"MI PRO Y MI CONTRA"

•Chapter 1•

¿Clases terminadas?

- Ayleen baja la música, porfavor.- enunció mi madre desde las escaleras de abajo.

- Pero si no molesta.-dije segura.

- Será a ti.-dijo una voz al otro lado del pasillo. Rodé los ojos, me metí en mi cuarto y apagué el reproductor con el ipod conectado.

Me solté de golpe hacia atrás, para parar en mi cama. En el techo estaban puestos todos mis pósters de cuando me gustaba ese grupo tan conocido de...Ya no recuerdo ni su nombre. Llamadme tonta pero estuve media hora pensando en cómo pude pegar los pósters en el techo.

Cogí mi móvil y me puse a mirar fotos de mis amigas en las redes sociales, todas en la playa y con chicos que desconocía. Seguro eran líos...conociéndolas.

Resoplé tipo al sonido de los caballos.

Me incorporé. Salí corriendo hasta la habitación de mi hermana, cuya puerta estaba cerrada. Toqué la puerta.

- Brooke.-volví a tocar.

- Brooke.-volví a tocar.

- Brooke.-ver tanto big bang theory no me hacía bueno.

Aún así nadie contestó.

- ¿Y si hacemos un muñe...?-dije cantando.

- ¿Pero tú eres tonta?-se abrió la puerta y con ella la cara de mi hermana un poco descuadrada y asustada.- Tienes que dejar de ver dibujos con Shein, te lo digo enserio.-Shein era nuestro hermano pequeño de 10 años.

- Pues si no me contestabas algo tenía que hacer.-me encogí de hombros.

Suspiró.- ¿Qué quieres?-se cruzó de hombros.

- ¿Tienes algo que hacer hoy?-

- Pues si con algo te refieres a los papeles de matriculización. Sí, sí tengo que hacer.-

- Tienes hasta Septiembre y estamos en Junio.-fruncí el ceño.

- ¿Qué coño quieres hacer?-a mi hermana se le iban las palabrotas, aunque mi madre le regañase por decir palabrotas, ella seguía diciéndolas. Creo que era ya como su método de comunicación o algo por el estilo.

- Pues no sé, pero no quiero estar todo el día aquí, mientras veo fotos de mis amigas dándose el lote ¿sabes?-creo que pensaba lo mismo que yo, o por lo menos eso me demostró la mueca que dibujó en su cara.

- No suelo hacer muchas cosas contigo, pero...-esperaba una respuesta pero no, me cerró la puerta en la cara !Di que si, amor de hermana¡ !Claro que sí, joder¡

Levanté una ceja, a modo de "¿me estás vacilando?" ,aunque de sobra sabía que mi hermana gemela no me abriría la jodida puerta. Hace una semana que terminaron las clase y me pasaba el día metida en mi habitación, y no precisamente para hacer algo educativo ni mucho menos. Lo único que hacía era ,como he dicho, ver mi tablón y mis redes, ver como se lo pasaban, etcétera, etcétera, etcétera.

- Ayleen.-dijo desde fuera mi hermano Shein.

- Que.-respondí con tanto ímpetu que me sorprendí y todo.

Abrió, mi hermano cabezón, la puerta y vi una figura con los hombros fruncidos y la cabeza gacha.

- Es que...-

- ¿Què?- exclamé.

- Pues es que, mis amigos iban a la piscina por si me puedes llevar.-dijo indeciso.

- Pues...- me puse a pensar. «A ver, no tengo nada que hacer y en la piscina habrá más gente, y mi hermana es una sosa y esas cosas...»

- Vale.-

- Jo Ayleen, siempre igual...ah que has dicho sí.-reí por la bajo. Normal que dijese eso, yo siempre decía lo mismo cuando me pedía algo. Era como que yo no trataba muy bien a mi hermano, pero le quería, y eso hacía Brooke conmigo, la verdad.

- Bueno, vete, yo estaré por aquí.- terminé la frase y mi hermano de ojos verdes y piel pálida, desapareció de mi vista.

Me tumbé en la toalla de color rosa y me puse los cascos y encendí el reproductor, sonaba "wake me up when september ends" , una de mis canciones favoritas de todos los tiempos. Tataraé la canción en bajito y hacía ritmo con mi pie derecho, que estaba cruzado con la pierna izquierda.

Noté unos golpecitos en mi hombro.- Oye.-dijo uno voz, a la cual no hice caso porque sabía que era mi hermano.- Oye.-repitió.- EEEH.-

- ¿Qué coño quie...?-pues vaya, no era mi hermano, mierda. Era un niño el cuál no conocía.

- ¿Eres la madre de Shein?- sin comentarios...

- Oye niño, ¿cuántos años crees que tengo?-se encogió de hombros.

- No sé, pues los suficientes.-

-Uy...-

- Es que Shein, se ha caído y se ha resbalado con el bordillo.-miré a la dirección que me señaló. Me levanté y fui a ver que pasó.

- Shein, ¿qué te ha pasado?-pregunté preocupada, como buena hermana que soy.

- Nada, estaba sentado en el bordillo y me había hecho daño y me he resbalado, y ya está.- hay que ser torpe para caerse cuando estás sentado en el bordillo.

- A ver, pequeño.-oí una voz procedente de mi lado y entonces fue, cuando se me iluminó la virgen.

«Oh, dios mío»