- Oye papá...
— ¿Qué sucede?
— ¿A dónde iras esta noche?
— Por ahí...
— Bueno — dijo sin insistir en nada — Solo ten cuidado. Y no vuelvas a beber si conduces ¿eh?
— Descuida, hijo... Ya no lo haré.
Y en un abrir y cerrar de ojos, volví a quedar solo.
Lloré hasta que me logré calmar, decidí no salir, y quedarme en casa viendo aquellos videos caseros en los que ambos la pasábamos bien juntos. En esos tiempos, en los que él seguía con vida.
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50 historias que te erizarán la piel
Mystery / Thriller50 historias tenebrosas para leer bajo la luz de un linterna mientras la oscuridad te rodea