¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Él alemán se dirigía con rapidez a la casa del chileno, debido a que no lo habia visto en la reunión del día anterior, la preocupación hay que decir que se le subio un poco a la cabeza.
Al llegar a su hogar, subio las escaleras que dirigían a la puerta de entrada, bastante desesperado toco la puerta repetidas veces.
– ¿Chile? ¿Estas ahí? —Pregunto.
Al no recibir respuesta bufó y miro alrededor, la calle estaba vacía, algo raro al parecer.
Preocupado por su amigo miro alguna manera de entrar pero no encontró ninguna, se acomodo sus lentes y vio la puerta de entrada.
Dio unos cuantos pasos hacia atrás y luego corrió a la puerta para patearla, rompiendo la cerradura en el acto. Algo que probablemente tendra que pagar en un futuro y quien sabe si una multa.
Con prisa busco en todo él primer piso al chileno notando su ausencia. No estaba ahí. Corrió a las escaleras con miedo y se dirigió a la habitación de este.
Al ver la puerta se podia ver entre abierta, además que con un "Chile" grabado en esta. Entro con precaución buscando con la mirada al latino.
Al entrar por completo al cuarto tampoco estaba presente, las ventanas estaban cerradas y no habian pistas de que alguien mas estuvo aqui.
Se dirigió a la puerta del baño que se encontraba en la misma habitación escuchando leves sollozos y jadeos bajos, pero al parecer hizo eco en aquel mismo cuarto de baño causando que fuera bastante audible para escucharlo al otro lado de la puerta. Tomo el pomo de esta notando que estaba cerrada.
– Chile?, estas bien?
Al escuchar que los jadeos y sollozos cesaron una voz aquebrantada hizo presencia, además de él sonido de una botella girar en él suelo.
– O-oh..We-Weon!, si, estoy bien.
Alemania no muy convencido por aquella respuesta decidió protestar por la verdad.
– ¿Estas borracho? ¿En serio estas bien? ¡Abre la puerta Chile! —Reclamo intentando guardar sus ganas de tirar la puerta.
Él de parche, nervioso y mareado se levanto de la cerámica fria y se dirigió a la puerta del baño, callendo y manteniendo su equilibrio sobre esta. Al quitar la cerradura Alemania abrio la puerta haciendo que él chileno cayera en sus brazos.
– Hueles a alcohol —Dijo él de lentes, cargo al de parche y lo dirigió a su cama para luego recostarlo en esta.
Se dirigió al baño y agarro la botella de alcohol que reposaba en él suelo; Fernet Argentino, era aquello.
Con la botella en mano dio pasos hacia la cama donde estaba él latino. Le mostró la bebida al de estrella con una ceja alzada en modo de duda.
– ¿Argentina tiene que ver algo con esto?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
