Hoseok suspiró largo. Había estado teniendo un dolorcito a un costado de su vientre, pero ya había ido al doctor. Él dijo que, en su condición era "normal" solo muchas cosas podían pasar. Al parecer todavía no se libraba de un embarazo riesgoso como todos habían pensado.
Jimin entró a la habitación con una sonrisa. Hoseok al mirarlo enseguida sonrió mientras lo llamaba. El chico tomó lugar en la cama, dirigiendo sus manitas al gran vientre de su hyung.
—¿Puedes hacerlo otra vez? —preguntó—. No ha parado de moverse y tu voz siempre lo tranquiliza —sonrió cansado.
Jimin asintió feliz. Pronto comenzó a cantar una canción de cuna, su voz lograba calmar al pequeño inquieto, incluso a Hoseok. El mayor estaba sufriendo, estaba casi en la recta final de su embarazo y a pesar de saber que su embarazo era riesgoso había tomado ese riesgo por su familia y por el amor que le tenía a su bebé. Desde el primer mes supo que algo podría salir mal pero no le importó, traería a su niño al mundo y serían felices porque lo sentía, en su pecho sentía que lo lograrían. Su bebé no moriría como los tres doctores diferentes le dijeron. La esperanza nunca moría, así que cada vez estaba más entusiasmado por su pequeño solecito.
Jimin paró de cantar encontrándose con un Hoseok dormido, eso quería decir que el pequeño también estaba descansando. Sonrió un poco para levantarse de la cama y arropar al mayor antes de salir de la habitación sin hacer ruido alguno.
La puerta principal sonó, Jimin escuchó las llaves siendo dejadas en algún lugar en la sala para después divisar al mayor llegando a casa. Sus ojos demostraban cansancio y claro que lo estaba, él también la tenía difícil, se estaba exigiendo demasiado para poder tener una gran cantidad de dinero si algo salía mal (que esperaba que no fuera así) pero si pasaba con ese dinero podía salvar la vida de su bebé porque a pesar de que Hoseok en las noches lo envolvía en sus brazos y le susurraba que todo saldría bien, algo dentro de él le decía que todo podía pasar y era mejor estar preparado.
Jimin le sonrió un poco. Estaba muy triste por lo que sucedía a su alrededor, quería darle menos trabajo a Yoongi, él ya hacía mucho con salir de casa desde antes que el sol saliera y que regresara hasta altas horas de la noche. También lo quería hacer menos pesado para Hoseok, estar solo en casa con casi ocho meses encima y con un embarazo riesgoso era muy preocupante. Jimin los quería, a los dos y no le gustaba verlos mal, mucho menos cuando la mayor bendición en sus vidas estaba por llegar.
—¿Quiere comer, hyung? Hobi hyung se quedó dormido, nuevamente el bebé se mueve y le duele —hizo puchero—. Preparé la comida, también arreglé el cuarto del bebé y lavé algunas ropitas para su ya muy esperado día —sonrió.
—Muchas gracias, pequeño —sonrió—. Ya hiciste mucho, ve a casa y descansa, le debes unas disculpas a Namjoon ¿Lo recuerdas? Ya habíamos hablado de esto. Si algo pasa te llamaré, pero desde ahora puedo cuidar de ellos dos.
—¿Está seguro? Lo noto cansado, no quiero dejarlos ahora que ambos lo están —hizo puchero nuevamente.
—Cariño, estoy cansado, pero cuando se trata de mi novio y bebé puedo darle la vuelta al mundo corriendo sin sentir ese cansancio. Muchas gracias por todo lo que haces por nosotros.
—Bien... Iré a casa, hablaré con Nam y trataré de explicarle lo que sucede con Hobi hyung.
—No, Jimin, no lo hagas, Hoseok prefiere mantener a su mejor amigo alejado, sabes cómo es Namjoon, se preocupará más de la cuenta y no queremos molestar a más personas.
—No diré nada hyung. Iré a casa, cuide muy bien de sus bebés. Dejé la comida en la estufa, hice su platillo favorito, disfrútelo mucho y si se siente más cansado que me llame y yo estaré aquí, no importa la hora —sonrió.
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𝐵𝑎𝑛𝑐𝑜 𝑑𝑒 𝐸𝑠𝑝𝑒𝑟𝑚𝑎 [Namjin] #1
Fanfiction❥ Primera temporada. ❝Seokjin deseaba con todo su corazón un bebé, estaba tan solo, no servía para el amor, era un hecho. Cada vez envejecía más, dentro de unos pocos años tendría menos posibilidades de poder embarazarse. Había escuchado sobre las...