He de admitir que el proceso de autodescubrime hasta ahora no ha sido sencillo, más bien, numerosas veces me ha resultado ser un proceso incómodo y hasta frustrante. Muchas de las veces, y me incluyo, preferimos aprender un sinnúmero de otros temas antes que estudiarnos y aprender de nosotros mismos.
Mucho tiempo evité conocerme y en cambio, se me hizo más fácil crear y creerme una idea (o varias) sobre qué me gusta y quién soy. A esto influyeron personas y sus opiniones, que fui yo quién les dio valor. Sin duda, situar la antención a uno mismo y estudiarse es un proceso de nunca acabar, al principio puede que sea complejo pero entre mas se práctica, más gratificante son los resultados.
Hace relativamente poco, puedo decir que no me gustaba estar sola y prevenía cada oportunidad que me colocara en esa situación. Tras mucho aprendizaje y autrodescrubimiento después, debo reconocer que estar y compartir conmigo cada vez es menos desagradable y he encontrado pequeñas cosas que hacen el acto más agradable como leer, descubrir música y tomar fotos.
Decidir ya no estar peleada conmigo misma, hacer las pases y perdonarme por no haberme puesto como prioridad ha sido un acto revolucionario. Ahora veo la vida con otros ojos.