Me duele tu recuerdo

Emociones

El silencio era incómodo tampoco es como que quiera entablar una conversación con el mientras menor fuera el contacto mejor para mí, caminábamos uno a lado del otro al final decidimos que teníamos que empezar con las clases desde ese día a fin de cuentas solo iban a ser unos días después de eso todo esto terminaría ¿ Cierto?.
Trataba de distraerme observando las calles jamás había venido para el otro lado de de Tokyo podía observar que era un lugar donde se veía mansiones con enormes jardines en pocas palabras era una zona de ricos.
Y de verdad que estaba tratando de evitar toda relación con Sasuke pero podía sentir su penetrante mirada.
— oyes tu, que tengo  cara de chango que no dejas de verme — dije nervioso, el sentir su intensa mirada sobre mi hacia que pusiera nervioso.
— valla dobe hasta que dices algo inteligente, es bueno que sepas al menos, lo admitas— dijo con esa sonrisa que odio tanto entre arrogante y sinica
— mejor callate teme, ¿falta mucho para llegar?.
— que acaso la princesa ya se cansó
— si serás idiota
— a quien le dices idiota
— valla aparte de idiota tonto— conteste con una sonrisa.
— dobe no quieras jugar conmigo por te aseguro que te vas a quemar.
Todo pasó tan rápido, cuando menos me di cuenta ya tenía su rostro a escasos centímetros de mio. Tenía que admitir que era apuesto, pero que demonios estoy pensando acaso estoy volviendome loco si eso debe pasar.
Pero antes de que pudiera seguir peleando con mi yo interno sentí su aliento sobre mi rostro olía a menta.
— ¿ Que acaso te comió la lengua el ratón? Dobe o será que ¿ Te estás enamorando de mi? Pero sabes no te culparía después de todo es lo que toda persona quiere.
—  tu  y tu enorme ego no caben en estas enormes calles, no esperaba menos de ti teme tan modesto como siempre pero sabes — solo avance unos cuantos centímetros para que viera que no me importaba si cercanía aunque por dentro estuviera con un manejo de nerviosos, la distancia era casi nula — quizás el que termine emorandose sea otro— le dije con una sonrisa y al final para ponerle más sabor al asunto le guiñe un ojo.
Su expresión no tenía preció sus ojos delataron sorpresa y su boca incredulidad, aún cuando solo fueron unos segundos pues rápidamente se compuso.

Este dobe vaya que me  tomo con la guardia baja no crei que reaccionaria de esa manera, algo dentro de mi se removió no sabía que era y tampoco quería ponerle mucha atención, lo que si puedo decir es que me excito esa manera tan atraviesa y atrevida, después de todo quizás si pueda tenerlo para un rato de diversión.
Veamos dobe quién es quién quema a quien.

— dobe ya llegamos — dijo parándose enfrente de un gran portón y para rematar es la mansión más grande y completamente diferente a todas las demás, las demás se quedaban pequeñas a comparación de esta.

— dobe si no cierras la boca se te va meter una mosca — dijo curvando sus labios pero podía ver la diversión en sus ojos ese idiota quería pelea.
— cállate teme que acaso no tienes algo mejor que hacer que estarme molestando — dijo frunciendo el ceño
— ya dobe solo apúrate que tengo cosas que hacer y no tengo todo el día para perderlo contigo— dijo caminando entre  el enorme jardín.
— y tu crees que yo quiero perder mi tiempo a tu lado, yo también tengo mejores cosas que hacer que estarlo perdiendo a la de un teme cómo tu.
— así como que dobe como echarte a dormir perdiendo todo tu tiempo
— jodete teme

La mansión es realmente hermosa la entrada era enorme para ser honesto parecía como un lugar encantado llena de enormes árboles de todos los tamaños y de diferente clase al igual las plantas había flores que jamás había visto en mi vida era realmente hermoso a unos cuantos metros podía ver la enorme mansión color blanco todo junto parecía una obra de arte.
Jamás pensé pisar un lugar como esté el maldito teme vive en gloria.
El interior de la casa a mi parecer parecía un museo obras de arte colgadas por la pared reliquias en cada rincón no quiero ni imaginarme que pasaria si por accidente llegó a arruinar algo, de tan solo pensarlo un escalofrío me recorría mi espina dorsal.