Era el primer día de clases para Harry en New York y no tenía idea de lo que iba a suceder, solo pensaba en cómo empezar a hablar a los demás chicos para poder tener al menos un amigo o amiga con quien salir los viernes por la noche.
- Bueno chicos, hay un nuevo compañero y más les vale portarse bien con él- después de las palabras de la profesora un chico alto, de cabello color café oscuro y ojos grises entró en la clase.
- Hola, me llamo Harry Evans, tengo 13 años y espero llevarme bien con ustedes- hablar solía resultarle muy fácil a Harry, solo veía a un punto fijo yse forzaba a mostrar una hermosa con la que había conseguido tantos amigos en su antigua escuela, y para su suerte había funcionado, y ahora todos querían estar cerca de él.
- Bueno pueden salir al recreo- luego de eso unos pocos salieron del curso mientras que la mayoría se habían quedado para intentar entablar conversación, pero él no estaba interesado en ninguno de los temas de los que hablaban, así que decidió salir de ese sofocante lugar e ir a la escalera china que había visto cuando llegó.
- ¡Hola! - Harry estaba jugando tranquila y solitariamente en la escalera china cuando escuchó una voz dulce y temerosa a su lado provocando que se cayera.
- ¡Perdón, no era mi intensión hacerte caer! ¿estás bien?
- Sí, tranquilo, es que estaba despistado, perdón ¿Tu eres...?
- Me llamo Mike Harrison, 12 años- un chico de cabello castaño, ojos tan azules como el mar y de estatura medianamente baja estaba frente a Harry mientras le sonreía totalmente apenado.
- Yo me llamo Harry Evans, 13 años- a él le había dado gracia la peculiar forma de presentarse, por lo que había decidido imitarlo, solo que a diferencia de Mike él había sonado bastante serio.
- Así que ¿estás en octavo?
- Acertaste ¿y tú Mike? ¿Estás en?
- En séptimo de básica, pero soy tan bajo que parezco de sexto - dijo Mike haciendo un tierno puchero.
- Bueno, no es que sea un problema ahora, siempre hay la posibilidad de que luego crezcas y todo cambie
- A claro, es que tú eres un gigante que mide 1,70 aunque tenga 13 años
- No mido eso, yo mido 1,72 para tu información
(Desde aquí pueden poner la canción)
Habían pasado casi 4 años desde ese momento, pero ya nada era como antes, ambos lo notaban, pero intentaban ignorarlo sonriendo unos con- Llegué- Mike llegó muy sonriente de volver a ver a su mejor amigo después de las largas vacaciones de verano, y aunque hubieran tenido problemas antes de estas él estaba decidido a disculparse con él y aclarar las cosas.
- Y ahora qué quieres Mike- dijo Harry muy cortante, lo cual hizo que Mike maldiciera por no haber podido disculparse antes.
- Aclarar las cosas, porque ambos sabemos que necesitamos hablar
- Tuviste dos malditos meses para disculparte, creo que es muy tarde para eso ¿no crees?
- Harry por favor, no quiero que sigamos así, eres mi mejor amigo y después de todo...- después de las palabras del chico hubo un silencio un poco incómodo para ambos que hizo que Mike se lamentara inmensamente de haber dicho eso.
- No puedo creerlo ¿Eres o solo te haces el estúpido?
- ¿Podrías simplemente dejar de ser un completo idiota y decirme directamente qué te pasa?
- ¿Puedes dejar tú de comportarte como un idiota y por favor escucharme? Para empezar ni si quiera he podido entender por qué te enojaste conmigo esa vez, y menos entiendo por qué te alejaste- los sentimientos acumulados de Harry solo hacían que la situación empeorara, por lo que cuando lo dijo, fue muy tarde para arrepentirse.
- ¿¡Acaso no entiendes!? ¡Me gustas! ¿¡Cómo mierda debería reaccionar cuando la persona a la que amas está saliendo con alguien más y la única solución que encuentro es alejarme!?
- ¿¡Me estás reclamando por estar con alguien luego de que me rechazaras!? ¿¡Me estás reclamando cuando tú también estás con alguien!? ¡Y ni si quiera estoy saliendo con alguien como para que me vengas con tus aparentes celos
La cara de Harry perdió todo tipo de color en su cara ¿quién le había hecho creer a Mike que él estaba saliendo con alguien cuando a la única persona que podía mirar era a él?
Pero lo que sin duda le hirió más fue que Mike pensara que él le había rechazado, esa vez estaba demasiado borracho como para reconocer a las personas, y se enteró luego de una semana que había rechazado a Mike, pero como él no mencionó nada porque pensó que Mike había estado también borracho y no recordaba nada.- M-Mike, te puedo explicar todo, solo déjame...- ambos chicos tenían un nudo en su garganta, ambos estaban decepcionados del contrario en niveles increíblemente altos.
- Eso era lo que inicialmente venía a hacer, pero ahora lo último que quiero es escucharte, porque al parecer crees más en rumores que en tu "mejor amigo"- tanto Mike como Harry sabían que ese había sido la gota que había colmado el vaso, esa gota podía describirse como el fin, el fin de la amistad, y el fin de los sentimientos- No quiero que te me vuelvas a acercar, necesito mi tiempo y tú necesitas es tuyo, no podemos seguir con esto, no por ahora- ambos estaban destrozados por las palabras del contrario.
Los corazones de ambos dolían como si un infierno se hubiera desatado en ellos, pero que ni se diga de su cabeza; Harry solo podía pensar en qué hubiera pasado si no hubiera hablado mientras que Mike solo podía pensar en todos los momentos en los que pasaron juntos, como si su propia mente intentara hacer que Mike dijera que no era verdad, que no quería alejarse de él, y que nunca iba a dejar de tener sentimientos hacia él.
Mientras Mike corría en la dirección contraria al que alguna vez había sido su mejor amigo él se decidía entre ir detrás de la persona a la que amaba o respetar la decisión del más bajo.
Mike quería que Harry fuera detrás de él, quería que la persona a la que más amó demostrara aquellas palabras que había dicho durante la discusión, pero no hubo ninguna mano al rededor de su muñeca evitando que continuara.
Cuando Harry decidió ir detrás de él era muy tarde, él había desaparecido de su campo de visión
Él ya no estaba más.
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Entre besos... y lágrimas
Teen FictionNadie nunca está listo para perder al amor de su vida y a su mejor amigo, pero ¿alguien está dispuesto a pelear por ese amor a pesar de todo? No siempre te dicen que una cosa tan pequeña puede destruir hasta la muralla más fuerte, porque una grita e...