Just for you...

Cap 2- Tu sombra

    
     El invierno  pronto se retiró llevándose consigo los recuerdos de incontables guerras de nieve y narices frías, la primavera los comenzaba a cubrir con su cálida brisa, de pronto un estrepitoso ruido irrumpe en el silencio sepulcral de los pasillos de la escuela, las puertas de las aulas comienzan a abrirse dejando salir a los niños presurosos por librarse de los libros, el pequeño trataba de ver sobre los demás poniéndose en puntas y asomándose como podía, siguiendo a la multitud salió hasta la puerta principal  y se quedó en silencio.  Tímidamente lo buscaba entre los demás, su carita decepcionada se reflejo sin querer justo al instante que lo sorprendieron desde atrás
-Hey!- el pequeño volteó de inmediato para toparse con la particular sonrisa cuadrada del castaño que se acercaba trotando apresurado con sus libros aun en las manos, se detuvo frente al menor al ver esa expresión en su rostro y tomando algo de aliento preguntó
- ¿Qué ocurre? 
-... c-creí que te habías ido ya..- el castaño le sonrió y rodeando su cuello   con su brazo comenzó a caminar llevándolo consigo
- No me iría sin ti...jamás - ambos rieron y planearon su tarde de camino a casa.

La primavera corrió entre días cálidos   para darle paso al verano que los vio disfrutar de tardes de castillos de arena y mar, interminables jornadas de risas y juegos que se repetían una y otra vez a través de los años, bicicletas, raspones y esa sonrisa llena de complicidad q se reflejaba en sus rostros daban una postal perfecta y reafirmaban lo que era obvio ante todos, sus lazos se habían hecho casi irrompibles con cada paso de los años, tanto que prácticamente eran uno.

La adolescencia no se hizo esperar y con ella las primeras diferencias entre ellos, aunque no parecían demasiado importantes ya que trataron de adaptarse y seguir tan unidos como siempre pero a veces el carácter tan dócil del pequeño era un poco molesto y ya no combinaba demasiado con el ahora particular carácter algo explosivo del joven Taehyung.

Era el último año de preparatoria y el castaño se había hecho de un grupo de amigos que comenzaba a disfrutar de salidas y fiestas nocturnas en la playa que no siempre terminaban bien, el pequeño como siempre lo acompañaba a todas partes, hasta que un día algo cambió.

- ¡Adiós, vuelvo tarde!- gritó el castaño bajando las escaleras
- ¿Adónde vas?- interrogó el menor
- Al centro tal vez - contestó algo incómodo
- No me avisaste...
- Se me pasó, otro día vamos ahora se me hace tarde - decía mientras se dirigía a la puerta
- Espérame, voy contigo!-
- Otro día
- Pero estoy listo...-
- Mañana te llevo
-¿Porqué no quieres que vaya?!- preguntó algo exaltado
- Te dije que otro día
- ¡No!¿Dime que pasa?- gritó bloqueándole el paso
- Hazte a un lado
-¡Dime! Porqué?!- el castaño lo miró sumamente molesto como nunca antes lo miró y contestó casi entre dientes
- Porque estoy cansado de ser tu niñera, me harté - el menor con lágrimas en los ojos y atónito no supo qué responder a eso, el castaño se acercó y tomándolo del brazo lo apartó de su camino, sin mirarlo le dijo al pasar
- Desearía que hagas algo más que solo llorar- cerró la puerta mientras el pequeño sintió en aquel portazo como su vida se quebraba en dos, no podía entender porque estaba tan molesto cuando siempre parecía disfrutar de ser quien era el mas rudo.

El menor subió a su habitación secando sus lágrimas en silencio, las últimas palabras del castaño resonaban en su mente cual estruendo en la noche, el vacío de la habitación antes colmada de risas lo hacían sentir aún más la ausencia del mayor, permaneció sentado en la oscuridad sin más compañía que sus peluches y almohadones con los que tantas veces habían jugado, apenas unas vetas de luz entraban por el ventanal, de pronto un pensamiento  atravesó su mente...
- ¿y si esto es permanente?...¿si ya nunca más quiere estar conmigo?- esa simple idea hizo que un escalofrío corra por su espalda, es que no conocía otra manera de vivir que bajo su sombra y no estaba dispuesto a resignar eso, no quería que las cosas cambien y estaba dispuesto a hacer lo que sea por recuperar su compañía.

Los días pasaron y la tutela del mayor ya no era como antes, el pequeño se había convertido en tan solo un espectador de las salidas del castaño, debía demostrarle que podía seguirle el ritmo, que podía defenderse y ser el compañero que necesita, aunque no sabía bien como hacerlo hasta que una noche el mayor llegó algo alterado
- ¿Que ocurre?- preguntó el pelinegro sentándose en su cama, el mayor lo miro y con rabia le contó lo que había sucedido, otra vez había peleado con aquel joven, Hyunjin solo lo observaba, se veía tan molesto y ese nombre ya lo había escuchado antes, esas peleas eran demasiado frecuentes últimamente y definitivamente alteraban al castaño sobre manera. Esa noche permaneció mirándolo en silencio, pensando solo en una cosa... devolverle la tranquilidad a su hermano... como sea.

Muy temprano en la mañana el pequeño salió en silencio y fue directo al departamento de Changbin...

- Me sorprende que hayas venido, sin tu hermano, aunque siendo sinceros no te habría dejado entrar si lo hubieras hecho- comentó despreocupado mientras salía hacia el balcón terraza, el pequeño se acercó viéndolo fijamente, su rostro reflejaba calma como siempre y sonriendo preguntó
- ¿Porque te gusta molestarlo?, últimamente parece que es tu pasatiempo favorito - Changbin se apoyó en la baranda y luego de una carcajada respondió
- No lo sé sólo me divierte, además desde que ya no estás en el grupo ese molesto de Jungkook acapara toda la atención y a él parece no importarle, confía en él como si fuera lo mejor y deja que tome todas las decisiones, qué hacer, adónde ir... es realmente una molestia-
- ¿Y sólo por eso le haces las cosas difíciles?¿porqué no se lo dices a jungkook y listo?-
- Porque nadie puede decir nada sin que tu hermano salga a defenderlo- contestó Chan con dejos de desprecio y rabia ante esa situación
- Pss, me parece una estupidez lo que haces, estupidez que le llamo cobardía - dijo el pequeño dándole la espalda para retirarse metiendo sus manos en el bolsillo
- El ocupó tu lugar... como le llamas a eso?- el pequeño se detuvo, apretó sus puños y entre dientes contestó
- Nadie ocupa mi lugar- Giró rápidamente al tiempo que sacaba una navaja de su bolsillo abriéndole la garganta, el sorprendido Chanbing llevó sus manos a la herida sin evitar desangrarse mientras se ahogaba al tratar de dar bocanadas de aire, el pequeño se acercó con su mirada fría como el hielo y dándole una patada en el pecho lo arrojó al vacío para luego irse casi como una sombra sin ser visto.

Al llegar a su casa se cruzó con el mayor que lo vió entrar
-¿De dónde vienes?- pero al no obtener respuesta lo tomó del brazo
-Hey!- el pequeño lo miró y dando un movimiento se libró de su agarre, subió las escaleras y se encerró en su cuarto azotando la puerta, el joven Taehyung se quedó en silencio sin entender qué le ocurría, aunque eso es algo que pronto iba a descubrir.