To be continued...

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Capítulo Final.

Vera.

El tren se detuvo por completo y procedí a bajarme. Ya pude ver por la ventanilla a mi hermana sentada en una banca, esperando por mí.

Sally se acercó a mí en cuanto me divisó, con una sonrisa ampliamente alegre. Me dio uno de sus cálidos abrazos.

-Estás loca para irte así, Vera. Estábamos muy preocupados -me dijo.

-También me alegra verte, hermanita -respondí al regaño.

Volvió a sonreír. ¿Se había cortado el cabello? Sí que lo había hecho. Ahora lo llevaba a la altura de los hombros, como yo.

Con mi hermana teníamos pequeñas diferencias en cuanto a lo físico: Sally era más enana, tenía los ojos del tamaño de dos platos, y su boca era más grande. En lo que restaba, éramos casi iguales. El color de ojos, el cabello, la nariz.

Nos adentramos al viejo coche de mamá y, mi hermana menor por un año, condujo hacia casa.

-¿Y bien? ¿Algo que quieras rescatar de esta aventura? -curioseó.

Me encogí de hombros.

-Fue divertido mientras duró -solté con un tono casual.

-¿Algún chico londinense? -sonrió divertida.

-Ese es un tema que sin dudas tenemos que charlar -confesé.

-¡Por supuesto! -exclamó Sally.

Llegamos a aquella casa ubicada en el centro de York. Cuando abrí la puerta, vi a mi madre sentada en el sofá negri de la sala, leyendo un libro. Lo dejó de inmediato cuando me vio.

-¡Vera! -la felicidad se notaba en su rostro.

Nos dimos un gran abrazo. Y al separarnos noté sus ojos verdes húmedos.

Si alguien viera a simple vista a mi madre, pensaría que es una adolescente. Un cuerpo muy buen cuidado para tener cuarenta y dos años, sonrisa perfecta e iluminada -definitivamente mi hermana y yo sacamos esa sonrisa-, y su cabello lacío de color rubio a la altura de los hombros.

-No vuelvas a hacernos esto, Vera -replicó.

-No prometo nada -bromeé.

-Es lindo tenerte en casa -comentó esbozando una sonrisa.

-Es lindo volver -le confesé algo emocionada.

Y bien, Vera, de vuelta a tu vida de siempre.

Continuará...

Se que esperaban más, pero no se pongan tristes aún, queda el epílogo y con eso despidiremos a esta historia...

In The Eye Of The Storm [#1] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora