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Querer bonito.

[Jimin]

-Min, por favor, déjame solo.

-No po Jimin, vine pa acá pa arreglar nuestras cosas. Estoy chato de tener que aguantarme todo.

-Habla todo lo que querai con cualquier otro, pero yo me voy.

-¡¿Por qué mierda me tratai así?! Busco cada momento bueno pa hablarte y tú solo me tratai mal.

-Porque harto mal me hace pensar en ti po Yoongi.

Se quedó callao.

-Jimin, ven, siéntate- caminé al borde de la calle -No vai a irte hasta que hablemos bien las cosas- se acercó un poco a mí y me miró pero evité mirarlo de vuelta.

-Habla tú primero.

-Ya, me gustai- se quedó callado de nuevo.

-Chucha, media wea, tú me gustaste por más de dos años, pa que cachí como es.

-Yo de verdad que no recuerdo esa confesión, nunca quise hacerte sentir mal, me podí ver como un weon antipático y pesao pero no voy a herir a alguien que se preocupa por mí, porque te preocupabai por mí, ¿No?

Asentí despacio. Y adivinen quienes se unieron, las mismas lágrimas de siempre.

-Quiero que me di una oportunidad, solo una. Quiero demostrarte que te puedo querer bonito. Deja la inseguridad que te hace ser tan arisco.

-Soy inseguro, ya, ¿Y?- me puse a la defensiva -Igual tus acciones me dan pa desconfiar po, hay hecho tantas weas.

-Jimin, mírame, mírame a los ojos y dime que ya no me querí ver. Dímelo y me voy, de verdad. Me alejo, te dejo hacer tu vida tranquilo. En tu interior sabí que no es verdad, sino no estaríai llorando o siquiera escuchando una palabra de lo que digo- me tomó de las mejillas.

Lo miré a los ojos, quise abrir la boca, de verdad, pero su cara de no haber dormido nada anoche me dio pena. Me hizo acordar el sentimiento de que no te correspondan.

Pucha.

Trata a los demás como te gustaría que te traten, ¿No?

-Cuéntame lo que pasó con el Jin.

-¿Todo?

-Sí.

-Fuera de lo que ya sabes y como creo que te dije en estado de inconsciencia, me puse celoso porque estabai cerca del Namweon, siempre. Quise hacer algo para llamar tu atención pero tú cachai, lógica de cabro chico de 7.

Lo miré con los ojos entrecerrados.

-Te toca a ti hablarme ahora- me dijo con los cachetes rojos.

-Tú me gustabai tanto, mucho. Cuando al fin vi la oportunidad te portaste como las weas conmigo, lo del viaje, todo se sumó y al final me terminaste convirtiendo en un weon inseguro que no sabe que wea pensar sobre su propio mejor amigo, casi hermano. Me hiciste mal, Yoongi.

-Por eso estoy aquí, esas no eran mis intenciones, perdóname. Entiendo si no me querí ver, pero eso no significa que me voy a rendir tan fácilmente.

-Me engañaste para reunirme contigo, porque me imagino que el mensaje de "Ven, necesitamos hablar del Taehyung" no era del Hoseok, y ahora querí una oportunidad así de fácil- hice sonar los dedos -que exigente erí, Min Yoongi.

-¿Podría usted dejarme cortejarlo?- puso su mirada coqueta.

-Me temo que debo considerarlo mejor- le estaba siguiendo el juego, él sí que era mi maldita debilidad.

-¿Un beso aceleraría el proceso?

Dijo eso y se fue acercando lentamente, de alguna forma sentí que me estaba pidiendo permiso. Cerré los ojos y esa fue la señal de ataque.

Posó suavemente sus labios en los míos y sentí como que me derretía.

Primero fue un simple toque pero cuando los separó un poco me alteré y sentí que toda la barrera de protección que construí se vino abajo.

Traté de copiar lo que hizo pero se alejó de inmediato.

Entré en desesperación, no le había gustado, tengo mal aliento, se arrepintió al último momento, era todo una broma. Estaba listo para salir corriendo cuando me tomó la mano y apuntó a una señora con un coche y una niña pequeña al otro lado de la calle.

Calmé mis sentidos y sentí que respiraba de nuevo.

-Bueno, quiero un completo, ¿Vámonos?- se paró y no soltó mi mano hasta que yo estuviera de pie también.

Llamamos al Hoseok y nos dio la dirección de donde estaba. Cuando llegamos vimos al Nam y a él sampandose tremendo sandwich

-Oh, cabros, pidanse algo po- dijo el Nam y nos hicieron espacio en la mesa.

yapo, que estí bien | yoonmin chilensis Donde viven las historias. Descúbrelo ahora