Después de...

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Pov. Calle

Al despertar, me sentía mal, sonar que Poche y yo tuvimos sexo me hacía sentir... no sé, ¿mal? Es mi amiga, solo eso y yo soñando que me cogía. Estas mal Daniela.

Al voltearme para ver si ella ya se había despertado, me sorprendí y pegué un grito al verla alado mío, desnuda pues lo único que la tapaba eran mis sábanas blancas. Mierda! Lo de anoche no fue un sueño, si paso, y aunque me gusto... tendremos que hablar de esto. Urgente.

Abrió sus ojos rápidamente, y al verme cubriéndome también grito, ambas gritamos por unos 10 segundos hasta que se paró de la cama, con la sabana para cubrirse. "¿¡que pu-diablos sucede?!?" dijo de repente, yo solo negué con la cabeza, no se porque grité ni porque seguíamos mirándonos confundidas. "yo... no tengo idea, creo que tuvi-" me callo, ella trato de hablar, pero se congelo, su mano fue a su cabeza y empezó a caminar en círculos, "¿es-estas bien?" volteo a verme y se quedó así unos minutos. "dios... ya no soy virgen!" soltó de repente, se comenzó a reír, pero no entendía por qué. Yo solo asentí con la baza e intentaba encontrar una explicación a sus palabras, aunque eran claras solo podía pensar en que fue una especie de broma.

"yo... tenemos que hablar de esto, ¿no crees?" le pregunte y ella dejo de reír, su expresión ahora era seria y se sentó alado mío, "cierto, tu... ¿estás bien con lo que paso?" me conmovía su preocupación por mi estado, más que físico, pues tenía un par de morados en el cuello y rasguños en la espalda, emocional. "si, bueno, no se... lo de anoche fue algo de más que amigas... pero no creo que lleguemos a eso" de inmediato me arrepentí de mis palabras, al ver que trago saliva y abrió sus ojos como platos supe que ella no quería un <<solo amigas>>. Se levantó rápidamente, me miro y susurro un "perdón" que me dejo helada, camino al baño y se encerró allí por unos minutos, quise pedirle que salga, pero yo también me sentía mal después de decir eso, no sé qué es lo que ella creía que pasaría, pero el verla así de vulnerable me rompía el corazón. Sus pequeños sollozos se escuchaban atreves de la puerta, me mataba, no lo soportaba, pero... ¿Qué podía hacer? ¿decirle que no fue un error? Podría hacerlo... solo que no sé cómo... no sé cómo hacerla entender que no fue lo que quise decir, quizá sí, pero no en ese contexto.

Cuando salió ni siquiera me miro, agarro un bolso que esta sobre su cama y salió, volvía a decir algo que no escuche bien. Cerró la puerta con delicadeza, como si no quisiera irse, pero tuviera que hacerlo para no explotar y lastimarme. Intente ver a donde iba abriendo un poco la puerta y observe que entro a uno de los salones de arte, me imagino que para sacarse todo lo que paso de la cabeza y distraerse, pero no podía dejarla ir, hacerlo ahora sería como deshacerse de una parte de mí, pasamos por eso y ahora... ¿Qué se vaya? No podía permitirlo, no podía. Paso un tiempo hasta que me di cuenta de que tenía que hacer algo, muy idiota darme cuenta unas horas después, lose, pero me di cuenta, tenía que ir donde ella, porque explicárselo con palabras no sería suficiente.



solo diré que soy tuvo muchos problemas, se están resolviendo por eso escribí. sorry

Un amor inesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora