Capítulo 2

33 0 0
                                    


Todos nos miran fijamente esperando nuestra respuesta. Las chicas están teniendo un debate mental, pero yo siempre había dicho, que si tenía que destruir ese lugar lo haría y con ganas.

- Yo me apunto- digo con un rostro serio, que noto con los adultos se han tensado un poco.

- Ally, ¿estás loca?-  me quedo mirando fijamente- Definitivamente lo estás, has oído todos  estos años las noticias de los torneos imperiales, de como cierran colegios por no hacer aquello que se les ordenó, han llegado hasta atacar a las familias ¿ y aun así quieres meterte en las fauces del lobo?- me cuestiona Lily.

- ¿ No os acordáis de la promesa que hice al aire? Cuando tuviera la oportunidad de destapar el infierno que es el sector V, lo haría de cabeza, y eso es lo que estoy haciendo.

- Pero Allison, ¿tan rápido te has decidido?- me pregunta Cass con temor.

- Sí, y no me haréis cambiar de idea- hago una pausa- si vosotras no queréis, no estáis obligadas.

- ¡Maldita seas, no te voy a dejar sola!- exclama Lils- cuanto te odio.

- Y-yo t-también- dice Cassy temblorosa.

- Bien- digo mirando a los adultos- ¿ que es lo que tenemos que hacer?

- Nos alegra que estéis dispuestas a colaborar- dice Mark- lo que haréis será jugar en el Raimon para limpiar el fútbol, hacer que el fútbol sea como antes y no un deporte corrupto.

- ¿ Y cuando empezamos?

- La semana que viene, ¿por qué preguntas tanto si sabes que la semana que viene empiezas la secundaria, renacuaja?- me contesta con burla Caleb.

- Para mentalizarme y centrarme en lo que voy a hacer

................................................................................................................................................................

Ya ha pasado la semana, la verdad es que ha sido larga. No he parado de ver cosas terribles, sangrepor las paredes, cuerpos y escuchaba voces. Volvía a la normalidad gracias a que Caleb me escuchaba en sueños y me despertaba o intentaba tranquilizarme y que todo volviese a la normalidad cuando esto pasaba.

Bueno, miremos hacia a la actualidad, hoy no he dormido nada, ya que no quería molestar a Caleb y traigo unas ojeras más grandes que las manchas que tiene un panda en los ojos.

Me levanto y voy directa a la ducha, para ver si me despejo un poco, pero no funciona. Con muy mal humor salgo de la ducha, me visto y voy a la cocina a por mi desayuno.

- Buenos días- le digo a Caleb que está tomándose un café mientras mira la  pantalla de su portátil, estará trabajando.

- Buenos días enana- me mira a la cara y su radiante sonrisa la cambia por una cara preocupada- ¿ No has podido dormir hoy tampoco?- niego-  No tuvimos que haberos propuesto eso.

- No te preocupes por eso, hermano.- hago una pausa- En nada se irán, ya verás.

- Espero que así sea, te están torturando mucho.- iba a continuar pero suena el timbre- Me parece que vienen a recogerte.

- Nos vemos luego Cal- cojo mis cosas, le beso la mejilla y salgo, y  veo a las chicas hablando.- Hola.

- Hola Ally- ambas se han querido guardar el comentario de ¿ que te ha pasado? Parece que no hayas dormido en años...

El camino del instituto hasta que llegamos a la puerta.

- Chicas, ¿ listas?-pregunta Liliane asustada. Cassidy y yo asentimos.

Entramos y nos dirigimos al lugar dónde nos habían dicho los adultos que nos encontraremos con Celia para que nos guie con el tío Travis. La vemos hablando con un chico con el pelo lleno de remolinos.

- Hola Celia- saludo- Hola...

-Arion Sherwind - se presenta el majo.

- Ya que estamos todos,, ¿ porqué no vamos al edificio fútbol?- asentimos y vamos al edificio y... WOW nunca había visto nada así.- Ya estamos aquí, bienvenidos al campo del equipo B- veo como le cambia la cara a una de terror así que giro la cabeza y me quedo asombrada.

- ¿ Pero que...?- dicen a la vez Arion y Cassidy.

Es el campo B lleno de humo, todo el equipo en el suelo y un chico con rostro amenazante y burlón, con cabellos oscuros atados en una coleta y  ropa oscura que no tenía ningún rasguño.

Continuará

IEGO| Somos la resistenciaWhere stories live. Discover now