El Perdon.

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-. Y ahí fue el momento del altercado?-. Pregunto curiosa.

-. Fue esa mañana, iba a encontrarme con Poncho en el aeropuerto, nos íbamos olvidando todo el odio que había, pues ya teníamos las suficientes pruebas para meterlos en la cárcel por mucho mucho tiempo, pero en cuanto me despedía llegaron los disparos, Poncho se fue sin mi, pues pensó que no quería irme con el, que no lo amaba-.

-. Y cuando se reencontraron?-.

-.  En el casamiento de unos muy amigos nuestros-.

-. Maite se casó?-.

-. No, Maite y Cristian estaban de novios pero se mataron al tiempo de lo de papá-.

-. Entonces tú otra amiga la pelirroja que era nuestra vecina?-.

-. Si, Dulce y Ucker se casaron-. Aclaro Poncho.

-. Que les gusta comer?-. Habló Marcelo.

-. Nada-. Dijo seca Annie-. Iremos a comer por ahi-.

-. Esta es tu casa Annie, pueden quedarse a dormir si así lo desean-.

-. Nos volveremos a Buenos Aires-.

-. A esta hora no hay vuelos-. Dijo un chavo ingresando, Annie lo fulminó con la mirada. Mientras que Nadia hablo alegremente

-. Amor!!-. Lo beso-. Mira ella es mi hermana Annie mi cuñado Poncho y por allí anda mi-.

-. Bájale dos rayitas mi niña que tú y yo no somos nada-.

-. Annie-. Le regaño Poncho.

-. Que? Es la neta, solo vine por unas dudas pero ya nos marchamos-. Suspiro-. Tenemos muchas cosas que hacer, como volvernos a casa, Dani, amor vamos-.

-. Mami! Quiero quedarme! Los chavos son super chidos aquí!-. Le hizo un pucherito más que tierno-. Me divierto mami-.

Poncho vio la duda en Annie, era el momento de tomar un descanso en cuanto información, su mujer lucia cansada, apoyo suavemente la mano en su cintura.

-. Oye-. Señaló al novio de Nadia.

-. Camilo, mi nombre es Camilo-.

-. Okey, Camilo, como sabes que no hay más vuelos?-.

-. Porque trabajo en el aeropuerto y  estoy aquí porque hay una huelga por mejor salario, hasta mañana por la noche no hay vuelos, solo ingresan, para despegar es sin pasajeros-.

-. Chido no?-. Habló Annie sarcastica-. Nos quedaremos en esta pinche ciudad atrapados con esta.. gente-.

-. Annie vente, daremos una vuelta vale?-.

Sin más salieron afuera, Daniel quien los acompaño hasta la puerta habló con los ojos llorosos.

-. Que pasa mami? Porque no los quiere?-.

-. Mami está cansada mi amor, no es que no los quiera, mira, si tú prefieres puedes quedarte a jugar vale? Mami y yo estaremos aquí afuera-.

El niño sonrió y sin más se metió nuevamente a jugar, mientras que Annie enterraba su rostro en el pecho de Poncho, intentando al fin aclarar su mente, pero nada parecía ayudar, mucho menos el silencio.

-. Que es lo que piensas?-.

-. Que pienso? Pues, un error lo comete cualquiera, y nadie elige de quién enamorarse, fíjate que nosotros no elegimos sentir esto que sentimos tan fuerte, ponte en sus zapatos unos segundos, que es lo que sientes-.

-. No lo sé, no se qué pensaran mis hermanos-.

-. Llama y pregunta, pero déjame decirte primero amor que hay pocas posibilidades de que en la vida todo te salga así chido, ella hizo lo que pudo la neta, entiendo tu dolor, de verás, pero también la entiendo a ella y no debe haber sido nada chido tener que dejarlos tener que dejar a su hijo aquí en otro país solo porque su padre así lo quisieron, mira, supongamos que tú padre hubiera estado en contra de esto, te hubiera dolido? Si, claro que sí, pero el corazón te iba a gritar tan pero tan alto que estés a mi lado que ibas a dejar lo que fuera por sentir y vivir este amor-.

Vueltas de la Vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora