Tú mi Julieta y yo tu Romeo - KTH

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narración en primera persona.

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   Diane:

   Era raro, me encontraba acostada en mi cama, era fin de semana y ya mañana sería Lunes. Ensayamos demasiado la obra así que todo saldría bien, pero no dejaba de pensar en TaeHyung, el beso, estaba nerviosa y no sé el porqué de eso.

   Mi celular sonó y rápidamente lo tomé para ver si era él, pero no, sólo era un mensaje de Saeroyi, hoy le tocaba cuidar un par de niños.

— ¿Hermana, me ayudas a cocinar? Oppa* dijo que llegará tarde hoy —puchereó YeonHa sentándose a mi lado.

— Voy, renacuajo —le sonreí pellizcando sus mejillas— Tu prepara el ramen y yo preparé un poco de samgyeopsal para que después coma Saeroyi —me paré al igual que ella.

   Después de preparar todo nos sentamos a comer, al terminar YeonHa fue a dormir y yo recogí la mesa, minutos después llegó Saeroyi, se lo notaba cansado, le serví un poco de comida y me senté junto a él.

— ¿Qué tal tu día, hermana? —preguntó llevando ramen a su boca, mi hermano nunca me preguntaba tal cosa.

— Pues bien, todo normal, solo que estoy nerviosa por mañana —sonreí, sabía que quería saber qué era lo que me tenía tensa, él siempre sabía qué hacer o decir.

— ¿Nerviosa? ¿Desde cuándo? En todos los actos que he visto tuyos nunca has estado nerviosa. ¿No será que es otra cosa y no me quieres decir? —me miró entrecerrando sus ojos, yo negué, pero él sabía que era mentira.

— No, como crees —reí nerviosa, no me salvaré de ésta.

— Anda, dime. Soy tu hermano mayor. Sé que algo te sucede, y tú sabes que puedes contar conmigo —dejó de comer y me miró atento, esperando mi hablar.

— Es que.. Tengo que besar a TaeHyung —suspiré, me sentí algo rara al decir eso por lo que me encogí en mi lugar, Saeroyi sonrió con picardía.

— Te gusta —sonó mas afirmación que pregunta, negué.

— Claro que no —afirmé tratando de ignorar el latido rápido de mi corazón.

— No fue pregunta, Diane. Estoy seguro de que te gusta —me miró obvio, frunci el ceño.

— No me gusta él. No es mi tipo, lo sabes —comí un poco del samgyeopsal de su plato, no quería hablar.

— Niegalo todo lo que quieras, pero yo sé que te gusta TaeHyung —alzó sus hombros y siguió comiendo, yo sólo mordi mi labio ante el pensamiento de que TaeHyung me gustara, él no era de mi agrado, bueno.. Ahora sí pero, en un principio lo odiaba. Por alguna razón, pero lo odiaba.

   Nos fuimos a dormir y Saeroyi antes de entrar a su habitación me volvió a recordar lo de TaeHyung, esa noche no dormí por los nervios y también por mis confusos sentimientos hacia el idiota ahora no idota de TaeHyung.

   Me desperté temprano, anoche mi cuerpo cayó en brazos de Morfeo a las cuatro de la madrugada, dormí máximo unas tres horas, me bañé y me vestí casual ya que hoy era la obra y nos vestiríamos allí.

   Al llegar a la escuela fui directo a la sala de teatro ya que teníamos que hacer los últimos ensayos para no olvidar nada y hacer todo lo más perfecto que se pueda.