yapo, que estí bien | yoonmin chilensis

31 (🌺)

Víctima.

Le haría caso al Jin y hablaría con el innombrable cuando me sintiera mejor.

Estoy viniendo al liceo solo porque sí. No prestó atención ni me interesa estar aquí.

Vi que el Namjoon se asomó en la ventana. Me acerqué a él y lo saludé.

-¿Pasó algo?

-Jimin, hola, ¿Está el Jin? Necesito hablar con él.

-No sé donde se fue, no me dijo.

-Ya gracias, ¿Y que onda tú?, ¿Cómo estai? No conversamos de hace rato.

-Estoy... Bien. Un poco cansado pero bien.

Le sonreí y me sonrió, sonó el timbre, se despidió de mí con un beso en la cabeza y se fue.

-Oh weon, que chucha con los fletos hoy día- Me di vuelta y estaba el Jackson. ¿Qué wea hacía acá?- Primero abajo la pareja de repitentes culiaos y ahora esto. Vayan a vestirse de minas mejor.

No sé qué está pasando, no quiero pensar nada, no quiero siquiera funcionar. Me quedé ahí, inmóvil. No por lo que me dijo el Jackson, esa wea no me importa, total, el weon es más gay que todos nosotros juntos. Es lo segundo que dijo lo que me dejó mal.

Entró el Yoongi y nuestros ojos se cruzaron, obvio que los míos ya estaban todos mojaos.

-Oe, ¿Qué wea le dijiste?

-Na po, la pura verdad, y no te vengai a hacer el machito aquí conmigo si te estái comiendo con este otro weon- apuntó al Jin.

El Yoongi explotaría en cualquier momento. Se dio vuelta y le pego un sólo combo en el hocico al weon.

El Jin me miró y salí de la sala. Justo la profe iba entrando pero no me dijo nada.

-Jimin, Jimin espérame. No es verdad.

Paré en seco y me di vuelta pa confrotarlo.

-¿Acaso creí que soy imbécil? Puedo ser muy weon a veces pero también me doy cuenta de las cosas, Jin. Claaaro, te gusta el Yoongi. Sabí que no se hacen promesas que no vai a cumplir- vi como negó con la cabeza y se tapaba los ojos -¿Sabís qué? Sí, soy el rey de los weones. Tú y el Yoongi, bacán- me dio el instinto de sonreír y me fui al baño.

Me encerré en un cubículo y quise llorar pero ya casi ni tenía lágrimas.

En la puerta del baño habían caleta de weas escritas. Me pasé la mano por el pelo y traté de calmarme.

"Yoongi, te amooooo washito ricoo"

Me quedé callao cuando sentí unos pasos.

-Jimin, no de nuevo. Hablemos, no te puedes dejar llevar por comentarios que hacen weones estupidos.

-No quiero hablar contigo.

-Dale, no te debo ninguna explicación a ti, ¿Te acordai lo que me dijiste en tu casa? ¿Que no ibai a ser cuático? Estái siendo muy dramático ahora y por una wea que ni siquiera es verdad. Yo trato de cuidarte lo más que puedo, ¿Sabís?- escuché como su voz se rompía -Después de perder a mi mamá, tú eres el único al que amo, tú y tu mamá son una familia pa mí y no soportaría perderte y menos por una wea así.

-Yo...- no me dejó continuar.

-¿En serio me creís capaz de una wea así? Sé que el Yoongi te tiene mal y la desconfianza abunda pero tienes que dejar de ser tan aweonao por un solo minuto y pensar en todo el daño que estái haciendo con tu actitud culia de víctima.

Sentí sus pasos cuando se iba.

Salí hecho un peo.

-Espérate. Ando muy paranoico, lo siento si te hice sentir mal. La herida aún no cicatriza, ¿Cachai?

-Eso debiste haberme dicho la primera vez.

-Lo sé, perdón.

-Me hiciste sentir muy mal con todas tus dudas. Me extraña que no podai confiar en mí. Yo te he contado todos mis problemas, siempre, y aún así no puedes creer que no soy capaz de traicionarte a conciencia- sus ojos se sentían como clavos sobre mí.

-Odiame si querí, yo igual estoy empezando a caerme mal. No quiero seguir atrapado en este bucle de no creerte. Si vuelve a pasar podí pegarme o decirle a mi mamá. Lo que más te acomode- a este punto ya no lo podía ni mirar a la cara.

-No es necesario, porque no va a volver a pasar, ¿Cierto?- me dio un abrazo y todo se fue a la mierda.