Al salir del establecimiento, SeHun siente que abandona algo importante.
Tal vez cometió un error al pedir el número de aquel guapo muchacho de aquella forma tan poco educada. O tal vez debió haber insistido un poco más.Sin embargo el camino es agradable, junto al ruido de la ciudad y la ajetreada vida de los transeúntes, sube a su auto y baja el techo de este para sentir más los últimos rayos de sol.
Al llegar a su casa, se quita los zapatos, deja la maleta en la entrada y cuelga su saco en el perchero, se golpea ligeramente con los puños en los hombros y arrastra sus pies hasta la habitación principal, parece no haber rastro de nadie en toda la casa.
Parece pero si, efectivamente hay alguien en casa y no es quien quisiera, al bajar la vista nuevamente puede notar aún con sus cansados ojos prendas en el suelo desde medias nylon hasta un corto vestido rojo y unos tacones negros, los recoge y continúa hasta llegar a su habitación la puerta está entreabierta y en el suelo hay unas bragas negras junto a un sujetador del mismo color y en medio de la enorme habitación en la cama king está el delicado cuerpo de una mujer, cabellos rubios y piel de porcelana, está dormida o eso es lo que aparenta, su precioso perfil adornado por sus profundas pestañas negras y ese lipstick carmín que le resaltan sus regordetes labios, la curva de su cuerpo es maravillosa a los ojos de cualquiera, menos de SeHun que ya sabiendo la costumbre de Carla de meterse en su habitación y acostarse en su cama desnuda tiene siempre unas colchas de repuesto, coge una y con esa cubre el cuerpo de la joven, quién al ver su plan fallido otra vez abre los ojos.
—Buenas noches, cielo —dice en un coreano casi perfecto pero que de alguna manera es muy sensual.
—Carla que placer tenerte entre mis sábanas —dice con ironía y ya demasiado cansado se sienta al borde de la gigantesca cama para desabotonarse la camisa y aflojar su corbata hasta quitarla, pronto el esbelto cuerpo está abrazándolo por detrás mientras trata de quitar los botones hasta que el blanco pecho de SeHun esta al descubierto, sus piernas son hábiles y en segundos está sobre el regazo del rubio, deja besos húmedos por su cuello y manzana, baja hasta las clavículas y quita por completo la tela.
SeHun se deja hacer, está demasiado cansado como para apartarla y echarla de casa, pronto su espalda choca contra el colchón y las traviesas manos de su acompañante le desabrochan los pantalones, siente los labios de la mujer en los suyos, besos insípidos pero apasionantes de esos que te dejan deseando más, siente la delgada mano meterse entre su hombría y sus boxers, un suspiro sale de sus labios, todo ocurre tan rápido que no nota en que momento es que sus pantalones desaparecen o en el que un condón es colocado sobre él y el está empujándose sobre ella hasta llegar al orgasmo.
El sonido de un celular le obliga a abrir los ojos, ya oscureció hace un buen rato y el cuerpo encima de él no le deja ponerse de pie para buscar el maldito teléfono.
—Hunnie calla esa maldita cosa — susurra delicada ella y se aparta de el antes de dejarle un beso en los labios, uno con lengua y sucio.
El alto la ignora y se pone de pie para coger el móvil.
—¿Aló? —pregunta al contestar sin ver al remitente mientras enciende un cigarrillo.
—Amigo, soy John —la voz del otro lado también suena cansada.
—¿Qué quieres? —pregunta después de soltar el humo.
—Hoy es viernes y quiero ir por unas copas, Chan también se apuntó.
—Esta bien, nos vemos dentro de una hora, necesito tomar una ducha.
—Claro, me saludas a Carla —responde juguetón y corta antes de que el pelinegro responda.
—Jodete —dice y pone el celular a cargar en la mesita de noche.
—¿Fiesta? —pregunta ella mientras se pone de pie en medio de su desnudez.
—No estás invitada —le responde serio.
—Cariño, soy tu prometida, yo siempre estoy invitada ¿Quieres ir por la ducha?
—Yo primero —dice antes de encerrarse en su baño.
La verdad es que sí, Carla es su prometida desde hace años, es bella, habla muchos idiomas, inteligente, joven, perfecta pero el no la ama, ella dice que eso no es necesario mientras tengan esa conexión es decir sexo cosa que definitivamente si tienen, tampoco necesitan compresión, solo algo de calor corporal en esas épocas dónde la soledad no es una buena compañía.
No se aman pero sabe que ella no lo va a dejar ir tan fácilmente incluso si son otros cuerpos los que conocen cada noche.
No es una relación abierta porque ante los ojos de los demás ellos son pareja y siempre será así, claro hasta que se casen o el logre enamorarse de verdad.
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A Place In The World (HunHan)
FanfictionLuHan tiene algo que lo diferencia de los demás, no es un sexto dedo en el pie derecho, o un tercer pezón, es algo más complicado, pero no tanto, él solo tiene una doble personalidad, ya saben, lo común, dos personas distintas habitan en su ser. SeH...