El cuchillo reflejo la luz de la lámpara en su rostro. Entonces lo supo.
Tuvo una revelación. No podría quitarse la vida por él mismo. Si no tenía valor para existir, menos para arrancarse de tajo la existencia. Alguien tendría que empujarlo al abis...
Kim Taehyung un omega que había amado mucho. Pero se equivocó al amar, y eso lo mató un poco cada día, haciendo que su lobo se escondiera en lo más profundo y no se dignara a salir de allí, estaba solo y él lo sabía.
Llevaba varios días sin alisarse el cabello y tampoco tenía ganas de cuidárselo. Era un peli castaño, de piel canela, su sonrisa cuadrada era hermosa cada vez que sonreía; pero hacía tiempo que no se cuidaba el cabello ni mostraba su dentadura al reír.
El rostro de Taehyung había perdido el brillo cándido que lo caracterizaba.
Ahora se veía como un chico decaído, más bien deprimido, fatigado de penas que le quitaban el resuello y le invertían la sonrisa dibujando en sus comisuras profundas marcas de expresión.
¿Cómo podía un chico como él, tan dulce, tan romántico, tan capaz de brindar cariño y apoyo haber errado no una, sino tres veces? ¿Cómo pudo dejarse usar por dos hostigadores para después entregar su corazón al alfa equivocado?
De las primeras caídas se levantó encallecido y hasta incitado a la revancha. Pero de la última, no. Jamás se recuperaría. Había marcado su fin. No se sentía capaz de seguir viviendo.
Se encontraba acostado en su cama, decidió levantarse cuando miro aquel frasco lleno de pastillas y entonces una idea se cruzó por su mente. Tomó un frasco de calmantes, vertió el contenido completo sobre su mano y la miró. Necesitaba acelerar las cosas.
Echo las pastillas a la boca y se las tragó.
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Feliz cumpleaños al ser más hermoso en todos los sentidos 💜 Dios creció tan rápido, permiso me wa a llorar.
