Black hole [Khan x Tony]

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La primera vez que noto los ligeros cambios en el ambiente que le rodeaban decidió ignorarlos, quizás eran percepciones incorrectas, pero la recurrencia de ellos lo hicieron analizar seriamente esa opción.

La primera prueba fueron las miradas indiscretas que Tony le lanzaba mientras trabajaban en el laboratorio, tan rápidas y fugaces qué, de no ser por la intensidad de ellas estaba seguro que pasarían desapercibidas. Los roces delicados cuando compartían herramientas fueron la razón numero dos que encendieron sus alarmas, las manos de Tony se mantenían un par de segundos antes de retirarse rápidamente, ignorando el hecho de que sus acciones eran a propósito.

Los coqueteos eran innecesarios para alguien cómo él, pero parecía que Stark no estaba consiente de eso.

Esa tarde en particular se encontraban recreando algunos de los prototipos para el motor de Warp cuando Tony terminó en brazos de Khan (o algo así). Un mal calculo lo derribó de la escalera en donde se encontraba de pie y su cuerpo se dejó caer sin oponer resistencia. El super humano detuvo su caída, pero la fuerza de gravedad fue suficiente para hacerlo caer con las piernas ligeramente abiertas, aun sosteniendo en sus brazos al hombre de cabellos castaños. La reacción de Tony fue peculiar, a pesar de contrastar con los hechos antes mencionados; se levantó de golpe con la cara color granate intenso y huyó como cobarde por la puerta del laboratorio.

Khan no esperaba un "gracias", ni mucho menos, se levantó con la misma parsimonia, pero elegancia que le caracterizaba y limpió sus pantalones oscuros diligentemente. Continuo con ayuda de la asistente o AI de Tony Stark quién le recito los componentes que necesitaba para recrear el prototipo que estaba realizando.

Durante toda esa tarde-noche productiva el hombre de ojos color ámbar no regresó. Negándose a parecer preocupado, pero muy consciente de que ese humano debería estar ayudándole para aprovechar tiempos y dejar su creación en funcionamiento en un tiempo ideal preguntó por su paradero a la voz omnipotente que le acompañaba.

—El jefe se encuentra en la cocina, al parecer teniendo una discusión con el señor Rogers.

Khan frunció el ceño sin comprender a que se debía ese intercambio verbal, pero ignoró la parte de su cerebro que le exigió averiguar quién era el que estaba interfiriendo con su trabajo directamente. Se mantuvo programando comandos y revisando que los motores dentro de la simulación funcionaran de manera óptima.

Y aunque quisiera aparecer para exigir explicaciones de tal situación sería un peligro total. Tony lo había limitado a la zona este del compuesto y a los laboratorios privados para evitar algún confrontamiento directo con alguno de sus compañeros de trabajo. Khan no estaba interesado en relacionarse con ningún ser humano de baja categoría, sus ambiciones eran claras, aunque no iba a negar que sus participaciones dentro del combate activo (una forma de proteger a Tony) fueron de gran ayuda para el grupo de héroes.

Una hora más pasó y su paciencia se fue al carajo, movió las manos rápidamente para guardar los avances logrados por esa tarde. Soltó un suspiro de frustración y sintió que su entrecejo se contraía, mantener su temperamento era difícil. Culpaba totalmente a Tony Stark y su falta de compromiso hacía los proyectos en los que acordaba participar.

—El jefe se encuentra en el elevador.

La voz de la AI lo detuvo cuando estaba a punto de salir del laboratorio y tomar a Stark de la muñeca importándole poco alertar a sus compañeros de vivienda. Para todos ellos sería un extraño peligroso (muy peligroso) que estaba invadiendo propiedad privada y... se desataría una ducha, de eso estaba más que seguro.

Se quedó de pie frente al elevador esperando a que las puertas se abrieran y dejaran ver un cuerpo más pequeño y compacto que llevaba en sus manos una charola con diversos alimentos demasiado bonitos, pero innecesarios.