La tarde pasó y ChanYeol no optó por alejarse ni diez minutos de ella y hablar conmigo.
Se alejaron y se fueron a sentar a los bordes de la arena de la playa.
Yo solo me dediqué a mirarles un instante y luego fui a ducharme.Me encerré cuarenta y cinco minutos en la bañera de mi correspondiente habitación y me coloqué un vestido que no me hiciese ver tan gorda la panza que traigo y puesto, bajé a sentarme en la terraza junto a Luhan, quien estaba algo nervioso y preocupado.
-Hey, Lu.- me acerqué de manera serena a su persona.
- _______, que linda ropa.-
-¿Qué tienes?- Arqueé una ceja y me senté junto a él. -Xiao Luhan, mirame a los ojos.-
-¡No hagas eso!- sabe que noté su cambio de aura y no puede evitarlo, soy una mujer empoderada, reí para mi misma.
-¿Tienes algo?- acaricié sus cabellos.
-Sam...es qué, mmh.- ultimamente Sam no me estaba congeniando mucho, Luhan estaba bastante deprimido cada que hablaba con ella, me molestaba aquello.
-Sam qué.- dije.
-Siento que ya no le gusto..., digo, ahora le llamé para saber como iba todo y me dijo "Tengo cosas mucho más importantes que hacer, te llamo cuando tenga tiempo." Y cortó.- Algo anda mal con ella, antes no era así de fríbola.
-Mmh..., algo no me está cuadrando.- retuve a pensar bien todo pero no lograba concentrarme bien. -Bueno, al menos me tienes a mí, a Sehun que te adora con su alma completa. No te dejaremos caer en ningún momento, promesa.- dije para animarle y me levanté al ver a ChanYeol acercarse.
-Bebé, hablemos. ¿Quieres?- me dijo mientras jugueteaba con el brasalete compartido que le regalé hace un tiempo.
-Sí, claro, vamos.- extendí mi mano y la tomó.
Nos encaminamos a la que procuraba ser nuestra habitación y nos sentamos en la cama al llegar. Logré ver en sus ojos la pena, desesperación y temor mezclados. ¿Qué está pasando hoy?
ChanYeol tragaba saliva, tocía y rascaba su nuca junto con cada mirada desviada, evitando mis ojos.
-Dime que tienes, asustas.- aclaré mi garganta y me senté en la silla que había frente a la cama. Para poder mirarle a los ojos sin excusa.
-Hay....hay algo que debo decirte.-
-Pues dímelo ya.- insistí, no estaba para suspensos, menos con esa chica presente.
-Yo...¡No es fácil! ¿sí?- cubrió su rostro con ambas manos y sentía como unas pequeñas lagrimas se soltaron de la curva de sus ojos. -La chica...es Seulgi, es la que una vez te miró mal en los baños de la empresa...es....uhm.
-¿Es qué? Demonios ChanYeol.- descubriendo que así se llamaba y que era la misma chica que me miró con un desprecio tan vulnerable en la empresa, sentí asco, no solo por aquellas situaciones cruzadas conmigo, si no, porque se bien de ella que es una prostituta "pagada." Y no lo digo por juzgosa, lo digo porque en cada plataforma social se habla de aquello, que Seulgi cogió con Equis persona y no me gusta ello, no me gusta que ella llegue a ese punto de vulnerabilidad cuando tiene la capacidad y talento de ser exitosa sin necesidad de hacer cosas....sucias.
-Ella...- ChanYeol insistía en no querer decirme nada.
-¡Cielos, ChanYeol! Me dices tú o la busco para consultarle que demonios me quieres decir, porque seguro hasta ella lo sabe.- solté molesta.
-Ella también es la chica con la que te fui infiel una vez.- soltó de golpe, mordiendo su labio ante la mísera culpa.
En ese momento sentí mi corazón ser rasguñado por las espinas de cada roza que el alguna vez me regaló.
-¿Qué...?- me levanté de mi silla, alejándome del perimetro de cercanía que gozabamos en ese entonces.
-T-te puedo explicar...- se levantó, temblando como si lo hubiesen regañado.
-¿Qué vas a explicar..? ¿Lo poco suficiente que te fui...?-
-¡No digas eso!- insistía con el mar de lágrimas en sus ojos. -¡Fue una estupidez! ¡Lo admito! Pero...Kai hizo la despedida de solteros y...-
-Fue antes...el día antes...-puse mi mano en la frente, suspirando de manera tensa.
-Sientate, cielo...puede pasarle algo a nuestro bebé.- se estiró a tomar mi mano pero me alejé abruptamente.
-¿Ahora te importa el bebé? ¡Ahora!- insistí sin importar que palabra saliese de mi boca, estaba dolida, estaba a punto de quebrarme.
-¡Siempre me importaron!-
-¡No seas mentiroso! ¡De lo contrario no andarías arreglando cuentas con esa zorra!- quise cubrirme la boca por haber insultado a alguien quien no conocía, pero era mi pareja...era a mí a la que le fueron infiel... a una gorda embarazada.
-¡Kai la llevó! Kai...Kai llevó chicas, cuando le pedí que no lo hiciese, Kai llevó muchos licores y te juro...te juro que no sorbí más de dos copas.- suspiró bajando la mirada.- Luego...Kai me drogó con algo y comencé a ver todo borroso, luego la tuve encima de mí y ya no me di cuenta cuando....- cerró su boca, estallando en un silencioso llanto.
-¡Pero lo hiciste, demonios, lo hiciste!- golpeé la pared y me afirmé en ella. -¿Por qué está aquí?-
-Días después, ella me buscó, me dijo que si no quería que tu y mi bebé sufrieran...debía pagarle por cada supuesta noche que pasamos juntos. Cosa que es mentira- tomó su celular y me enseñó su ultima conversación, a lo que mis ojos llamarían extorción. -Conversaciones así son las que ha buscado conmigo durante estos ultimos dos a tres meses. Ha exigido dinero, amenazandome con decirte toda la "verdad."-
-¿Qué verdad?- rodeé mis ojos.
-Quería decirte que yo te fui infiel desde el primer día de casados, que la embaracé y la obligué a abortar, que siempre tuviste novio compartido y no te diste cuenta.- cubrió su rostro y negó.- Aun...aun que no me creas, eso no es cierto...fue una maldita vez y Luhan lo sabe.-
-¿Lu...?- Luhan sabía...
-Perdóname...yo...- volvió a llorar.- Yo no quería perder a mi familia por una estupidez...no...no quería perderte. ¡Perdóname! -cayó al suelo, llorando.
Por mucho que quisiese ir y abrazarle, no podía, mi corazón estaba dañado y debía de estabilizarme. Salí de la habitación en busca de Luhan, habían cuentas por arreglar con el y con aquella chica.
Ya nadie me vería la cara de tonta.
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-Ámame aun más, Idiota.- //2da temporada de Enamorado de la Nerd.//
FanfictionEsto continúa. Cosas pasarán... Quizás buenas... O malas. Pero, el amor. ¿Seguirá Allí?