El dialogador no se calla, me mantiene encerrada en una burbuja demasiado idiota como para que yo realmente quiera estar dentro de ella, pero no puedo solo salir o ponerme en su contra. Tengo miedo, no sé realmente de qué, pero le temo a algo al límite del horror y el pánico; quizás a mis sentimientos, a volver a perderme por culpa de ellos o puede ser a lastimar a alguien más a causa de ellos.
Parece, hasta ahora, que llorar es todo lo que me queda. Si me siento encerrada, es lo único que me nace, lágrimas, ni una sola palabra. Intento escribir algo para explicarlo, pero no puedo, me retracto y elimino todo. Ni siquiera un "hola" puedo transmitir sin después desear esconderme.
Suena absurdo cuando lo pienso, pero de algún modo no lo siento de esa manera. Es un agobio inmenso. El orgullo tampoco se pone de mi lado, es demasiada alta la barra que me ha puesto y simplemente no puedo con ella, así que, para evitar ponerme en su contra, termino cediendo a ello y encerrándome, nuevamente.
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El Llanto de las Nubes.
Teen FictionEn su corazón habitaban solo nubes, simplemente ese cumulo de gases, ahogando sus latidos entre inmensas y prolongadas tormentas. Miranda, solo guardaba fuerzas para cuando ese liviano órgano dejase de servirle. Dylan, apariencia fuerte e indestru...