Just for you...

Cap 5- El final... ?

    
     Eran ya casi las 6:30... Hyunjin miraba su reloj mientras apuraba cada vez más sus pasos, su respiración agitada y sus latidos descontrolados resonaban en su pecho dejándolo casi sin aliento, tomó presuroso sus llaves del bolsillo y abrió la puerta, levantó su vista y ahí estaba él, mirándolo fijamente como si sospechara algo de todo lo que había pasado esa madrugada. Casi en cuestión de segundos el pequeño reaccionó sonriéndole mientras  acomodaba su cabello, controló su respiración y cual si fuera un gran maestro del engaño preguntó con voz calmada

- jmm... ¿Tan temprano levantado? - el castaño que no apartaba su vista de él se acercó lentamente y preguntó...
-¿De dónde vienes?- el pequeño con una aparente calma sonrió y respondió
-Hey... yo pregunté primero - el mayor se acercó aun más y viéndolo a los ojos permaneció unos segundos inmóvil haciendo que finalmente el pequeño quebrara su postura calmada evitando sus ojos y pasando por un costado para huir  rumbo a las escaleras, pero Tae lo tomó del brazo y volvió a interrogar
-¿Que pasa?... ¿De dónde vienes?- el pequeño solo se zafó del amarre y subió las escaleras para encerrarse en su cuarto dejando a su hermano más que preocupado por él, creyendo que tal vez algo le había ocurrido.

Como cada día el castaño debía asistir a la escuela y por la actitud tan extraña del pequeño imaginó que ese día tampoco iría a clases asi que simplemente salió y trató de iniciar su día lo mas normal posible, aunque ya no podía evitar pensar en el pequeño... es que se veía algo perturbado, decidió caminar un poco por las cercanías del muelle de camino al Instituto , generalmente eso lo relajaba, las hojas crujían bajo sus pasos mientras trataba de encontrar una explicación lógica a todo eso, a lo lejos una voz gritaba su nombre y le hacía señas para que se acerque de prisa, un escalofrío recorrió su espalda sin saber porque...

-Tae!! Ven rápido!!
-¿Qué, porqué?...¿Que ocurre?-
-¡Es jungkook, ven!- al oír ese nombre simplemente corrió, sus ojos se abrieron espantados al ver el lugar vallado con cintas policiales, una pequeña multitud se empujaba para ganar la primicia de lo ocurrido, como pudo se abrió paso tratando de acercarse más, apenas alcanzó a ver como subían  a alguien en una ambulancia cuando escuchó llorar a sus  compañeras de curso detrás suyo, giró y algo nervioso interrogó

-¿Dónde esta kook?... ¿q- que pasó?!- una de las jovenes se acercó a él  y con la voz quebrada de dolor respondió
-El... El murió...
-¿Qué?!-
- No sabemos cómo, sólo parece que lo atacaron y lo arrojaron al río - terminó de contar la joven para romper en llanto, el castaño aturdido y sin poder decir palabra quedó sin aliento sintiendo como un nudo en su garganta casi lo asfixiaba haciendo que su pecho pareciera estallar mientras oía la sirena de la ambulancia alejarse del lugar.

No podía creer lo ocurrido, sus piernas se debilitaron y se inclinó tomando sus rodillas en un acto desesperado por buscar algo de equilibrio, le hablaban pero ya no lograba entender lo que decían, parecían no tener sentido las palabras ni lo que pasó, ¿quién podría hacer algo asi? ¿porque le harían algo  así?... en su cabeza giraban todas las teorias de los presentes hasta que algo sonó como campanas en la oscuridad...

-Dicen que ocurrió entre las 5:30 y las 6:00 am...

El tiempo se detuvo de pronto y la imagen de su hermano en la puerta cerca de las 6:30 le atravesó la mente cual rayo irrumpiendo en la tormenta, casi sin pensarlo se alejó de la multitud y corrió de regreso a su casa.
Corrió casi por instinto porque no tenía ni noción de cómo lo estaba haciendo, solo repetía una y otra vez lo mismo...
- Dios, que no sea él...por favor...

Se detuvo en la puerta para tomar aliento y tratar de calmar un poco ese ajetreo de emociones encontradas que revolucionaban su interior. Al cabo de unos minutos finalmente tomó coraje y entró para enfrentar a su hermano, subió las escaleras en silencio, solo sus latidos exaltados se podían percibir, entró a su habitación y con lágrimas en los ojos apenas podía  pronunciar las palabras...
- ¿Porqué?... -el pequeño sentado en su cama leyendo tranquilamente alzó la vista y regalándole una sonrisa contestó
- ¿Porqué... qué?...
- ¿Porqué lo hiciste?-
- ¿De qué hablas?...yo no - el castaño se acercó y tirándole el libro de sus manos gritó sin dejarlo terminar de hablar
-¡No te atrevas a mentirme! Sé que lo hiciste, maldita sea! ¿porqué?!- el pequeño se puso de pie y trató de salir de la habitación pero el castaño lo tomó del brazo empujándolo hacia la pared haciendo que el pequeño se quiebre y termine confesandolo todo
- Ok! Ok! ya... si lo hice pero fue un error
-¿Un error? ¿es en serio Hyunjin? ¡Jungkook está muerto! y sólo dices que fue un error?
- Y-Yo no quise... pero es que él no dejaba de decir cosas y... no se...solo pasó - los ojos del mayor no podían ocultar el espanto que le provocaba el hecho de que su pequeño hermano fuera el responsable de algo tan cruel, dió unos pasos hacia atrás algo consternado, el pequeño lo miró y acercándose trataba de excusarse casi inocentemente
- No,no,no... no te enojes conmigo, no quise hacerlo... es que no dejaba de hablar...me provocó...- el castaño solo lo miraba perderse en un recuerdo que solo él conocía, enredando sus dedos en sus  cabellos el pequeño continuó casi murmurando -...yo no queria... no quise... pero es que él no cerraba su maldita boca!!...
- Estas loco - el menor salió de su transe al oir esas palabras y se acercó aún más a su hermano algo nervioso
-No-no-no...estoy bien, solo-solo fue un error...
-No bro... necesitas ayuda- dijo el castaño mirándolo con algo de tristeza, salió de la habitación y bajó las escaleras sacando su celular del bolsillo, el pequeño salió detrás suyo  sin dejar de excusarse una y otra vez, tratando de hacerlo entender de que sus motivos eran válidos y que el pelinegro lo había provocado
- ¿Qué haces?¿A quién llamas?- preguntó asustado el pequeño
- Necesitas ayuda... -
-Vas... ¿a entregarme? - el castaño solo lo miró y siguió al teléfono
- Chanbin tenía razón... ese jungkook te importaba más que yo...- agregó el pequeño - y yo que creí que él  era el problema...no debí haberle hecho daño- dijo dejándose caer en el sillón.

El castaño bajó lentamente el celular cayendo en la realidad absurda en la que su hermano era culpable de dos horribles homicidios, intentó reprocharle pero las palabras no podían salir, estaba tan consternado con todo eso que ya casi sentía que sólo era un mal sueño del que quería despertar.

                                 [...]