Sweet Dreams +18 (Gabrinette Collection)

Amore: I

Contenido maduro. Bienvenido

Resumen: Hawk Moth creó un nuevo campeón, Amore. Un akumatizado con alas de ángel y una cerbatana como arma que puede lazar darlos hechizado con la magia del amor y también del odio.

La historia más complicada y larga de escribir.

V

Ladybug corrió por los tejados, afuera era un alboroto, la gente peleaba entre sí, algunos llorando, como si les hubiera roto el corazón y había un pequeño grupo donde no le importaba estar follando duro en los lugares más públicos de la ciudad. Y ahora tenía que estar huyendo por culpa de Amore y por supuesto, de Chat Noir que estaba como gato en celo.

Si, al menos hace 20 minutos Amore le había lanzado un dardo de amor al gatito del París y este actuaba de manera exasperante y melosa distrayendo a LadyBug de su objetivo primordial (aún más de lo que siempre es).

Ladybug se escondió en un callejón pensando en sus ventajas y desventajas. Primero sabía dónde estaba el Akuma, en la cerbatana, sabía que sin eso no podía lanzar más dardos de amor y también no podría controlar el deseo y el impulso de la gente que actuaba de manera que el querría, aprovechando su odio. Pero Amore era demasiado ágil en el vuelo era casi imposible atraparlo. Hace poco estuvo a punto de fallar, no se podía dar el lujo de atacarlo sabiendo que su fuerte era el vuelo. Y para colmo el último Lucky Charm le había dado un bendito corcho ¿que coño iba a hacer con eso?

Por otro lado en la mansión Agreste, Gabriel el famoso diseñador de moda salía de su guarida. Gabriel no sabía si había creado el mejor Akuma de su lista o el más parlanchín. La línea era muy delgada, aún podía escuchar la risa y el canturreo de Amore en su mente. Tuvo que dejar su transformación y su milagro resguardado en la caja fuerte porque el bullicio de todos en París resonaban en su mente, podía sentir sus emociones rotas y... Gemidos?. Era demasiado para el, no podía controlar apropiadamente la entrada de emociones que venían como bestia salvaje.

Se quitó el saco y el chaleco, estaba cansado, últimamente el equilibrio entre su forma civil y su identidad de villano lo estaba sacando de balance. No dormía bien, pero porque dormir si no se sentía descansado, como detestaba a esos héroes ridículos con trajes ajustados, tan heroicos que rayan en lo absurdo. Ah, y para colmo se venía encima el día de los enamorados. En gran medida era bueno en el sentido comercial pero más allá de ello, jóvenes hormonales declarándose, rosas, bombones, y si también preservativos, todo ese aura de alegría y felicidad, romance, obviamente era el mes miserable para sus akumas, porque aunque hubiera emociones negativas, las emociones positivas las superaban con creces, y era difícil encontrar la emoción perfecta cuando su mente se inundaba en tonterías de enamorados. Ahora, había un Akumatizado volando solo una corta tela que tapaba su parte baja, alado y con una cerbatana que hacía el caos en París. Un poderoso Akuma pero también algo parlanchín.

Pero por lo menos Adrien estaba a salvó, la Mansión Agreste era una fortaleza.

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-My Lady! -Ronroneó Chat Noir saltando de tejado en tejado sosteniendo un ramo de rosas para su amada Ladybug

-Me debes estar jodiendo... Agh!- murmuró Ladybug, lanzó su yoyo escapando del gatito de París que la buscaba.

Escuchó la multitud acercarse, sintió el aire correr con fuerza y el parloteo incesante de Amore. El olor a rosas estaba cerca. La azabache miró a todos lados y se lanzó por los aires tomando el impulso suficiente para llegar al balcón de... la Mansión Agreste.