Donde Manda El Corazon. 1

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El viaje hacia la casa de Eva fue en total silencio, Daniel estaba nuevamente dormido, por lo que al llegar, Annie lo fue a recostar.

-. Mami, quedate-. Llorizqueo.

Annie se quedó al lado de su pequeño, su cabeza iba a mil por hora, que debía de hacer? Cómo enfrentar esto? Debía de contárselo a sus hermanos? Debía de llamarlos y decirles? En ese caso como se los diría? No era una noticia muy fácil, no podía simplemente llamarlos y decirles "oigan que creen? Apareció mamá aquí en Argentina y tenemos hermanos, chido no?" O tal vez lo mejor sería al fin olvidar el tema y ya, si de todas maneras no iba a ir a reencontrarse con ella, no le interesaba no le importaba, pos ella les demostró que le valían madres en cuanto se largó con ese tipo y los dejo, solo ellos sabían lo que habían sufrido, solo ellos sabían cuanto les había dolido la ausencia de su madre, Sebastián era el mayor, era demasiado evidente que debió de hacerse el fuerte para que los demás no caigan, Santiago se había largado al alcohol por un buen rato, Gilda sabía acompañarlo en sus noches de rumba, y sabían ambos amanecer durmiendo en plazas en estado más que denigrante, ella había tenido una pequeña depresión de la cual el amor de sus hermanos y su padre la habían sacado adelante, el que más lo sufrió fue Miguel, el pobre lloraba todas las noches y hacia preguntas que nadie sabía responderle, eso desencadenó en un rechazo hacia Julieta, pues los había dejado rotos, había desarmado una pinche familia, les había arrebatado la felicidad, como podía ahorita presentarse así como así? Cómo tenía la cara para enviar a uno de sus hijos? Poco a poco el sueño le fue nublando los pensamientos, hasta que le ganó, y quedó rendida al lado de su hijo.

Poncho se asomó por la puerta, una sonrisa se escapó de el, la ternura lo invadió al ver a sus dos grandes amores en esa cama, entrecerró la puerta y sin más se dirigió hacia la cocina, donde se encontraba su hermana y cuñado preparando un te.

-. Cómo está Zoe?-. Pregunto Poncho.

-. Un poco mejor, ahorita si me vas a decir porque los golpes en tu rostro?-. Poncho hizo un gesto-. Poncho!-.

-. Okey, solo.. no le digas nada a papá y mamá, ya sabes cómo se ponen-.

-. Cuenta-. Insistió su hermana.

-. Sali del vestuario y pos Vi a un charrito de quinta ahí molestando a Annie y ella tenía al bebé durmiendo entiendes?, Me acerque discutimos y nos tomamos a los golpes, Ponce y Gutiérrez salieron por los gritos de Annie y nos separaron solo eso-.

-. Pero, que? Le había robado o algo?-.

-. No-. Miró para todos lados-. Resulta que el güey termino siendo hermano de Annie entiendes?-. Su hermana y su cuñado negaron-. Recuerdas a Julieta? La que era maestra en la secundaria, pos al poco tiempo de irse de Chiapas ella conoció a un tipo y lo último que supieron Annie y sus hermanos fue que estaba en Monterrey-.

-. Y como aparece acá?-. Poncho hizo un gesto de no entender aún-. Pero.. y Annie que piensa?-.

-. No lo sé aún, de echo ella le dice al tipo que le vale madres el y su madre, y se va, el tipo me dijo que Julieta está enferma y que quiere verla-.

-. Tal vez está arrepentida o tal vez quiere explciarle-. Habló Franco.

-. Es la madre, o sea, no lo sé-.

-. Es decisión de Annie, solo de ella, si quiere ir pues la acompañaré pero si no quiere también la apoyare-.

-. Quiero ir-.

Dijo Annie entrando a la cocina, Eva y Franco se quedaron en total silencio, mientras que Poncho se dió vuelta para tenerla frente a frente y rodeo con sus brazos su cintura.

-. Amor, estás segura?-. Annie asintio-. Okey, cuando vos quieras saldremos-. Saco la tarjeta de su bolsillo-. Esta es la dirección y el número de telefono-.

-. Okey-. Suspiro-. Es aquí mismo?-. Eva se asomó y chasqueo la lengua negando-. Y donde es?-.

-. Santa Rosa, La Pampa, hay vuelos todo el tiempo, se tarda solo una hora más o menos, nosotros fuimos una vez para una tesis, pero en fin, es alli-.

-. Tomaremos un avión?-. Poncho vio a Annie.

-. Así parece-.

Dijo llendose a acomodar su cartera y el bolso cambiador del niño, en cuestión de minutos ambos estaban sobre un taxi llendo hacia el aeropuerto de Ezeiza desde donde saldrían, aún sin dar declaraciones a los medios, pasaron junto al niño y se subieron al avión luego de los controles normales. El avión comenzó a moverse.

-. Si deseas así, te dejare sola, me iré por allí con el niño y hablaras tu amor, es que no quiero que el niño se confunda-.

-. Cómo quieras aunque la neta es que necesitaré de ti entiendes?-.

-. Entonces allí estare-.

No volvieron a hablar más del tema, solo hasta el momento en el que tomaron el taxi y vieron como éste los dirigía hacia la casa. Los nervios de Annie se comenzaron a notar.. pero lograba tranquilizarse con solo tener la mano de Poncho sobre la suya.

-. Aquí es-. Dijo Annie bajando junto con el pequeño que acababa de despertarse.

-. Donde estamos mami?-.

-. Vinimos a hablar con unas personas y luego nos vamos a la casa de la tía Eva-.

El niño asintió mientras que Poncho se acercó a tocar timbre, se oyeron unos pasos y en cuanto la puerta se abrió Jesús apareció detrás de ella.

-. Anahí, has venido-. Annie no dijo nada-. Pasa, la familia está reunida-.

Tímidamente y en silencio, Annie y Poncho pasaron por un Hall hasta el comedor, allí se encontraban varios pero solo una señora algo avejentada de aquel recuerdo que Annie tenía en su mente, sobresaltaba de allí, quien a paso lento se acercó a Annie para acariciarle pero está la detuvo antes de tiempo.

-. Si he venido aquí ha Sido a hablar, nada de caricias vale?-.

Se ve que a la mujer le afecto ese frío comentario de Annie, por lo que le hizo señas para que se siente, al hacerlo, se ubicó cerca de ellos y comenzo.

-. Se que hace tiempo no hablamos, pero déjame decirte que he pensado muchísimo en ustedes, en como fui capaz, y la verdad no me lo perdono-.

-. Tampoco yo no te aflijas-. Dijo irónica.

-. Lo sé, pero si has venido aquí es porque-.

-. Es pura curiosidad -. La interrumpio-. Es para sacarme años de dudas-.

-. Quieres saber porque los deje? Resulta que antes de casarme con tu padre, antes de si quiera conocerlo, me enamore, de el-. Señaló a un hombre algo mayor que ella, quien la tomaba de la mano-. Marcelo había ido de vacaciones a Jalisco y yo quedé perdidamente enamorada de él, nos acostamos y pues, quedé embarazada-.

-. No manches! Me dices que Sebas?!-. Dijo en medio de la sorpresa.

-. No Annie! No, Jesús!-. Señaló al hombre que la había encontrado-. Annie, mis padres me prohibieron casarme con un extranjero, por lo que solo me pidieron que me casé con mi eterno amigo, German lo sabía todo, menos el embarazo y se lo oculte, jamás le dije de la existencia de Jesús, por lo que cuando nació, aún no estabamos casados, el creyó que habiamos venido de vacaciones a la Argentina, pero en realidad vine a dejar a mi niño aquí, con su padre, entiendes?-.

-. Lo abandonaste? Cómo a nosotros?-. Le dijo Annie con bronca.

-. Escucha, escucha.. lo deje aquí con su padre, debía de casarme con Germán para que mis padres no se sientan avergonzados, el sabía que era así, pero me amaba tanto que decidió sacrificarse, luego, pues mi padre pidió nietos por lo que ustedes nacieron, y cuando mi padre murió, ya no tenía nada que ocultar por lo que simplemente saque un pasaje aqui y me vine con Marcelo, el realmente fue el amor de mi vida, y aunque tú padre me suplico ya no pude contener mis ganas de estar aquí-. Se hizo varios minutos de silencio todos procesaban la información-. Annie, jamás quise lastimar a nadie, solo... Solo hice lo que el corazón me mandaba-.

Vueltas de la Vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora