"Princesa"

"Sociable"

El día había pasado, sinceramente no esperaba que lo disfrutara tanto. Ya estaba frente a mi cuarto cuando sentí como me tomaban fuertemente de la muñeca y me jalaban sin ningún cuidado hasta dentro de una habitación, y ya tengo una vaga idea de quien es, pues no avance mucho, de hecho, calculo unos cinco pasos.

Con fuerza, termine estampado en una pared de aquella habitación, mis ojos que por el impacto se cerraron, los abrí para reclamar,mas no pude hacerlo cuando sentí como me empezaban a besar sin mi consentimiento y empezaran a tocar mis caderas, abrí mis ojos totalmente enojado, viendo al príncipe Reaper, el cual, era el que realizaba aquellas acciones, gracias a dios aprendí un poco de defensa personal.

Con mis piernas rodee la cintura del idiota frente mio, que al parecer tomo aquello como si yo le dijera que continuara, pero es seguro que no se esperaba que yo me separara del beso, y tome impulso gracias a mis piernas, tirándolo al piso, y yo cayendo sobre el, rápidamente me levante e intente abrir la puerta, pero mis pupilas se hicieron pequeñas al ver que estaba cerrado con llave. Voltee asustado, viendo como ese idiota se levantaba y me miraba fijamente, por suerte la luz estaba encendida.

Geno- ... Déjame salir o voy a gritar

Reaper- Grite todo lo que quiera, la habitación esta hecha para no dejar salir sonido alguno

Calle mi habla, viendo como se dirigía hasta su cama y se sentaba en ella, poniendo su mirada en el suelo, ¿Acaso este idiota es bipolar?.

Reaper- Vi que paso el día con el príncipe Blard

Geno- ¿Eso debería importarle? No es mi marido ni mi padre o algo parecido, e incluso desobedecería sus ordenes en cualquiera de los casos

Reaper- ¿Le he dicho que es bonita?

Geno- Tocándome las piernas debajo de la mesa en una cena donde hay mas de veinte personas, y metiéndome a su habitación para violarme... si, creo que si 

Reaper- ¿Podría dejar de usar ese tono? ¿No podría intentar llevarse bien conmigo?

Geno-... Claro que podría hacerlo, si usted intentara iniciar una conversación como alguien normal

Me dirigí  su lado y me senté en la cama, claro, manteniendo mi distancia, poniendo mi espalda recta para mantener así mi postura.

Reaper- No hace falta que haga eso, se lo incomodo que puede llegar a ser

Vi como su espalda se encorvaba y su mirada se dirigía a mi, mostrando una pequeña sonrisa que nunca le había visto, no era delicada, pero era hermosa... Yo, quitando esos pensamientos de mi cabeza, también me encorve y le regrese la sonrisa.

Geno- Gracias 

Reaper-... Soy Reaper

Su mano, se coloco frente a mi, mientras aun tenia su sonrisa y me miraba como esperando una respuesta.

Geno-... Soy Geno

Igual con una sonrisa correspondí aquel agarre, viendo como aquello era una cruel trampa, pues en ese momento, mi contrario uso algo de fuerza y me dio un gran abrazo, no correspondi pero tampoco me queje, pero por alguna razón, sentí un poco de calidez.

Pasamos unos minutos hablando de cosas triviales, hasta que fui a mi cuarto, no sin antes recibir un beso en mi pómulo... no se si esta jugando conmigo y la otra chica o sus padres tuvieron algo que ver en todo esto.

Al entrar a mis cobijas, caí en un profundo sueño, realmente estaba cansado.

Desperté al oír como tocaban mi puerta, aun adormilado, permití el acceso a mi habitación, viendo entrar, a aquella negra de ojos hermosos caminando hacia mi, teniendo en sus manos una bandeja de plata y cubiertos del mismo material, con un desayuno sobre este en vajilla de porcelana; Yo talle mis cuencas para intentar despertarme por completo.

- Disculpe la molestia madame, pero me fue notificado que debía depertarle para que bajase a desayunar y empezar con la rutina

Geno-... ¿Aquí también hacen que las princesas sean mas princesas?

- Si niña

Geno- ¿Y se solicita mi presencia?

- Si niña

Geno- Bien, muchas gracias, puede usted retirarse dama

- Es imposible aquello, pues se me puso la tarea de ayudarle a vestirle y con sus actividades matutinas

Geno- Gracias, siéntese en la silla, le notificaré cuando la necesite

- Pero-

Geno- Sin peros 

Empecé a hacer lo de todas las mañanas, claro, antes de todo comí; hasta que llego la parte de vestirme, nunca me ha gustado usar corsé, por lo que solo uso uno en vez de usar dos, para esto, si me tuvo que ayudar aquella negra, al ya estar por fin listo, salí del lugar, no sin antes darle las gracias a esta.

Al bajar, encontré a ya todas las princesas en un gran salón, listas para empezar con esto... di un suspiro pesado, definitivamente nunca me ha gustado esto y lo peor, los príncipes se encontraban en sillas, en una de las paredes, perfectamente colocados para que nos vieran de pies a cabeza, que exhibición... sentía mi cara arder, pero no podía hacer nada. 

Nos ordenaron que nos colocáramos en una fila, frente a los príncipes y delante de estos, estaba la reina y a su lado, una condesa, la cual, seria la que nos ayudaría a seguir el protocolo de princesas. Pude ver como varios chicos tenían su vista fija en mi, no me puse nervioso pero si avergonzado y mas, porque ya sabia lo que se venia.

- Es hora de comenzar, anden, ustedes ya deben saber que es lo primero así que...

Oh no, esta odiosa canción de nuevo.

- Uno, dos, tres da media vuelta o te darán dos por tres~ (Latigazos), cuatro, cinco, seis hazlo bien y tendrás una ascesis~ (Conjunto de prácticas y hábitos que sigue el asceta para conseguir la perfección moral y espiritual), siete, ocho, nueve si no terminas seremos breves (castigos),~ diez, once, doce la desobediencia se hará desembrozar~ (Cazar).

Pude oír unas cuantas risas, eso realmente me molesto mucho, puede que casi no rimara pero no saben lo que nos hacen para que seamos "Perfectas", como se dice al inicio, si hacemos algo mal nos pegan, como si fuésemos animales. Esto es asqueroso, y lo peor es que cualquiera, aunque no sea de tu familia, pero si de la realeza te puede levantar la mano.

CONTINUARA