Capítulo 11*EDITADO*

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A la mañana siguiente abro mis ojos poco a poco acostumbrandome a la luz, suspiro se que hoy será el último día en que vea a mi familia por algún tiempo, pero no sé si regrese.
Me arreglo peino y tomo mi mochila para desayunar algo ligero. Todos estan dormidos pero ahora ya estan bajo el hechizo entonces no pueden oirme ni verme. Tomo un poco de cereal con leche, cuando veo aparecer a Edgar.

Me mira desayunar-¿Lista? vámonos.-parece que tiene prisa.

Intento parecer lo más calmada posible.-Sí.-tomo la mochila y miro mi casa por última vez.

Salimos y veo un auto negro donde adentro se encuentra Brus y Arthur.

-Buenos días-me saluda amablemente el señor Arthur desde el asiento del acompañante.

-Buenos-le contesto.

-Soy Arthur, brujo blanco es un gusto.-me extiende la mano para saludar.

-Soy Wendy.-estrechamos manos intercambiando sonrisas.

En el trayecto todos van callados.

-Por cierto, ¿a dónde vamos exactamente?.-pregunto rompiendo el silencio.

-A una cueva de reforzamiento.

-¿Qué?....¿cueva?. ¿No íbamos a recoger a los demás?.-me indigno, eso era lo que había dicho Edgar.

-Así es pero primero necesitamos un lugar seguro, donde podremos dormir.-asegura el señor Brus.

Fueron casi dos horas de viaje, la mayoría me dormí pero aún así fue pesado. Llegamos a un bosque verde y muy vivo hay montañas de todos los tamaños, es un paisaje inigualable.

-¡Es hermoso!-gritó. En realidad es más que eso, todo se ve tan explorable, tan.....natural.

-Así es pero aún hay que caminar hasta la cueva.-dice Edgar cerrando la puerta del auto.

Caminamos algo lento, ya que los dos brujos no pueden ir tan rápido. Edgar se aproxima a mi lado.

-Oye, no estes triste será divertido.-lo dice como si fueran vacaciones.

No lo culpo por querer levantarme el ánimo.-¿Eso crees? Pelear contra una bruja demente, el gobierno y rescatar a los demás elegidos, ¿eso es divertido?-La verdad es que si me parece interesante este viaje pero quiero jugar con el asunto.

-Si, bueno te sorprendería las cosas que podemos encontrar en viajes como estos, es más, es casi como una misión.-sonríe-.....¡Mira!-señala una roca gigante que hay en frente.

-¿Qué es eso?.

-La cueva..¡dah!.

Pongo cara extraña-Está muy chiquita para ser una....-respondo intentando encontrarle forma.

Cuando los brujos la ven caminan un poco más rápido, tocandola con las manos, este viaje se pone muy extraño.

-Si, es ésta.-Él señor brus no deja de tocarla, como si nunca hubiera visto una.

-Será mejor que se aparten.-Arthur también la toca.

Edgar me toma del brazo jalandome hacia atrás para más seguridad.

-¿Que pretenden?-estoy confundida.

-Ya verás.

Los dos brujos comienzan a decir unas palabras raras y sale de sus manos una luz dorada. Hay un pequeño temblor y la roca se eleva haciendose una montaña ahora.

Mi boca forma una "O" esto parece ser una broma.

-Te dije que era una cueva.-Edgar pone una mano en mi hombro.-¡Vamos! Escalemos.

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