Kitten || KookV [CONCLUÍDA]

Capítulo 17

JungKook no lo quiere admitir, pero a medida que el vientre de Taehyung ha ido cambiando de dimensiones, la realidad le ha golpeado fuertemente, y aunque al principio no le haya agradado la idea de ser padre, ahora ha comenzado a fantasear respecto a una familia. Sabe que ser padre siendo tan joven es complicado, pero no puede negar que tiene su encanto, que no todo es pañales sucios, llantos a altas horas de la madrugada y una boquita extra que alimentar.

Aquellos pensamientos también le traen varias preocupaciones al pelinegro, ahora va haciéndose la idea de cosas que antes siquiera tenía en cuenta.

—  TaeHyung... —susurra en el oído de su novio, quien se encuentra recostado sobre su pecho.

—  ¿Uhm?

—  Tengo una inquietud, ha estado rondando en mi cabeza por varios días, no quiero preocuparte, pero necesito estar preparado.

—  ¿Que sucede? —TaeHyung se endereza para mirar a JungKook a la cara, mantiene su ceño fruncido debido a la curiosidad.

—  Cuando el bebé quiera salir, tú...es decir, yo... —hace una pausa y se masajea la sien en señal de frustración.

—  Si es algo referente al nacimiento, nunca antes he tenido un bebé humano, tengo la misma incertidumbre que tú. Solo sé que estaré listo cuando ese momento llegue, puedo sentirlo, mi cuerpo entero se va preparando para ello. Cuando el momento llegue, no te pediré más que permanezcas a mi lado.

—  ¿Y si algo se complica? ¿Qué podré hacer entonces? —JungKook no ha querido decírselo, pero eso es lo que más le ha estado preocupando, teme que algo salga mal ¿Qué hará si ello sucede?, no puede llamar a un doctor, aunque si la vida de TaeHyung estuviese en riesgo, lo haría sin dudar a pesar de que todos descubran su verdadera naturaleza.

—  Todo va a estar bien, te lo prometo.

—  ¿Y si no?

—  Como humano soy débil y frágil, pero una vez que salga nuestro bebé de mi vientre, podré volver a ser un felino nuevamente, de ese modo me recuperaré muy rápido.

—  Y... si eso llegara a suceder, ¿qué haría yo con el bebé? —ahora JungKook se encuentra más aterrado que antes.

—  Tú sabrás que hacer —TaeHyung hace un silencio. No va a negar que en el fondo sabe que JungKook no está feliz con la idea de ser padre y en más de una ocasión se ha referido al bebé despectivamente. Teme que le pudiese hacer daño, aunque otra parte de él lucha contra esa idea, ya que JungKook es el amor de su vida y no puede imaginarlo haciéndole daño a algo que le pertenece a ambos.

TaeHyung tiene la esperanza de que, en cuanto JungKook sostenga al bebé entre sus brazos, lo comience a querer.  

Se queda observando al pelinegro y le sonríe para que este le devuelva la sonrisa, quiere aminorar el estrés que inevitablemente ambos están sintiendo, algo normal después de todo, ya que si ambos fuesen humanos y con sexos diferentes, no cambiaría tampoco la incertidumbre y nerviosismo que genera el ser padres primerizos.

—  JungKook... —TaeHyung quiere decirle a su novio que le prometa que cuidará del bebé, pero se arrepiente en ese mismo instante—. Te amo —susurra tras un suspiro.

—  También te amo. —El pelinegro se queda observando el rostro turbado de su novio, lo conoce y sabe que algo no anda bien, pero a pesar de ser un curioso de primera, siente miedo de preguntar, así que permanece callado.  

TaeHyung se masajea el vientre mientras se mantiene perdido en pensamientos. Puede sentir que el bebé nacerá muy pronto, quizá en tan solo días, siente una conexión tan fuerte con el pequeño que no deja de pensar en otra cosa que su bienestar, de hecho eso es lo que más le preocupa, que el bebé esté bien.

Aquel sentimiento siquiera se asemeja a cuando, siendo un felino, tuvo su primera y única camada de gatitos. Si bien todos nacieron muertos, él lo aceptó, después de todo, la muerte era algo inevitable. Pero esta vez nada es igual, siendo humano siente de una manera tan diferente, cada emoción es demasiado fuerte, ahora es débil, inseguro, sensible e inexperto. Y qué decir del amor ¡Cuánto le teme al amor!, ese amor que sintió por primera vez por JungKook y el amor que siente ahora por ese bebé, es un sentimiento tan fuerte que le provoca una puntada en su corazón.

Está comenzando a creer que el amor no es un sinfín de cosas lindas, que también tiene su lado oscuro, porque ama tanto a su novio y ama tanto a ese bebé, que si algo llegase a sucederles, no sabría como soportarlo.

La vaga idea lo hace estremecerse.

—  Es un niño —susurra de pronto tras salir de aquella nube de pensamientos que tanto lo han estado deprimiendo.

—  ¿Qué? —JungKook ha estado en su propia nebulosa así que se sorprende al escuchar aquellas palabras.

—  Puedo sentirlo, es un niño.

—  Tendré que borrar mi lista de nombres de gato que pensaba ponerle.

—  Ambos sabíamos que era muy factible que naciese humano, en este momento, yo soy uno y tú también lo eres.

—  Pero incluso en tu cuerpo de humano, no eres un humano común, estás esperando un bebé, ¿en verdad estás seguro que el pequeño no saldrá con genes…gatunos?

—  Es humano, es un bebé saludable ansioso por salir, te lo aseguro. Aunque…ya no lo siento como antes, no sé como explicártelo pero, es como si ahora estuviese dado vuelta, sus pataditas no las siento en la parte baja, sino en la boca de mi estómago.

—  ¡Maldición! ¡Ese bebé ya se está preparando para nacer! ¿Cómo es posible que sea humano sino ha tenido ni cuatro meses de gestación?

JungKook comienza a caminar nerviosamente por el cuarto, sin duda no está listo para lo que está a punto de enfrentarse. Ninguno de los dos está listo.

 

—
Espero estén disfrutando la lectura, ¡os amo!