Poema V

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Y en una noche gris, mi mente no durmió
Siguió imaginando que vos estabas acá
El cuerpo durmió porque se enteró de la verdad
Pero mi mente aún podía oírte reír, ella no te olvidaba
El corazón seguía latiendo pero con menos ganas que las que tenía cuando estabas
Te fuiste sin decir nada, y yo simplemente observé cómo te alejabas y perdías en la niebla de aquella noche
Despertaba en tu presencia fantasmal, irreal para la ocasión y como la más grande metáfora
Tenía en mis labios el sabor de los tuyos, podía sentir aquello que despertaba cada vez que me abrazabas con solo cerrar los ojos
Cada noche seguía con mis pensamientos inmersos en tu persona, ya no podía soportarlo, no podía apartarte de ahí porque ya era tu morada eterna
Aún no podía olvidarte, estabas impregnado en mi piel y en mi corazón
Seguía ahí tu esencia, pero de nada le servía al corazón tenerla, cuando lo que necesitaba era tu presencia acogedora.

Las palabras de mi corazón.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora