Bajamos a cenar, la comida era exquisita y claro, como muy buen aperitivo, un delicioso vino dulce, la compañía sin duda no era la mejor y mis intenciones eran terminar rápidamente mi plato y retirarme los mas cordialmente que pudiera a la habitación que se me fue asignada, aunque tampoco era el mejor lugar si quería escapar, pero bueno, una "Princesa" debe comportarse como tal, a lo que, no debería pararme de la mesa hasta que la hermosa reina de aquel lugar lo ordenase.
Ya la mayoría había acabado su comida, solo faltaban unos cuantos y el permiso de los reyes, yo simplemente oía su platica en silencio y con una mirada seria, de vez en cuando opinando cuando me lo pedían, tambien y nuevamente de vez en cuando podía escuchar como algunas princesas e incluso príncipes halagaban a el príncipe Reaper, aunque obviamente yo no lo hice y me siento orgulloso por ello. Estaba tan sumido en mis pensamientos que no me di cuenta, cuando una fría y delicada mano empezaba a descender por mi bello vestido de ceda, al ver al causante de esto, pude observar al niño mimado que ni se inmutaba.
Estaba realmente enojado pero no podía decir nada, y no porque no quisiera, posiblemente alguien mas, gracias a aquellos toques tan indecorosos, y mas de la persona que lo hace se hubiera puesto a suspirar disfrutando de aquella atención; Pero a mi me mata, me mata sentir esto, me es simplemente repugnante, tanto, que lo único que hacia era tratar de ocultar mis arcadas, lo cual por obvias razones no pude, y claro que molesto al mimado del señorito Reaper, pero eso solo me complació.
- Princesa, ¿Todo esta en orden? ¿La comida le cayo mal?
Geno- No es eso, su alteza y no ha de preocuparse por mi, es normal que me pase esto, lamento haber causado tantos alborotos por mis problemas de salud, pero solo son unos pequeños espasmos que en unos momentos dejaran de aparecer
Por lo que veo, esa respuesta le basto y hasta le sobro, todos volvieron a sus platos y conversaciones, pude notar que la hermosa chica que también estaba en un tipo de prueba junto a mi de quien quedaría como reina de ese lugar se notaba triste... lo de siempre. Alguien se acerco a mi oído, no era nada mas ni menos que Blard, el mismo que me había salvado en la mañana, le sonreí, contra el no tenia nada, de hecho, hasta cierto punto me agradaba y me llamaba la atención, siempre tan reservado, tan callado, siempre con una sonrisa que pareciese ser sincera, con unos modales que no puedes encontrar en cualquiera y demás virtudes que no podría terminar de decir y me llevaría un libro completo.
Blard -Sabe, he visto lo que esta pasando desde hace un rato...
-Pauso un momento y mostró una cálida sonrisa- Le puedo ayudar si usted me permite, con este inconveniente lo mas probable que pase la noche en velaGeno- -Gracias a aquel comentario un ligero sonrojo apareció en mis pómulos dedicadamente maquillados- Le he de decir que usted nada puede contra el monstruo que traigo encima y con la prudencia que se merece le comento que es un fastidio demasiado egocéntrico
El soltó una pequeña risita nasal, imagino que intentando no soltar una carcajada, por suerte, nos hablábamos en susurros y sin apartar la vista de enfrente, simplemente nos inclinábamos hacia el contrario levemente.
El resto de la comida me fue de lo mas agradable, entre bromas y criticas reíamos en silencio, claro, en todo ese tiempo el niñito mimado de al lado mio no dejo de tocarme, mas no me importo, era como si quisiera o iniciar una conversación o llamar mi atención y no encontrara la forma de hacerlo mas que de una tan descarada e imprudente, o simplemente esa era su personalidad y no la podía cambiar, que era lo mas probable
Todos nos levantamos de la mesa, con el permiso de explorar el castillo y salir al jardín, que tenia un campo entero de entrenamiento y había algunos objetivos. Blard y yo salimos a este para pasar el rato, aunque cuando vimos el equipo necesario para practicar arquería, nos emocionamos un poco.
Geno- ¿Si sabes hacerlo, cierto?
Blard- ¿Tirar con arco? Pero si es lo mas fácil del mundo
Geno- No puedo creer que no sepa usted, y aun mas, siendo un príncipe y futuro rey
Blard- Ni que se diga de usted, una princesa que solo corre cuando llega el peligro y necesita de un hombre que le proteja, me subestima mi, cuando usted posiblemente sea igual o peor que yo, ya muchas princesas han intentado cortejarme y ninguna a podido, debo avisarle
Geno- Número uno -Tome un arco y una flecha, con los que empece a apuntar al objetivo- No le voy a cortejar y mucho menos soy como las demás princesas.. -Sin mas solté aquella flecha, dando justamente en el centro, como siempre, mi mirada seria se dirigió hacia aquel príncipe, quien veía atónito la flecha, como intentando creer que lo que sus ojos vieron era una mentira- ¿Ahora quien subestimo a quien?
Mi mirada seria fue reemplazada por una de burla y mi contrario intentaba volver a su postura de siempre, acariciando su pelo con nerviosismo.
Blard- Lamento haberlo hecho sin duda, pero mi madre y padre me han buscado pareja incesantes veces, sin conseguirlo, ya que o no cumplen sus expectativas o no cumplen con las mías
Geno- No ha de usted, príncipe, de preocuparse, se con precisión de lo que habla y créame que también me repugna. Se me ha prohibido intentar hacer el mas mínimo trabajo que mis padres consideren debe hacerse por un hombre, también, que practique para defenderme por mi sola, claro esta que he desobedecido sus ordenes y gracias a ello, me he llevado como consecuencia una dura reprimenda suya, según ellos, aunque para mi es lo mas absurdo que puede haber.
Blard- Sabe, creo que usted y yo nos llevaremos muy bien~
Tomo delicadamente mi mano y le dio un cálido beso o al menos así fue como yo lo sentí, era tan gentil... amable... nada comparado con el príncipe Reaper, asco.
CONTINUARA
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"Princesa"
FanfictionFino, delicado, uno dos, derecha. Así es como debe ser una princesa. Si no, el mundo no te aceptara. __________________________________________ * Esta historia me pertenece, no permito copia o robo de ideas. *La portada no me pertenece derechos a su...