Capítulo 4

1.4K 107 14
                                    

— Alex. — Dijo Ashley abriendo la puerta de su habitación.

   Dixon se había ido, dejándolas con Alex.

— Hola, mi amor. — Él le besa la mejilla. — ¿Dónde está Amelia? —

— ¡Aquí! — Grita Amelia lanzándose en sus brazos. — Hola Alex — Besa su mejilla, sonriendo. — ¿Cómo estás? —

— Ahora estoy muy feliz, ya que vi a mis dos amores. — La deja en el suelo y les sonríe, haciéndolas sonrojar. — Lo siento por no estar presente en su gran momento. —

— No pasa nada. — Dijo Amelia.

— Lo importante es que viniste a la gran fiesta King. — Dijo Ashley alzando sus brazos.

— Por cierto, lindos vestidos, ¿Dónde lo compraron? —

   Ambas se miran a los ojos.

— Por Internet. — Mintió Ashley, por más que confiara en Alex, nunca traicionaria a Dixon, su mate y alma gemela.

— Sus padres las está esperando, ¿Vamos? — Le tiende ambas manos a las chicas.

— Por supuesto. —

   Ambas le dan su mano y los tres salen, cerrando la puerta tras suyo. La fiesta es en la planta baja, y al verlo desde arriba, todo estaba impecable. Personas hablando, tomando o comiendo. La decoración es de color dorada. Nueva vida comienza hoy en día, ya no son más niñas pequeñas, ahora son mujeres que deben aprender su nuevo cargo para luego llevarlo a cabo, tendrán que aprender cómo ser una buena Alpha y Beta.

   Su presencia debió llamar la atención de su padre Liam, porque él golpea su copa contra su anillo de casamiento y todos miran hacia arriba, donde estaban sus dos hijas con Alex. Con una sonrisa, los tres bajan y los presentes aplauden muy contentos por su futura Alpha y Beta. Amelia se sonroja al llegar a la planta baja, no estaba acostumbrada a ser el centro de atención, en cambio a Ashley le encanta, se siente cómoda.

— ¡Felicidades mis amores! — Grita su papi Steve abrazando a ambas, en lo cual Alex se aparta.

— Papi, ya nos lo dijiste en el bosque. — Rueda los ojos Ashley correspondiendo su abrazo.

— Pero siempre estaré feliz por ustedes, mis dos niñas hermosas. — Se separa de ambas y con sus manos pellizca sus mejillas.

— Auch, me dejaras marcas. — Ashley golpea suavemente su mano.

— Ya sueltala Steve. — Dice Alisha abrazada a Andrew. — Hoy tienen que disfrutar de su noche especial. — Les sonríe y Andrew le besa la frente. — ¿Cómo estás Alex? —

— Muy bien señorita King. —

— ¿Tus padres vinieron? — Preguntó Liam.

    Él negó con la cabeza.

— No pudieron venir, tenían cosas más importante que atender. —

— Como siempre. — Murmura Liam para si mismo, aunque Alex logra escucharlo y se siente incómodo.

— Bueno — Andrew junta sus manos. — Porque no van a tomar o hablar, ya saben, las típicas cosas que hacen los adolescentes. —

— Mmm, en una fiesta suceden otras cosas. — Murmura Ashley y Amelia le da un codazo.

— ¿A qué te refieres? — Pregunta Andrew desconcertado.

— No importa. — Dice rápidamente Alisha. — Vamos, dejemos a los chicos divertirse. —

   Alisha se fue, y más tarde sus mates la siguieron en la entrada para saludar a los invitados.

— Bueno, ya que estamos solos los tres, podemos divertirnos. — Susurra en el oido de ambas.

— Si... ¡MIRA! — Grita Amelia señalando. — Están trayendo duraznos con crema y chocolate. — Corre hacia el camarero que en sus manos sostiene los vasos llenos de su postre favorito.

— ¡AAAAH! También hay de chocolate y banana. — Corre hacia el otro camarero

   “Siempre me cambian por sus postres favoritos” — Piensa Alex negando con la cabeza, caminando hacia ellas.

   La fiesta avanzaba y todos se estaban divirtiendo, la gran mayoría de los integrantes de la manada se encontraban en la mansión King, y otras manadas también

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

   La fiesta avanzaba y todos se estaban divirtiendo, la gran mayoría de los integrantes de la manada se encontraban en la mansión King, y otras manadas también.

    Amelia y Ashley estuvieron felices toda la noche, Alex se portaba tan lindo, aunque ellas sabían su intención, él estaba enamorado de ellas. Muchas veces lo rechazaron pero al parecer Alex no sabe lo que eso significa, ya que siempre lo intenta una y otra vez, solo que ahora está confirmado ya que encontraron a su alma gemela, quien les hacía latir su corazón deprisa. Igualmente, si Dixon no fuera su mate, la familia de Alex no los aceptaría después de lo que ocurrió en el pasado. Su padre tuvo la “gran brillante idea” de adelantar el celo, incluso trató de hacerle daño a su familia, se trataba de Francesco. Desde aquel día Francesco le agarro un gran coraje a la familia King, y nunca lo perdono cuando Alisha lo golpeó, o eso le dijeron a sus hijas.

    Los tres se conocieron en la escuela, donde antes cada uno de los estudiantes usaban diferente color se uniforme por ser de otra especia, ahora, cuando su padre tomó el cargo como Rey Alpha, algunas cosas cambiaron y una de ellas era eso, que todos utilizarán el mismo color de uniforme, el cual consistía en una blusa color blanco con una corbata azul y la pollera cuadrilla de color azul, blanco y negro. También, podían usar una chaqueta azul pero aquello era opcional. Un día, cuando Amelia y Ashley tenían cuatro años conocieron a Alex quien iba a su mismo curso, él lloraba porque unos niños le habían quitado las galletitas que estaba comiendo, entonces como ambas tenían muchas le convidaron, haciendo que el niño sonriera. Desde entonces él se juntaba con ellas y las seguía en donde ellas fueran. Aunque ambas tenían miedo de perder su amistad cuando él se planteará de verdad que ambas no lo amaban.

   Cuando la fiesta terminó, las chicas se despidieron de sus padres y se fueron a acostar, se pusieron su pijama, se desmaquillaron y se acostaron en la cama.

— Ashley, ¿Estás dormida? —

— Mmm — Contesta con los ojos cerrados.

— ¿Qué pasaría si Alex se entera que nosotras ya encontramos a nuestro mate? —

— Pues lo tendrá que aceptar. —

— Ya sé — Juega con sus manos. — pero tengo miedo de perderlo, lo quiero mucho pero también siento cosas por Dixon. —

— Hermana — Ashley se coloca de costado y la mira. — Yo también siento cosas por Dixon, lo amamos aunque él quiere que nos conozcamos de la forma mundana, pero si tengo que elegir entre él y Alex para pasar el resto de mi vida, besarnos, hacer el amor y hacerme reír, elegiría sin dudar a Dixon. ¿Deberías plantearte eso? —

— ¿Y si Alex se enoja? —

— No creo que sea igual que su padre, si eso es a lo que te refieres. —

    Amelia asiente.

— Quisiera ver a Dixon y dormir acurrucada en su pecho. —

   Ashley sonríe al imaginarlo.

— A mi también me gustaría. —

 

Luna De SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora