Una guerra muy extraña

Capítulo 3: Amigos a la fuerza.

Cuando la humanidad había creía que su destino estaba sellado, un milagro en forma de un violento ataque podría cambiar las tornas de esta guerra.

N21 quien atacó a la base EEUU de Hawai fue capturada, y en un extraño giro esta decidió ayudar a la humanidad sin ningún motivo aparente, claro a excepción de dos condiciones.

La primera era que se le otorgará todo el chocolate que el mundo pudiera ofrecerle, es así que Suiza comenzó a la mayor movilización de chocolates a los EEUU, y la segunda que le trajeran al sujeto que la había desafiado y humillado.

No muy lejos de allí un joven soldado era escoltado através de un campo, hacia el interior de unas instalaciones.

José: Y... ¿exactamente que es esta recompensa? -hablándole a los soldados que lo escoltban- y ¿por que tengo que venir a la zona más alejada de la base? -pregunto el confundido recluta-.

Los guardias no le daban mucha información, todo lo que le decían es que seria una gran recompensa la que recibiría por haber detenido a la androide.

Luego de haber caminado al interior de aquel edificio, y recorrer sus largos pasillos, llegaron a una habitación oscura donde los guardias lo empujaron y cerraron la puerta con llave, este enojado y asustado comenzó a cuestionar el por que lo habían traído allí.

José: ¡OIGAN ESPEREN! -dijo este golpeando la puerta repetidamente- no puede ser cierto, primero en mi primer día atacan la base y luego esa loca sin motivo me juro que me mataría de la forma más brutal, y ahora me encierran en este lugar ¿que sigue? -pregunto este a la nada misma-.

???: ¿Quien es esa loca de la que hablas? -hablo una voz através de la oscuridad-.

José salto del susto al saber que no estaba solo, intento ver de quien se trataba pero la oscuridad no le permitía verla, así que comenzó a tocar el aire con la esperanza de que pudiera encontrar la llave de la luz, aunque lo que encontró le haría desear no haberlo hecho...

José: Vamos tiene que estar por aquí -dijo el asustado soldado dando manotazos a la oscuridad- ¡AJA! -dijo este al sentir algo, claro que no era lo que esperaba-.

N21: Sabes me gustaría que me lleven a cenar antes de pasar a segunda base -dijo la androide a mientras esta iluminaba la habitacion-.

El joven quedó pálido al saber de quien se trataba, pero este recuperó su color al saber lo que estaba tocando...

Jose: E-eh eto eh no-nosotros yo -dijo este intentando articular una palabra al saber que estaba tocando uno de los pechos de la androide-.

N21: Otro en tu pocision dejaría de tocarlo ¿no? -dijo esta señalando con su dedo a la mano del recluta-.

José se percató de lo que había hecho y rápidamente colocó sus manos en su espalda...

José: ¡NO ES LO QUE PIENSAS! -dijo el cadete sonrojado- un momento.... ¿que haces aquí? se supone que te estaban abriendo en este momento -dijo el señalando con terror a N21-.

N21: Pff por favor ¿crees que ustedes podían matarme tan fácilmente? -dijo ella sonriendole al soldado- aunque admito que fue divertido ver como se hacían los malos jejeje.

José: entonces.... ¿que quieres?

N21: ayudar -dijo sonriente-.

José: tu... ¡¿QUE!?.

El soldado no podía creer que uno de los monstruos, que tanto sufrimiento habían causado decida traicionar a los suyos y ayudar a la humanidad.

N21: No hacía falta gritar -dijo esta tapándose los oidos-.

José: ¡¿DE QUE MIERDA TRATA ESTO?! ¡PRIMERO NOS ATACAS Y LUEGO QUIERE SER NUESTRA AMIGA! ¡¿QUE CARAJOS?! -gritaba el recluta a todo pulmón-.

N21: Shh -dijo ella tapandole la boca con su cola- escucha puede que te parezca una locura pero es la verdad, además ya hice un buen trato con tus superiores -dijo ella al liberarlo-.

José: Y.... ¿por que nos ayudas?  -dijo el confundido-.

N21: No lo sé supongo que se veían tan patéticos intentando defenderse y me entro la lastima -dijo ella sentándose en una de las sillas de la habitación-.

La joven le hizo una seña para que se siente, el soldado acepto temeroso la invitación de ella.

José: ¿Por que me mandaste a buscar?, ¿quieres vengarte por lo que te hice? -dijo el mientras evitaba el contacto visual-.

N21: No... aunque me engañaste y me tiraste un tanque encima, no busco venganza -dijo ella mirando directamente al soldado-.

José: ¿Entonces?.

N21: Bueno... fuiste el primero por no decir el único humano, en lograr siquiera hacerme algo -dijo ella levantándose de su silla- por eso decidí que podrías serme de ayuda al enfrentarme con los otros.

José: ¿Yo? ¿ayudarte?, algo así como ¿compañeros? -dijo el siguiéndola con la mirada-.

N21: Estaba pensando en algo como...
ama y esclavo -dijo esta guiniandole al soldado-.

Obviamente a él no le gusto como ella lo llamaba, pero esta quizá sería la mejor o única oportunidad de terminar con todo esto...

José: Bien acepto -dijo el de mala gana- pero cambiaremos el tipo de relación que tenemos -refiriéndose a que no le gusta que le digan esclavo-.

N21: Mmm... ¿que tal como perro y dueña? -dijo ella con un brillo en sus ojos-.

José: Eso es exactamente lo mismo -dijo el con una gota de sudor en su cabeza- y que te parece ¿como amigos?.

N21: Nha mejor como cazadora y presa.

José: Eso es peor -dijo este un poco estresado ya por N21- que tal si lo dejamos como dos conocidos que se odian, pero que no matan -dijo este estirando su mano-.

N21:Mmm....... puedo vivir con eso -dijo ella estrechandole su mano -.

Mientras N21 y José formaron ese curioso equipo, una gran presencia observaba todo desde un mundo distante...

???: Parece que encontramos a N21 amiguito. -dijo ella acariciando una especie de ave- sólo espero que no empeore de más la situación.

¿Quien es este ser que vigila a la androide? Y ¿como la conoce?, parece ser que algo más grande que esta guerra esta por acontecer, y dudo mucho que estemos preparados.