuando Soren estaba por darle otro golpe, un rayo lo golpeo en la espalda, pero este se mantuvo en pie, sentía como el rayo recorrido todo su cuerpo queriendo salir, se acercó al chico y le dio un último golpe, el cual sacó chispas, al ver que el tipo salió corriendo del lugar, la adrenalina que este tenía se fue e hizo que se desmayara casi inmediatamente, para su suerte una patrulla pasaba por el lugar, Karen no dudo ni un segundo en rogarles por una ambulancia.