>Parte ~2~<

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Jungkook caminaba cabizbajo por el cementerio, sintiendo una presión horrible contra su corazón.

Encontró la tumba de Yugyeom, leyó lo que tenía grabada, "Kim Yugyeom, un excelente hijo, hermano y novio, Eclipsando como una estrella fugaz, todo a su paso", no pudo evitar no sonreír, era cierto, alegraba hasta los peores momentos tan solo con su radiante sonrisa.

Se inco en la tumba, sus ojos su aguaron y las lágrimas salieron sin previo aviso.

—Hola, Cariño. —Sonrió con tristeza.—No te traje flores o algo por el estilo, recuerdo que en algún momento hablamos de la muerte, tú dijiste que el día que te mueras no querías flores, ni un "Te extraño", mucho menos "Te amo", dijiste que te lo dijéramos cuando estés vivo, ¿Sabes?, claro que te lo dije, pero no me siento bien si no te lo digo, al fin entendí, que el dinero no compra la felicidad, antes no me había dado cuenta, tenía todo, dime amor, ¿cómo te compró?, yo solo te quiero a ti.—Las lágrimas no paraban de salir.—Tu partida esta matandome, es enserio.—Sorbió por la nariz.

Jungkook había regresado a su casa, se había encerrado, suspiró frustrado.

Se recostó en el piso sollozando.
Las ganas de querer morir habían vuelto, se levantó del piso frustrado.
Es tu culpa-Susurraban las voces.

—No lo es, No lo es.—Decía Jungkook tapándose sus oídos con fuerza.

ES TU CULPA-Gritaban.

—No, no.—Se dejó caer al piso, cerrando sus ojos con fuerza.

SI LO ES, ES TU CULPA.-Gritaban, cada vez con más fuerza.

—Lo, es, es mi culpa.

Mirate, debiste morir tu, no él.

La puerta de su habitación fue abierta, su madre entró preocupada.

—Jungkook, Jungkook, basta.—Jungkook abrió sus ojos y se abalanzó contra su madre, ella lo abrazó fuertemente, sollozando frustrada.

La madre de Jungkook lo dejó un momento, a petición de él.

—Woo Sung, creo que lo correcto es llevar a Jungkook a Seúl.—Suspiró abrazando a su esposo. Él asintió, sacando su móvil.

Llamada telefónica :

—¿Sí?, ¿Quién es?.

—Buenas tardes, habla el señor Jung Woo-Sung, la señorita Kim Jisoo, nos dijo que nos podíamos comunicar con Usted, ya que necesitamos un Spicólogo.—Finalizó de hablar.

—Espere, ¿Jung Woo-Sung?, ¿El actor?, ¿esposo de Lee Bo Young?.—Se le escuchaba Emocionado.

—Si.

—Oh, pues bueno, claro que puedo, ¿requieren sacar una cita?. Les mandaré la ubicación de mi consultorio.

Fin de la llamada telefónica.

—Eso fue extraño.—Dijo su esposo viendo su celular.—Hoy mismo volaré a Seúl para buscar residencias.—Suspiró y le sonrió a su esposa.

—Está bien.—Abrazó a su esposo.

Jungkook se encontraba hecho bolita recargado en la pared de su cuarto, todos los sentimientos hacía Yugyeom se aferraba a él, provocado una angustia terrible.

Se levantó de su lugar y caminó directo a un espejo, se miró, noto sus ojeras más pronunciadas, sus labios blancos con grietas, sus pupilas dilatadas, levantó su camisa negra y noto que sus abdominales habían desaparecido.
Asco, no pudo evitar no sentir asco, asco por lo que era antes, a comparación de lo que es, asco por su apariencia y asco por su miserable vida.
Lleno de rabia con un puñetazo, logró romper aquel espejo, su respiración era dificultosa, tomó un vidrio entre sus manos y sin pensarlo,cortó su delicada piel del brazo, viendo como se formaba un camino de sangre y está caía con facilidad, inmediatamente se concentró en el dolor físico, que por unos instantes olvidó el Sentimental.

Jungkook había pedido a una de sus trabajadoras de confianza que limpiará el desastre causado por el.

Había pasado aproximadamente una hora, desde que decidió cortar su delicada piel.

Su madre entró sin previo aviso, lo que le sorprendió.

—Escucha Cariño, tu padre viajará a Seúl, despidete de él, nosotros lo alcanzaremos mañana.—Dijo su madre, con una falsa sonrisa.

Jungkook quería preguntar el por qué, pero tampoco tenía muchas ganas de hablar, decidió pasarlo desapercibida, haciendole caso a su madre, se dirigió obedientemente hasta la planta baja para despedirse de su padre, agradeció a lo cielos que llevaba sudadera de manga larga, sino su cortada hecha minutos atrás habría sido revelada, y claramente eso no hubiera salido nada bien.

—Nos vemos Mañana.—Dijo su padre, abrazando a Jungkook. Jungkook asintió en respuesta.

—Cuidate, cariño.—Sus padres se abrazaron y sin importarles se besaron.

—Creo que deberías ir a  la tumba de Yugyeom.—Dijo su madre, una vez su padre salió de casa.

—Hoy fuí.—Dijo Jungkook cortante.

—Deberías despedirte.—Mordió su lengua inmediatamente, tras lo que había Dicho. Jungkook frunció el ceño.

—¿Por qué?.—Preguntó.

—Por que, quizás estemos allá una semana, y no podrás ir a su tumba.—Se encogió de hombros.

—De acuerdo.—Decidió.—Pero, ¿Por qué estaremos allá?.—Volvió a fruncir el ceño.

—Por qué, tu padre está viendo temas de su trabajo, creo que es una serie.—Desvío la mirada.

—Ya veo.—Se encogió de hombros, suavizando su mirada.—¿Podrías decirle a un chófer si me lleva?.—Pidió amable.

—Claro.

Aquel chico se encontraba sentado en la tumba de Yugyeom.

—¿Sabes?, morir de amor es un dolor asumible, lo insoportable es resucitar solo.—Sonrió mientras las lágrimas caían.
—Kim Yugyeom, quiero que sepas que yo nunca quise perderte y quedarme con sólo un recuerdo, me pongo triste en las noches que de ti me acuerdo.—Río irónicamente, todas las malditas noches, todo el maldito tiempo piensa en el, lo recuerda, eso es sufrimiento.

Por órdenes de su madre, pidió a su chófer volver temprano, se encontraba caminó a su casa.

Al día siguiente.

Jungkook despertó, o mejor dicho, no durmió pero se levantó de su cama, su madre le había dicho que su vuelo salía a las 7:00am, por lo cuál se levantó a las 6:00am, el día anterior, personal de apoyo le arreglaron sus maletas, por lo cuál el solo empaco lo más básico, audífonos, losiones, velas de olor ya que era muy sencible a los olores.

Se vistió cómodamente, con un pans gris, tenis negros, playera negra y sudadera negra.

Su madre lo había invitado a desayunar con ella, pero él se negó con él pretexto "Es que me dolerá el estómago, por que es muy temprano", pero lo que no sabía su madre es que su hijo no había estado comiendo.

Ambos se encontraban en el avión, apuntó de despejar.

—Cariño, tienes que saber, que la principal razón de ir a Seúl es por que asistirás con un psicólogo.—Comentó ella, apenas el avión despejó.

Jungkook se quedó perplejo, sintiendo un gran enojo.

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Hola de nuevo xd.
Bueno, io quería agradecerles a las personas que comentaron y votaron en el capítulo pasado :)..

E igual quería agradecerle a Nada-del-Agua, por su atención y porque me mandó mensaje, (Ya tu sabe) la amo UwU..

Haaa e igual a JoselinRamirez926 por qué agrego mi Fanfic a su lista de lectura UwU..

PD: Me inspiré en Don't Leave Me. Xd xd.

El mejor Psicólogo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora