Lost

Capítulo. 4

El temor es mi defecto, pero la paciencia mi virtud.

ZOE.

Habíamos caminado por lo que me parece una eternidad, Jerom se ofreció a pagar un taxi pero me negué, no quiero tener nada que ver con la gente de aquí.

¿Y si por casualidad el taxista era el asesino?
Con la mala suerte que tengo no me extrañaría que fuera así.

No gracias, prefiero caminar, gracias

Jerom está callado, me dijo que lo siguiera y no hiciera muchas preguntas, he notado que no es de hablar mucho, así que solo lo sigo. No sé en donde estamos, me he vuelto loca, estoy confiado en un total desconocido pero debo proteger a Bethany. Aunque tal vez esté llevando el peligro hacia ella.

¿En que estoy pensando? No puedo fiarme de él, sé que sueno como una mal agradecida ya que él me advirtió de todo, pero en mi defensa solo confirmó lo que yo antes de venir sospechaba.

Él alza una ceja en mi dirección.

Creo que mientras pensaba lo estaba viendo, creerá que me interesa de manera amorosa o algo así, ¿Ahora como lo convenzo de lo contrario?

-Deja de mirarme. -dice serio.

-No te estaba mirando, estaba pensando y no me fijé que estaba viendo hacia ti. -Le aclaro. Estoy siendo sincera, Bethany siempre dice la verdad y en todo le va bien, además, estoy segura de que a la mayoría de las personas les ha pasado que se quedan mirando un lugar fijo pero en realidad están pensando.

-Lo estás haciendo de nuevo.

¡Ash ya deja de verlo cuando piensas, Zoe!

-JP, no estoy interesada en ti, si es lo que piensas. -listo, dejé todo en claro.

-Solo mis amigos me dicen JP. -repite con su típica cara de "No te metas conmigo."

Solo quería probar si ya teníamos más confianza.

-Pues no. -dice arrogante. Lo miro extrañada. -Lo dijiste en voz alta. -me informa.

¡¿Lo había dicho en voz alta?!

Dios.. Zoe.

Las personas de este pueblo son diferentes en todo, su forma de vestirse es muy alocada, algunos muy coloridos y otros con tonos neutros y aburridos. Todos sumidos en sus vidas, si no fuera porque este pueblo es peligroso me sintiera a gusto aquí, poder ser como yo quiera y las personas no están pendientes de lo que haces. Es perfecto.

Pero como nadie está pendiente de nadie, si te sucede algo, no les importaría en lo más mínimo.

-¿Zoe?

Escucho mi nombre, esa voz, sentí que mi mundo se detuvo. Mi corazón iba a salirse y no por buenas razones. Jerom es el primero en voltear con el ceño fruncido.

No es él, Por favor que no sea él.

Volteo detrás de mí y confirmo de quien se trata.

Adam.

¿Debería disculparme con Adam por creer que es un psicópata?

No, él debió escribirlo con otras palabras, al menos unas que no sonarán como amenaza.

-Debo hablar con ese chico, ¿Me podrías esperar aquí? -le pido.

Pero él me ignoró, su atención estaba hacia Adam, entrecierra sus ojos, supongo que tiene que usar lentes.

-¿Adam? -pregunta Jerom confundido.

-Ey JP, amigo mío.

¿Que-está-pasando-aqui?